En un complejo industrial localizado en Chongqing, en el centro de China, se instalaron dos túneles “brumosos” que, mediante rayos infrarrojos, detectan cuando una persona pasa y les rocía desinfectantes durante 20 segundos antes de que pasen a trabajar.
De esta forma intentan reducir la contaminación del coronavirus COVID-19
En Costa Rica la empresa Inversiones Gutiérrez Corella S.A. (IGC) cuenta con un portafolio de soluciones para la desinfección, incluyendo un sistema similar al de Chongqing, las cuales se utilizan en la agroindustria y en manufacturas para limpieza de plantas de producción y de otras instalaciones.
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La empresa, de cuatro personas, planea extender su oferta y empezar a comercializarla en nuevos sectores, como salud y centros educativos, así como expandirse en la región.
“Son sistemas a la medida que se adaptan al tamaño de las instalaciones”, explicó Franklin Gutiérrez, presidente de IGC.
La empresa fue fundada por Franklin y su socio Francisco Corella en 2011. Ellos se habían graduado en administración de negocios de la Universidad de Costa Rica (UCR) en 2004.
Trabajaron en empresas locales e incluso Franklin en una multinacional, donde llegó a ocupar el puesto de gerente regional de operaciones.
Con esta firma tuvo la oportunidad de trabajar en Estados Unidos y cuando Francisco lo visitaba siempre hablaban de crear una empresa.
Eso sí, tenía que ser un negocio que estuviera en una industria sin saturación. Además, pensaban que debía tener algún beneficio para las personas.
Fue así como identificaron los sistemas de enfriamiento evaporativo y para el control de mosquitos, ofrecidos por la firma Mist & More, para el sector residencial, comercial, agroindustrial y de manufactura.
Los sistemas automatizados son de alta y de baja presión para desinfección, en el primer caso, y para control de mosquitos como los que causan sika, dengue o chikungunya.
Hasta el momento IGC ha tenido presencia en el mercado agroindustrial, especialmente en empresas de producción animal, especialmente en granjas avícolas y plantas porcinas así como en lecherías.
Otra solución es control de temperaturas, que se puede utilizar en instalaciones donde hay personal y no hay condiciones para operar con sistemas de aire acondicionado.
En las granjas avícolas permite la conversión de alimento en peso del animal, se reduce la mortalidad por ahogo y se incrementa la densidad por metro cuadrado y la recuperación de la inversión.
A nivel industrial se pueden aumentar sistemas automáticos de lubricación de máquinas, con lo cual se aumenta la precisión del lubricante, se reduce el desperdicio y se asegura el funcionamiento de los equipos.
Un sistema automatizado de limpieza y desinfección de plantas o espacios en las empresas puede dejarse programado para que la operación se active durante la noche o en la madrugada.
Los sistemas también se pueden utilizar para el ingreso a plantas de proceso y en hospitales, clínicas y centros educativos, sectores en los que IGC está planteándose ingresar.
Franklin destacó que las soluciones aseguran la continuidad de la producción, resguardando la salud del personal, de lo animales y de los consumidores que se beneficiarán con un producto que ha sido resguardado con extraordinarios esfuerzos de salubridad.
En Costa Rica la empresa ha brindado este tipo de sistemas para la desinfección de personas cuando ingresan a granjas productoras de pollo, con el fin de lograr un ambiente seguro para los animales y el personal de trabajo.
También hay arcos de fumigación para camiones que rocían desinfectante a la carrocería del vehículo y chasis, controlando otro potencial foco de contaminación.