El Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) realizó tres devoluciones de frecuencias “de común acuerdo” con el Viceministerio de Telecomunicaciones y “conversa” con esta rectoría sobre las bandas para servicios móviles avanzados o de IMT.
Los servicios de telecomunicaciones móviles internacionales (IMT) incluyen redes a partir de tercera generación (3G) para telefonía y datos celulares.
“Desde hace algunas semanas estamos en un proceso de conversaciones con el Grupo ICE, con el fin de analizar la disposición futura de las bandas que técnicamente pueden ser utilizadas para servicios IMT”, respondió Edwin Estrada, viceministro de Telecomunicaciones.
El Ministerio de Ciencia, Tecnología y Telecomunicaciones (Micitt), al que pertenece el Viceministerio, señaló que ninguna de las frecuencias devueltas se puede utilizar para servicios de quinta generación (5G).
Esta es una tecnología cuyo despliegue se espera para los próximos años.
Dictado de Ley |
---|
Causas para la extinción y resolución de una concesión de frecuencias: |
-No utiliza las frecuencias para el fin solicitado. -Incumplimiento de las obligaciones y condiciones establecidas. -Incumplimento del pago de la contribución al Fondo Nacional de Telecomunicaciones. -Incumplimiento del pago de las tasas y cánones establecidos. -No cooperar en casos de emergencia. -Reincidencia en infracciones muy graves. -Vencimiento del plazo. -Imposibilidad de cumplir debido a medidas adoptadas por el Estado. -Rescate por interés público. -Acuerdo mutuo entre el concesionario y la Administración. -Disolución de la persona jurídica concesionaria. |
Fuente: Artículo 22 de la Ley General de telecomunicaciones |
LEA MÁS: Así funcionan las redes 5G, que ya avanza en el mundo mientras Costa Rica corre para no quedar atrás
Cadena de revocaciones
Las devoluciones de frecuencias del ICE y las que ya había realizado Racsa se producen al tiempo que la Rectoría ha encontrado 69 casos que eventualmente podrían concluir en una revocación, extinción o lesividad de los títulos habilitantes o concesiones otorgadas por el Poder Ejecutivo.
Antes de la apertura del sector de telecomunicaciones, hace diez años, las concesiones eran otorgadas por la extinta Oficina Nacional de Radio, que estaba adscrita al Ministerio de Gobernación y Policía.
Actualmente la Superintendencia de Telecomunicaciones (Sutel) realiza los estudios técnicos de las bandas de espectro y el Micitt otorga las licencias o las revoca de acuerdo a los criterios y el procedimiento establecidos en la Ley General de Telecomunicaciones.
De los 69 casos identificados, el Micitt indicó que ya hay 24 revocaciones o extinciones en firme.
Son casos que corresponden a distintos concesionarios y servicios del espectro radioeléctrico, que incluye frecuencias que tenían empresas de radiolocalización, una radioemisora, una cooperativa y una empresa municipal de servicios eléctricos, entre otras.
De ellos, 14 casos –que ya tienen el “en firme” del Poder Ejecutivo– están en trámite en la Procuraduría General de la República para iniciar el proceso judicial de contenciosos por lesividad.
También se incluyen 10 casos que se encuentran pendientes de resolución de los Tribunales de Justicia y que corresponden a servicios troncalizados (o de radiocomunicación en empresas), los cuales fueron otorgados antes de la entrada en vigencia de la Ley de Telecomunicaciones.
Estrada respondió que la legislación no contempla el pago de indemnizaciones por parte del Estado, “salvo que así sea dispuesto por parte de los Tribunales de Justicia”, para proceder a la lesividad o extinción de las concesiones.
LEA MÁS: Racsa devuelve frecuencias claves
Tres devoluciones, varios usos
Las tres devoluciones de frecuencias realizadas por el ICE fueron realizadas en diciembre del 2016 y en febrero y abril del 2018.
De acuerdo con los datos brindados por Micitt, se trata de 1.642 MHz de 54 segmentos de espectro que fueron devueltos por el ICE propiamente.
Si se suman los 4.713 MHz, de 15 segmentos de espectro, que entregó Radiográfica Costarricense S. A. (Racsa), el Grupo ICE devolvió 6.355 MHz.
Estrada insistió que con el ICE se realizó un trabajo conjunto y se llegó a acuerdos de devolución. Tampoco hay indemnizaciones a la fecha.
El Viceministro explicó que algunas de estas frecuencias devueltas tienen usos para radiocomunicación de banda angosta (fijo y móvil) y servicio fijo por satélite, entre otros. “De las frecuencias devueltas a la fecha, ninguna puede utilizarse para sistemas IMT del servicio móvil”, recalcó.
Estrada indicó que actualmente el Plan Nacional de Atribución de Frecuencias (PNAF) establece cuáles son las bandas de espectro que se utilizarían para 5G.
Con la transición a la televisión digital se liberará la banda de 700 MHz que será utilizada para servicios móviles IMT.
Ahora se debe esperar lo que establezca en el 2019 la Unión Internacional de Telecomunicaciones sobre la disposición de bandas altas para 5G.
Eso podría introducir cambios al PNAF.
LEA MÁS: ICE apenas usa 27% de frecuencias por las que paga millones de canon
En los casos de los otros operadores móviles no se registran devoluciones de frecuencias.
Más bien, Claro y Movistar habían obtenido una segunda concesión que les viene permitiendo ampliar sus servicios de banda ancha móvil con tecnologías de 4.5G.
El ICE también anunció que continuará con las inversiones de mejora en los servicios de datos con aumentos de velocidad bajo los parámetros de 4.5G, enfocándose en los puntos de alta concentración de clientes, mayor demanda de servicios y expandiendo la cobertura a las diferentes zonas del país.
Tanto para el ICE como para Racsa la devolución de frecuencias resuelve la obligación de destinar recursos millonarios por concepto de pago anual que deben realizar del canon.
El ICE, por ejemplo, apenas usaba en el 2016 el 27% de las frecuencias, según un reporte de la Sutel, y tenía que pagar casi ¢5.000 millones.
Racsa, por su parte, debió cancelar ¢214,3 millones en el 2015, correspondientes al canon del 2014.
Muchas de las frecuencias que conservaban estas entidades fueron obtenidas antes de la Ley de Telecomunicaciones, cuando solamente se comunicaba a la Oficina de Radio y ésta procedía a confirmar que se estaba usando para otorgar el título habilitante.
En aquel entonces no se debía pagar ni los cánones de regulación, que se cancela a Sutel, ni de frecuencias, que se paga a Hacienda.