En 1998, Fabián Vargas inició su empresa de desarrollo de sitios web Zews en Pérez Zeledón, cuando aún pocos comercios o empresas agropecuarias tenían alguna página en Internet.
Como el mercado es pequeño, Vargas empezó a contactar empresas nacionales que tenían sitios mal diseñados y desarrollados. Al contactarlos, muchos prospectos se negaban a hacer negocios y hasta le colgaban el teléfono cuando les decía dónde se ubicaba la compañía.
No se amedrentó. Para eliminar resistencias, escribió en su sitio web que “un proveedor responsable atenderá bien aunque viva en otro país” y aplicó los tips que recomienda a sus cliente para la optimización en Internet, conocida con el concepto de Search Engine Optimization (SEO).
Actualmente Zews tiene clientes en Dominical, Uvita, Puerto Jiménez, Sarapiquí, San José, Palmares de Alajuela, Moravia, San Marcos de Tarrazú y Estados Unidos. Muchos localizaron la firma a través de Google, se comunican vía Skype y cancelan los servicios a través de PayPal o de simples transferencias bancarias. “Ahora hay más clientes que saben que es posible desarrollar proyectos mediante Internet”, argumentó.
Pese a diversas limitaciones y hasta una inicial desconfianza de los clientes, en zonas como Pérez Zeledón, San Carlos y Guanacaste prosperan desarrolladoras de software y de sitios web que dieron el salto para atender clientes del Área Metropolitana, América Central y EE. UU.
“Aproximadamente el 50% de las empresas en la zona norte exportan regularmente o tienen ya registradas algunas ventas en otro país”, afirma José Pablo Rodríguez, fundador en el 2002 de la compañía Nortek en Ciudad Quesada, que hoy es Avantica San Carlos, e impulsor de la Cámara de Empresas de Tecnologías de Información y Comunicación de la Zona Norte (Cetic-ZN).
Salir para crecer
En las zonas rurales se localizan tres tipos de empresas. Están las firmas de desarrollo de software , de sitios web y de servicios.
Están coexisten con micro negocios –de calidad heterogénea– de soporte de redes, mantenimiento de equipos y creación de sitios web, e incluso algunas que instalan sistemas de facturación o punto de venta.
Estas se mantienen en sus regiones por las facilidades de atender directamente a los clientes o porque su propietario decidió no crecer y quedarse en la zona.
También están sedes regionales de firmas nacionales, como Grupo Babel y Avantica.
El tercer tipo incluye a desarrolladoras que dieron el salto desde su localidad a brindar servicios a clientes en el Valle Central e incluso en otros países, pues las regiones resultan un mercado pequeño para su crecimiento.
“No se podría subsistir solo con clientes de la zona”, afirma Kristian Herrero, propietario de Soluciones Web, que está ubicada en Bagaces, Guanacaste, cuenta con seis personas y tiene la mayoría de sus 350 clientes en San José, además de Panamá, Nicaragua y EE. UU.
Asimismo, Ronald Jiménez, de la firma Roldma, ubicada en Palmares de Alajuela, afirma que la mayoría de sus clientes son de San José pues en la región de Occidente (que cubre también a San Ramón, Naranjo, Grecia y Atenas) no hay empresas en la cantidad y el tamaño necesario para que el negocio crezca solo con proyectos locales.
Roldma es una firma enfocada en plataformas y apps para logística y emplea a tres personas.
Grupo Babel nació en Pérez Zeledón en 2002 y al año sus fundadores –los hermanos Edgar y Esteban Oviedo– la trasladaron al Valle Central, dejando una pequeña sede de 15 personas en la actualidad en la zona sur.
Edgar Oviedo, CEO de Babel, explicó que es muy difícil tener toda la empresa en una zona rural, pues los márgenes son bajos y los consume la operación.
Otro caso es el de Avantica San Carlos, que nació en el 2002 como Nortek, tiene 80 empleados y para expandir más sus negocios se unió hace algunos años a Avantica Technologies.
Potencial y limitaciones
Las zonas rurales son atractivas debido a los menores costos.
Las firmas tienen disponibilidad de informáticos preparados por sedes regionales de las universidades, muchos de los cuales optan por mantener su estilo de vida y no trasladarse al Área Metropolitana, donde los gastos son hasta 30% superiores.
La experiencia de San Carlos convenció a Avantica –cuya sede está en Los Yoses y fue fundada por los hermanos Mario y Luis Carlos Chaves, ambos de Liberia– de crear una sede en la cabecera de Guanacaste. Ahí emplean a 15 personas.
Babel reprodujo la experiencia de una sede rural en Latagunga, cabecera de la provincia de Cotopaxi en Ecuador.
Pero el potencial de las desarrolladoras en las zonas rurales se ve limitado por deficiencias en la formación de los informáticos, la carencia de personal bilingüe, la falta de calidad de los servicios de Internet y las limitaciones para tener mayor acceso a otros mercados, dice Rodríguez.
Luis Carlos Chaves, CEO de Avantica y presidente de la Cámara de Tecnologías de Información y Comunicación (Camtic), reconoció que ahí las firmas se ven obligadas a invertir más en elevar el nivel de los informáticos que en el Valle Central, pues en las regiones la brecha en la formación es mayor.
En Guanacaste, por ejemplo, se encuentran “grandes” deficiencias en la preparación de los informáticos, pese a la presencia de las universidades, afirmó Herrero, de Soluciones Web. “Formar a un muchacho nos cuesta seis meses”, aseguró.
Aún así, las empresas de las regiones ofrecen tecnologías y servicios actualizados. Rodríguez, de Avantica San Carlos, dice que el 90% de las desarrolladoras en la zona norte incorpora tecnologías “alineadas” con las tendencias mundiales.
De esta forma también contribuyen para que sus clientes, en especial de esas mismas regiones, tengan tecnologías avanzadas.
Oviedo, de Grupo Babel, destacó que una firma como Zwet ayudó a que muchas empresas de la zona sur que ni soñaban con tener un sitios web ahora tengan presencia en Internet .
Productos, servicios y mercados
Tipos de empresas: Hay microempresas (1 o 3 personas), desarrolladoras con menos de 10 empleados y sedes de firmas ticas con planillas de hasta 80 empleados.
Servicios: Desarrollan e instalan software (web y móvil) y sistemas operativos; servicios en la nube, de asesoría, de infraestructura y redes, de aseguramiento de calidad de software, y de comunicación en redes sociales, en Internet y de mercadeo digital.
Mercados: Los micronegocios se enfocan en el mercado local por cercanía; firmas pequeñas con clientes en Valle Central y en exterior; sedes de firmas para todo tipo de clientes.
Fuente Firmas consultadas