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Durante las últimas semanas Sardimar reporta un incremento en la demanda de sus productos de un 30% y 40%.
Su planta de producción ubicada en el Roble de Puntarenas, mantiene sus operaciones abiertas, de hecho, han tenido que duplicar sus jornadas laborales y trabajar fines de semana para reabastecer los comercios.
Con el fin de mantener a sus colaboradores en condiciones óptimas y evitar el contagio interno, la empresa activó protocolos de evaluación de salud, en los cuales se toma de temperatura de las personas antes de su ingreso a las instalaciones.
Además, se duplicaron las medidas diarias de higiene y desinfección de la planta, los operarios deben lavarse las manos cada hora. Por lo general en cada estación habían dos personas trabajando pero se redujo a una sola como medida preventiva.
Magaly Chacón, gerente de mercadeo de Alimentos Prosalud asegura que son conscientes de que el atún representa un producto no perecedero de gran utilidad y valor nutricional, pero rechazan categóricamente cualquier práctica de especulación comercial con sus productos
“En Sardimar reafirmamos nuestro compromiso de no incrementar los precios. Hemos girado instrucciones a nuestros supervisores de punto de venta, para que vigilen y denuncien cualquier abuso. Rechazamos, de forma categórica, cualquier práctica de especulación comercial con nuestros productos”, confirmó Chacón.
Por otra parte, el Grupo Calvo declaró el pasado miércoles 18 de marzo que ante la situación de pandemia por COVID-19, proyecta que en la región centroamericana el consumo de atún podría llegar hasta un 50%, incorporando ya el 20% que normalmente crece en época de Cuaresma y Semana Santa.
Comentan también que cuentan con capacidad suficiente para abastecer las necesidades de los consumidores y que dentro de sus planes de producción se le dará prioridad a la demanda de productos que los consumidores más solicitan, entre ellos: el atún trozos, trocitos, vegetales en agua y aceite.
Más cierres
Las tiendas Aliss se une a los cierres temporales de comercios debido a la pandemia del COVID-19. La tienda cuenta con 11 sucursales en el país.
A pesar de no tener ningún caso confirmado de coronavirus entre sus colaboradores, Aliss tomó la decisión de cerrar temporalmente todas sus sucursales como medida de responsabilidad social.
El cierre temporal incluye los locales de todos los países donde Aliss tiene presencia como Panamá, Honduras, Estados Unidos, República Dominicana, Puerto Rico, Grecia, Costa Rica y Venezuela.
