Imagine que usted va a comprar un kilo de arroz o de frijoles, paga el precio completo y le dan solo dos tercios de lo que pagó. Algo parecido pasa en Costa Rica con Internet, un servicio que se considera básico.
Si bien hay avances, falta mucho más de los deseable en cobertura geográfica, penetración y calidad a casi tres décadas del ingreso de Internet al país, a una década de la apertura del sector y a tres años de la declaratoria de competencia del mercado el 7 de octubre del 2016.
“Las acciones para lograr mejoras sustanciales en Internet deben ser llevadas a cabo en conjunto por los diferentes actores del sector (operadores, Sutel, gobiernos locales, ministerios, entre otros) y deben ser acorde con los constantes avances tecnológicos”, dijo Luis Adrián Salazar, ministro de Ciencia, Tecnología y Telecomunicaciones.
LEA MÁS: Costa Rica avanza en Internet, pero por el carril lento
Los operadores y el gobierno dicen que realizan los mejores esfuerzos, ofreciendo hasta 300 Mbps a “precios competitivos”, como ejecutores de los proyectos del Fondo Nacional de Telecomunicaciones (Fonatel) e invirtiendo en redes e infraestructura en forma constante.
Las compañías de telefonía móvil –Claro, ICE y Telefónica– también destacan su voluntad para fortalecer las redes de 4G con tecnología LTE Pro.
Y Gilbert Camacho, presidente de la Superintendencia de Telecomunicaciones (Sutel), afirmó el 30 de setiembre anterior que espera que se dinamice el mercado con la publicación de los resultados de las mediciones de calidad de los servicios de Internet.
Vaso medio lleno
Todos los actores destacan los avances. “Costa Rica ha dado pasos importantes hacia la universalización de la banda ancha”, resaltó José Gutiérrez, gerente de regulación, comunicación y relaciones públicas de Cabletica.
La revisión de los datos puede dar otra perspectiva.
Según las estadísticas de la Sutel, en diciembre del 2018, las suscripciones a Internet fija no alcanzaban ni al 20% de las viviendas del país y a poco más de la mitad de la población, la gran mayoría con velocidades menores a los 10 Mbps.
Lo que se considera como Internet de banda ancha llegaba al 17% de la población en fija y al 95% en móvil, superando el promedio global y de los países en vías de desarrollo pero a mitad de camino de los desarrollados en fija (33%) y a distancia en la móvil (111%).
En las mediciones actualizadas, como el ranking de Ookla, Costa Rica era el 91 de 176 países en Internet fijo (con un promedio de 23,91 Mbps) y 101 de 145 países en Internet móvil (18,83 Mbps).
El índice de Netflix también muestra que otros 12 países superan la velocidad promedio que se obtiene en Costa Rica.
Incumplimientos
Los resultados de las mediciones de calidad que presentó la Superintendencia también permiten observar las brecha entre lo que contrata el usuario y lo que realmente recibe.
En el reporte de calidad del 2018 apenas un operador de Internet fija (Cabletica) estaría cumpliendo. Otros dos cumplían en poco más del 90% (Telecable y Tigo) y el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) no alcanzaba el umbral mínimo establecido del 80%.
LEA MÁS: Resultados de mediciones de calidad del 2018
La revisión de los resultados del visor de calidad al 2 de octubre del 2019 muestran que, de los cuatro operadores, sólo uno (Tigo) supera el umbral y que Cabletica apenas cumple la mitad.
Por provincias en algunos casos el servicio que estaba recibiendo el usuario era una tercera parte de lo contratado.
En Internet móvil el visor de calidad de Sutel también reportó, el pasado 2 de octubre, al ICE con un 81% de cumplimiento, superando a Claro (68%) y Telefónica (73%).
Medidas
Los operadores señalan que lograr mejoras en los servicios depende de múltiples factores.
Luis Carlos Monge, coordinador de comunicación corporativa de Telecable, apuntó a “mejorar la educación del consumidor”.
Agregó que su firma viene invirtiendo en la apertura de sucursales para acercarse a los clientes y asesorarlos en cuál es el servicio que realmente se apega a sus necesidades.
Gutiérrez, de Cabletica, recalcó los problemas de infraestructura que hay en el país y destacó los dos aumentos masivos de velocidad (sin costo adicional) implementados desde mediados del 2018.
Los operadores móviles coincidieron en indicar que se requiere más espectro radioeléctrico.
“Creemos que el país debe avanzar con el tema de la banda 700 Mhz, el dividendo digital” indicó José Pablo Rivera, gerente de de Regulación y Relaciones Institucionales de Telefónica. “Esta es la banda que nos permitirá cerrar la brecha de 3G y 4G en áreas rurales. Y por supuesto, poner sobre el tapete la discusión de las bandas 2.6 Ghz y 3.5 Ghz, necesarias para avanzar hacia el 5G”.
Carolina Sánchez, vocera de Claro, recalcó que son necesarias mayores facilidades y agilidad en trámites para instalación de infraestructura, incluyendo fibra óptica.
El Ministro Salazar también apunta a la articulación de actores para alcanzar la cobertura nacional con redes robustas, impulsar la inversión, actualizar la normativa y resolver los problemas en infraestructura y espectro.
Asimismo, destacó el cumplimiento de la labor de Sutel para asegurar la calidad.
Nada de esto es muy diferente de lo señalado en otras ocasiones y no está claro de qué forma, de esos factores, depende que se cumpla lo que se ofrece en los servicios.