Jeff Bezos no necesita presentaciones formales y menos su compañía Amazon. Pero ¿cuánta gente sabrá que a Bezos le tomó mucho tiempo conseguir levantar su primera ronda de capital y que tuvo que reunirse con 60 diferentes inversionistas, soportar el rechazo una y otra vez, para finalmente lograr recaudar el dinero que necesitaba para hacer crecer su innovadora empresa?
Historias parecidas encontramos con otros famosos emprendedores de e-commerce como los fundadores de Airbnb, que se vieron forzados a vender cajas de cereal mientras lograban recaudar el dinero que requerían para crecer, después de sufrir rechazos y desilusiones.
La mayoría de los consumidores no conoce sobre los esfuerzos tras bambalinas que tuvieron que hacer estos y muchos otros reconocidos empresarios, y cuando leemos noticias sobre como la pandemia aceleró el crecimiento del comercio electrónico en el mundo, nos da la impresión de que esta es una industria que tiene todas las de ganar. ¿Pero será realmente así de fácil? La respuesta rápida y sencilla: el e-commerce es mucho más complejo de lo que se piensa.
Echemos un vistazo a la región latinoamericana: en promedio únicamente del 9% de todas las ventas en Latinoamérica se realizan en línea. En Costa Rica, tenemos una penetración del e-commerce un poco mayor, pero si nos comparamos con países como Estados Unidos o Inglaterra, nuestras ventas en línea son porcentualmente mucho menores. ¿Por qué? Porque la mayoría de las empresas en Latinoamérica, incluida Costa Rica, son pymes que no tienen la capacidad para desarrollar el modelo de negocio para un e-commerce con volumen. ¡Y ni qué hablar para exportar! El traslado de productos desde Costa Rica a países como Estados Unidos sale carísimo.
Si comparamos lo que a un consumidor de ese país le cuesta el traslado cuando compra en Amazon Prime, estamos en clara desventaja.
Por otro lado, existe mucha inexperiencia en e-commerce en la región latinoamericana, precisamente porque son pocas las compañías que han logrado crecer en este medio. Por ende, los servicios de publicidad y mercadeo ofrecidos para esta industria, son básicos y desactualizados en su gran mayoría.
Y como si fuera poco, las oportunidades de obtener inversión para hacer crecer un e-commerce es muy limitada en Costa Rica y en la mayoría de los países latinoamericanos (con excepción de países como México, Brasil, Chile y Colombia). Por lo tanto, la mayoría de los e-commerce topan con pared en el momento que desean hacer crecer sus ventas.
Pero no hay que desesperar: un e-commerce en Costa Rica puede hacer crecer su negocio a niveles grandes. No hay receta mágica, pero sí existen pasos importantes a seguir.
Lo primero y más importante: hacerse de un buen equipo de trabajo. Esto podrá sonar trillado, pero a mi criterio es lo primordial para comenzar con cualquier empresa. Cuando comenzamos nuestra experiencia, ni mi socio ni yo teníamos experiencia en la industria y pensábamos que podíamos contratar la ayuda de agencias publicitarias para cubrir nuestros desconocimientos en mercadeo digital: ¡qué equivocados que estábamos!
Nos tomó varios meses y mucho capital hasta que finalmente decidimos buscar a esa persona clave que se uniera al equipo, con real conocimiento en mercadeo digital para e-commerce. ¡Qué diferencia que nos ha hecho!. Las actividades para hacer crecer el negocio deben conocerlas de primera mano sus fundadores.
Como segundo paso, recomendamos negociar los mejores precios de transporte, sea para ventas nacionales o para exportar. Este punto es clave y hace aún más diferencia en las exportaciones. Influye en el 65% de las decisiones de compra del consumidor internacional.
Como tercer paso, creemos firmemente en la mentoría y asesoría externa y, sobre todo, en los programas de aceleración de empresas. Existen buenos programas en Costa Rica, pero también existen posibilidades de participar en programas de aceleración en México, Chile y Estados Unidos. Si una de nuestras metas es hacer crecer el negocio para vender en los millones y no en miles, un programa de aceleración es indispensable.
Y como cuarto paso: debemos estar preparados y con mucha paciencia para levantar capital. La inyección fresca de dinero hará la diferencia entre tener algo que nos permite comer, a tener un negocio que nos permite expandirnos y e incluso poderlo vender con ganancias generosas en el futuro. Pero para levantar capital primero debemos tener claro por qué existimos, nuestro modelo de negocio, cómo escalaremos y saber que tendremos que ceder parte de nuestro patrimonio a inversionistas a cambio de poder cumplir nuestros sueños.
Costa Rica tiene productos y servicios maravillosos para vender en línea. De eso nos hemos dado cuenta y es por esa razón que esperemos que los e-commerce de nuestro país puedan crecer aún más en los próximos años.