Cuando Renato Rivero salió graduado de ingeniería en computación del Instituto Tecnológico de Costa Rica ya tenía claro lo que quería hacer.
Él fundó la firma de servicios informáticos Impetus, la cual desde temprano empezó ofreciendo servicios en la nube a pequeñas empresas y a nivel corporativo.
La desarrolladora tiene presencia en Centroamérica, planea expandirse más y recibió esta semana en San Francisco, California, un premio latinoamericano como distribuidor de la firma estadounidense Oracle.
LEA MÁS: Lea más historias emprendedoras
¿Por qué tan joven se atrevió a crear su propio negocio, en una época donde el emprendedurismo tecnológico tampoco tenía tanta proyección?
Lo lógico era ir a lo seguro. Probó un año trabajando para una firma local, pero hacía cosas "muy simples”.
“Quería ayudar a las empresas a llegar al siguiente nivel y brindarles mayor valor”, cuenta Renato.
Los familiares en principio tenían sus dudas.
Le decían que era un desperdicio, dados sus buenos resultados académicos y teniendo tantas oportunidades en empresas e instituciones.
Para Renato los estudiantes que sueñan con su propia empresa pueden hacerlo si tienen la visión, el coraje y el convencimiento de que así pueden ayudar a las personas.
“Es duro, pero sí resulta”, dice.
Desde la creación de la empresa, oficialmente en el año 2005, se empezó a comercializar sus servicios y a desarrollar soluciones, basándose en una plataforma que aligeraba el proceso.
Impetus, que actualmente tiene 43 empleados, empezó a ofrecer sistemas en la nube y soluciones híbridas (una parte en sitio y otra en la nube), cuando el cloud computing apenas se insinuaba como una tendencia informática.
Tenían dos razones para adelantarse en el tiempo.
LEA MÁS: Así se fundó StartX y así ha venido creciendo
Una era financiera, pues los software para instalar (on premise) tienen mayores costos, tanto para los desarrolladores como para las empresas que los adquieren.
La otra era práctica: a una empresa o institución se le facilita aumentar el uso de la solución conforme crece la operación (escalabilidad).
El portafolio de la empresa se compone de servicios para pequeñas empresas, que incluyen soluciones de facturación electrónica, servicio al cliente y mantenimiento.
Hace cinco años se acercaron a Oracle, con la que incluso competían localmente, y encontraron que compartían su visión para brindar servicios a nivel corporativo.
La alianza les permite ofrecer soluciones en la nube de Customer Experience, la evolución de los antiguos Customer Relationship Management (CRM).
LEA MÁS: Ainnova Tech, nace y opera con un modelo de negocios muy distinto
Ahí se incluyen aplicaciones para mercadeo digital, redes sociales y ominicanalidad (que unifica la información en los diversos dispositivos que utilice un cliente).
Asimismo, Impetus ofrece soluciones para las áreas financiera-contable y de proveeduría.
La idea es ayudar a las empresas a digitalizarse, de acuerdo a las demandas del mercado y de un consumidor conectado, empezando en el área de atención a los clientes y pasando al área operativa y administrativa interna, que le da soporte.
Entre los clientes de Impetus se encuentran empresas como Telecable, Coopealianza, Coopenae, Coocique, Banco Cathay y el Banco de Costa Rica.
Renato resalta que el apoyo de su esposa, Maribel Segura, ha sido vital en el proceso por sus consejos, en especial en momentos difíciles de la compañía.
Impetus empezó a ofrecer servicios en la nube en la década anterior, cuando muchas empresas ni habían escuchado de este tipo de soluciones y otras más -que sí iban escuchando sobre esta tendencia- se resistían por la desconfianza sobre la gestión de sus datos.
La experiencia se repite actualmente incluso en mercados como Honduras y Panamá.
LEA MÁS: Renunciaron a su empleo y fundaron una empresa de tarjetas digitales de presentación
La resistencia no ha sido impedimento para avanzar.
La firma recibió el domingo anterior el premio de socio del año en Latinoamérica en soluciones de Costumer Experience, durante el evento anual Oracle Open World, en el Moscone Center de San Francisco.
“Es la primera desarrolladora centroamericana en recibirlo. Siempre lo obtienen empresas de México y especialmente de Brasil”, resalta Renato.
La firma está planeando incursionar en México, enfocándose en el segmento corporativo.
Su estrategia es clara.
Para los próximo cinco años quieren convertirse en un apoyo de las empresas de distintos sectores para innovar, actualizar y digitalizar sus operaciones.
Ya tienen el portafolio con el cual hacerlo: se construyó desde que Renato salió del Tecnológico y empezó a darle forma a su idea de tener una empresa propia.