Días atrás, la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) publicó la versión 2024 de su informe Confianza Pública en los Impuestos: América Latina y Más Allá. Este informe publicado por la OCDE con colaboración de la Asociación de Contadores Públicos Certificados (ACCA) y el International Federation of Accountans (IFAC) tiene la intención de reforzar el concepto de moral tributaria, a través de una encuesta realizada a 26 países que mide la percepción y confianza de las personas sobre los impuestos y como construir dicha confianza.
A continuación, nos enfocaremos en algunos de los puntos mencionados en dicho reporte para América Latina y Costa Rica.
El contrato fiscal
En términos sencillos, el contrato fiscal es el acuerdo social en que los ciudadanos de un país están dispuestos a contribuir a través de impuestos, con el objetivo de sufragar los gastos del estado que se traduzcan en servicios públicos. Para el caso de América Latina el 47% de los encuestados apoyan este contrato fiscal, mientras que el 29% se muestran en desacuerdo sobre el mismo. Adicionalmente el 65% considera que evadir impuestos nunca es aceptable, en contrario al 3% que considera que dicha práctica siempre es aceptable. Siguiendo con esta línea el 43% considera que el cumplimiento en el pago de los impuestos no es solamente un tema de leyes, sino también un tema de moralidad tributaria.
Si bien es cierto en aspectos teóricos, el contrato fiscal es bien visto y tiene un apoyo importante, dicho apoyo contrasta significativamente respecto de la opinión sobre el uso de los recursos. Solamente el 29% de los encuestados consideran que los impuestos son utilizados para el bien público, mientras que el 50% considera que no.
Adicionalmente solo el 25% considera que recibe un retorno justo de servicios públicos en comparación con los impuestos que pagan, mientras que el 55% considera que los servicios recibidos no son un retorno justo, así mismo el 43% no está dispuesto a pagar más impuestos de los que ya existen en sus países.

Equidad del sistema tributario
Respecto de la equidad de la carga tributaria existen resultados dispares dependiendo de las preguntas realizadas a los entrevistados. En América Latina el 53% considera que el sistema tributario no recauda los impuestos de manera equitativa o proporcional a la capacidad contributiva de los individuos, mientras que el 47% considera que si.
Este dato contrasta con el hecho que los entrevistados, consideran afirmativamente que las empresas locales (53%), las empresas multinacionales (55%) y las personas físicas con más ingresos (52%) paga una cantidad razonable de impuestos. Este dato sugiere, que existen manifestaciones de riqueza, especialmente en el sector informal, que los ciudadanos perciben que no están pagando sus impuestos proporcionalmente.
En todos los países entrevistados, la gran mayoría considera que la corrupción tiene un impacto significativo en la confianza sobre los impuestos recaudados, solamente el 22% considera que la corrupción no afecta su actitud hacia los impuestos, mientras que el 78% restante indica que la corrupción es un factor menor (20%) o importante (58%) respecto de su actitud tributaria.
Experiencia
Respecto de las preguntas que orientaban a los entrevistados a determinar si presentar declaraciones tributarias era fácil, América Latina obtuvo resultados por debajo del promedio de los demás países,. En aspectos relacionados con la realización de pagos tributarios, gestionar reembolsos de manera fácil y eficiente, herramientas en línea, leyes y formularios tributarios sencillos, así como el trato de las Administraciones Tributarias a los contribuyentes, se percibe un rezago en nuestra región.
Si bien es cierto, la mayoría de entrevistados coinciden en que la transparencia en el uso de los recursos fiscales puede aumentar la confianza de los contribuyentes e incentivar el pago de los impuestos, dependiendo de la fuente de dicha información, la confianza varía. Cuando la información proviene de informes de medios en general o medios de comunicación social, el porcentaje de confianza se ubica entre un 40% y un 30%, mientras que, si la información proviene de abogados o contadores fiscales profesionales, así como de líderes de las industrias, este porcentaje de confianza sube y se ubica entre un 46% y 70%.
Estos datos contrastan con rango de confianza entre el 20% y 40% cuando dicha información procede de políticos, organizaciones no gubernamentales o autoridades tributarias gubernamentales.
El panorama en Costa Rica
De este informe existen algunos datos individualizados para Costa Rica, que podemos contrastar contra los obtenidos en América Latina.
- Respecto de si los actores económicos están pagando una cantidad razonable de impuestos, las respuestas colocan a las empresas locales y las multinacionales en los primeros lugares, seguidos de las personas con ingresos altos, dejando en último lugar a las personas con ingresos medios o bajos.
- El 29% de los entrevistados consideran que los ingresos tributarios se destinan al bien público.
- El 27% considera que recibe un retorno justo por los impuestos que paga.
- El 24% considera que el sistema tributario recauda impuestos de forma equitativa y en proporción a la capacidad de sus contribuyentes.
- El 76% considera que no es aceptable la evasión fiscal.
- El 37% considera que realizar pagos o solicitar reembolsos es un proceso fácil y eficiente, el 35% considera que es fácil comprender la normativa tributaria y el 40% considera que la Administración Tributaria trata con respeto y dignidad a los contribuyentes.
- La jerarquía en la generación de confianza relacionada con la fuente de información de carácter tributaria es mayor cuando la misma proviene de contadores y abogados fiscales profesionales (71% y 66%), respecto a las autoridades fiscales gubernamentales (42%), informes de los medios (38%) y políticos (17%).
Los retos hacia el futuro
Si bien es cierto, algunos de nuestros indicadores, son consistentes con los resultados obtenidos en general para América Latina, esto lejos de ser un consuelo, debe generarnos preocupación, pero sobre todo acción.
Simplificar el sistema tributario, de manera que sea más sencillo de comprender, que sirva de pivote para incentivar la formalidad, y adicionalmente reduzca la litigiosidad, son aspectos que nos pueden ayudar a incrementar la percepción positiva en varios de estos puntos.
Mejorar las herramientas de recaudación y cumplimiento tributario (el proyecto Tribu-CR debería ser un pilar en este sentido), pero sobre todo generar confianza en la población respecto de la transparencia en el gasto público y las fuentes que comunican estos datos, son de los retos más importantes que afrontaremos en los próximos años.
El autor es director de Fiscalidad Internacional en Grant Thornton.