Microsoft acelera y profundiza su oferta de soluciones en la nube y recientemente anunció el lanzamiento de Windows 365 Cloud, que dará la opción a los usuarios de disponer del sistema operativo en sus equipos de forma tradicional y ahora mediante el esquema de servicio.
“El poder de la nube nos permite cada vez más sacar productos innovadores”, dijo Daniel Verswyvel, gerente general de Microsoft Centroamérica.
El ejecutivo explicó que se ofrecen las facilidades de uso, con acceso remoto, para utilizar los contenidos y plataformas en diferentes modelos y dispositivos a través del navegador o de otras formas aún por definir. El servicio se empezaría a comercializar en este segundo semestre. Las computadoras seguirán incorporando el sistema operativo Windows y los usuarios tendrán la opción en la nube.
“Esto es un paso más en el camino de transformación”, reiteró Verswyvel, en la conversación con EF.
¿Especialmente para las empresas que implicará?
Se va a tener acceso de una manera totalmente transparente a tus ambientes de trabajo desde las computadoras de la casa o de otros dispositivos sin necesidad de tener toda la infraestructura de oficina.
“La transformación digital ya no es opcional para muchos de los clientes. Este es solo uno de los ejemplos de lo que viene saliendo y que complementa nuestra oferta. Lo que se debe tener presente es cuál es este mundo híbrido al al que estamos llegando después de los momentos tan difíciles. El objetivo con productos como este es que el usuario tenga un abanico de opciones para que su mundo híbrido funcione de manera única”.
La seguridad, especialmente por el ataque que sufrió Microsoft, será clave.
Hay que pensar la seguridad de una manera diferente.
“Estábamos acostumbrados a que la seguridad de las empresas era perimetral, donde el objetivo era que cualquier eventualidad externa no penetrara las barreras externas de la organización. Hoy, con la manera distribuida en la que manejamos los datos, los dispositivos remotos en la oficina, se requiere de elementos de seguridad más distribuidos.
“En eso está trabajando Microsoft en todas sus plataformas: en saber quién es la persona que está accesando independientemente de dónde esté. Se define los perímetros de seguridad sobre la identidad del usuario, leyendo trillones de señales al día de todo lo que pasa con nuestros productos para definir acciones concretas de seguridad”.
¿Cuáles son las perspectivas que están viendo de crecimiento en la nube especialmente para las aplicaciones empresariales?
Pasamos por un momento muy complejo con todas las cosas que nos disparó esta pandemia. La tecnología ha sido un aliado fundamental de las empresas para tomar acciones para operar, con trabajo remoto, salud, educación, comercio electrónico.
“Prácticamente todas las funciones relevantes están basadas en la nube y eso nos permitió apoyar a los clientes rápidamente. El trabajo, sin embargo, es cómo pasamos de digitalizar una cantidad de procesos a una transformación digital real.
“Hacia adelante toda compañía exitosa tiene que tener una estrategia digital robusta, que incluye cómo generar una cultura digital, procesos de innovación que permitan apalancar la tecnología para conectarse con los clientes y con los canales de distribución, y cómo inyectar inteligencia a los procesos para avanzar más rápido.
“Algo que cambió radicalmente en la pandemia es que el usuario que no se había digitalizado, se terminó de digitalizar. Ese cambio en el usuario es determinante para que las compañías sean exitosas en la fase que viene de aquí en adelante. La nube es uno de los apalancadores más importantes para esto”.
Todavía hay resistencia y hay quienes culpan a la tecnología.
Hay un poco de todo. Hay casos formidables de resiliencia, avance y velocidad que hemos visto en Centroamérica y en Costa Rica principalmente. Por ejemplo, la Universidad Latina y la Universidad Americana (UAM) llegaron a 30.000 estudiantes recibiendo clases a través de Teams. El Ministerio de Educación Pública trabajó con Microsoft, para alcanzar a 68.000 docentes y casi 1,2 millones de estudiantes. En Coopevictoria, que es una cooperativa agrícola tradicional, los usuarios migraron a Teams.
“Tenemos que pasar de los pocos ejemplos sobresalientes a los muchos ejemplos masivos de transformación. Hay mucho por construir. En las pequeñas empresas tenemos un programa. Pero necesitamos que todas las empresas (pequeñas, medianas y grandes) entiendan que la tecnología va a ser un apalancador para que su negocio dé el siguiente paso”.
La digitalización implica cambios en el modelo de negocio.
Hablamos de intensidad tecnológica, que es la capacidad como país, entidad o empresa de tener talento capacitado para tomar la tecnología y convertirla en una apalancadora del negocio. Es muy importante que exista esa combinación de las capacidades de las personas con el entendimiento de los negocios y del consumidor.
“La nube es una de las herramientas que nos va a ayudar a democratizar la tecnología y el acceso a los datos. Para eso se necesita que sigamos subiendo la intensidad tecnológica”.
¿Cuáles son los desafíos?
Hay muchas prioridades en los negocios y gobiernos. La pandemia ha requerido hacer inversiones significativas. Necesitamos entender cómo rompemos las barreras para entender cómo la tecnología nos ayuda a acelerar la economía.
“La barrera es pensar en el cómo, no tanto en el qué. Cómo hacemos implementaciones más rápidas, el modelo de ciberseguridad, el uso de inteligencia artificial para entender mejor a los clientes de manera predictiva.
“Debemos entender que las dificultades por las que hemos pasado son complejas. Pero estamos orgullosos también de haber formado parte de los procesos que ayudaron a contener un mayor impacto negativo. Hemos aprendido también que la cercanía con los clientes es determinante para apoyar a que el impacto negativo lo podamos convertir en positivo hacia adelante”.