Como médico, estoy comprometido con la salud, y como miembro de la familia GNC-Costa Rica, debo garantizar la seguridad de los productos que hasta yo mismo consumo.
Creo fielmente que poco importan las razones por las cuales alguien consuma un producto, sino más bien la garantía de que el ingrediente ofrecido es de uso seguro, según las indicaciones del fabricante.
General Nutrition Corporation (GNC), desde 1935 y hasta la fecha, ha desarrollado productos de calidad enfocados en el bienestar. Desde que la compañía llegó a Costa Rica, en 1999, hemos escuchado todas las necesidades y hemos respondido a ellas con una gran variedad de suplementos alimenticios que hoy algunos quieren etiquetar como medicamentos. Una vez más reitero: GNC vende suplementos alimenticios y no medicamentos.
El crecimiento de GNC a través de los años ha ido de la mano con el compromiso de la empresa, fijando el estándar de la industria y cumpliendo con las regulaciones de etiquetado y registro sanitario de 50 países.
GNC garantiza seguridad y potencia en sus productos y se mantiene a la vanguardia de la ciencia nutricional. Su investigación científica, sus estándares de fabricación, procesos de empaque e interacción con los clientes, se hacen bajo los más altos estándares de calidad internacionales.
En recientes días, GNC Costa Rica fue noticia por un desacuerdo técnico y legal con las autoridades de Salud que se resolvió con el análisis y diálogo transparente.
Al respecto, en mis declaraciones a este semanario (edición 974), no he querido opinar sobre si la naturopatía debería o no considerarse como ciencia médica; ese criterio se lo dejo a los señores y señoras legisladores de la Asamblea Legislativa y a mis colegas del Ministerio de Salud Pública.
Lo que creo es que para registrar un producto natural no se debe obligar a una empresa a presentar documentos que hacen afirmaciones científicas que, como mínimo, son controversiales dependiendo del gremio y su punto de vista. Es el caso de las monografías de producto terminado que hacen referencia a indicaciones y dosificación de hierbas, al igual que estudios de sinergias entre hierbas.
Tampoco me parece racional tener que solicitar algo como una técnica de Western Blot (tal y como se ha sugerido) para poder registrar un polvo o una barra de proteína en nuestro país.
Empaquetado
Cuando se lee una etiqueta de GNC, el consumidor sabe exactamente lo que está adquiriendo en ese producto. Todo es parte de nuestra política de veracidad en el etiquetado.
Creemos en revelar información importante a los consumidores, incluyendo todos los ingredientes y alergénicos potenciales utilizados en nuestras formulaciones, tal como hoy lo pide el Ministerio de Salud tras analizar nuestro caso y el de la industria.
Por supuesto que estamos todos de acuerdo en la frase popular de que “en exceso todo es malo” y, en ese sentido, comprendo que el tema se presta para un rico debate respetuoso.
Valoro los criterios, la investigación y opiniones de colegas del gremio naturópata, pero también me reservo el derecho a no coincidir en algunos temas por diferencias de formación.
Precisamente, por ese motivo, GNC-Costa Rica cuenta con profesionales en salud; para garantizar y responder las dudas de nuestros clientes.
De forma tal que, hoy, puedo garantizar que los productos GNC son 100% seguros cuando se consumen según las indicaciones del fabricante que vienen en la etiqueta.