
La firma Ad Astra Rocket Company, liderada por el exaustronauta costarricense Franklin Chang Díaz, entregó el estudio sobre el potencial en este cantón para generar energía de fuentes renovables utilizando hidrógeno y otras fuentes a la Municipalidad de Curridabat el pasado 10 de junio.
"El cantón posee un potencial de energías renovables (solar y eólico) capaz de producir aproximadamente el 58% del consumo energético total del territorio (electricidad y combustibles del transporte)", respondió Juan Ignacio Del Valle, director de operaciones de Ad Astra Costa Rica y coordinador del proyecto con la Municipalidad de Curridabat.
Del Valle explicó: "En la práctica, esto se podría traducir en la satisfacción completa de la demanda de energía eléctrica del cantón, o de la totalidad del consumo de diesel por el sector transporte público en el cantón".

Ad Astra había sido contratada por la Municipalidad mediante un concurso de licitación pública abreviada por ¢21 millones, el cual fue adjudicado en diciembre del 2015.
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Según Del Valle el estudio presentado a la Municipalidad constó de tres productos:

Un análisis de mercado y tecnologías, en donde se presentó un diagnóstico del potencial energético del cantón de Curridabat y una reseña del mercado de tecnologías de almacenamiento de energía con enfoque particular en el hidrógeno.
Un estudio de "Selección de Concepto", para determinar la arquitectura idónea para implementar las tecnologías del hidrógeno.
Y el diseño conceptual de una aplicación inicial para implementar la arquitectura seleccionada en la etapa anterior, incluyendo un análisis técnico y económico de las diferentes alternativas.
Parte del esfuerzo fue un análisis comparativo para determinar las escalas en que el hidrógeno es la opción idónea de almacenamiento, frente a alternativas como las baterías de litio, entre otras.
La Municipalidad de Curridabat no respondió las consultas enviadas por El Financiero el 27 de julio anterior.
Del Valle aseguró que se está trabajando con la Municipalidad de Curridabat para ampliar los resultados del estudio y divulgarlos próximamente a otras municipalidades del país.
"En estos momentos, nos encontramos a la espera de la decisión por parte de la Municipalidad sobre la continuación del proyecto con la implementación de la propuesta sugerida", afirmó.
Principales resultados
Para aprovechar los recursos energéticos disponibles se requieren sistemas capaces de almacenar la energía intermitente proveniente de las fuentes solares y eólicas.
Debido a las limitaciones de las regulaciones actuales, Ad Astra recomendó iniciar la implementación del proyecto en un sitio bajo control de la Municipalidad.
"El proyecto sugerido fue la instalación, a lo largo de tres etapas, de un sistema de generación renovable (solar) en el parque de Curridabat con almacenamiento híbrido a través de baterías y un sistema de hidrógeno", afirmó Del Valle.
Ese sistema sería capaz de cubrir la demanda energética de la iluminación del parque, la fuente de agua y la realización periódica de eventos públicos.
Después el sistema podría ser ampliado eventualmente para incluir otras aplicaciones de las tecnologías del hidrógeno como el transporte. En ese caso se propuso la implementación de un servicio público de bicicletas eléctricas de hidrógeno con alto rango de autonomía (ver fotografías).
Las aplicaciones energéticas del hidrógeno –ligadas a la generación de energía renovable– pueden enfocarse en la reducción de la demanda eléctrica del cantón, sustituyendo parte de la energía demandada de la red por energía producida y almacenada localmente.
También se puede implementar proyectos de transporte limpio, tanto público como privado, con la correspondiente reducción de la huella de carbono.
"La visión desarrollada en conjunto con la Municipalidad de Curridabat contempla la generación de energía en forma colectiva, por parte de los ciudadanos del cantón, y la utilización de las tecnologías del hidrógeno para el almacenamiento centralizado de esta energía y su aprovechamiento. De esta forma, los ciudadanos se convierten también en productores de energía y no solo consumidores", aseguró.
El hidrógeno es visto como el combustible del futuro, tanto por sus posibilidades de uso como por sus beneficios ambientales. Es un elemento químico muy ligero y abundante en la naturaleza, pero al no encontrarse en estado gaseoso se debe obtener mediante algún proceso.
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Potencial nacional
El especialista de Ad Astra aseguró que nuestro país posee un gran potencial de energía eólica y solar, capaz de satisfacer, por ejemplo, la totalidad del consumo nacional de combustibles fósiles.
"Estas energías están naturalmente distribuidas a lo largo de todo el territorio y su aprovechamiento requiere de mecanismos de almacenamiento para poder utilizarlas", afirmó Del Valle.
Explicó que el hidrógeno es uno de estos mecanismos, el cual tiene como ventaja una mayor viabilidad a gran escala y la capacidad de enlazar la generación eléctrica renovable con el sector transporte.
Esto sería particularmente cierto en los cantones ubicados en zonas con alta disponibilidad de recursos solares o eólicos, como Tilarán o la pampa guanacasteca, las zonas montañosas de Guanacaste y Los Santos.
"Las municipalidades, junto con las empresas de distribución eléctrica y las de transporte, pueden ser actores clave en el desarrollo de una economía energética basada en la generación distribuida de energía por los propios ciudadanos, su almacenamiento eficiente en forma de hidrógeno y su aprovechamiento en áreas como la generación de electricidad o el transporte público", aseguró Del Valle.
Agregó que el rol de las municipalidades sería la identificación del potencial existente en su cantó n y la promoción de las alianzas necesarias con las demás entidades necesarias (empresas de energía, transporte, tecnología, gobierno, organismos financieros, etc.) para hacer viables estas iniciativas.