Pequeño Mundo continúa el proceso de revigorizar su imagen con la construcción de un nuevo establecimiento en San Juan de Tibás. Con la apertura, planeada para inicios del 2023, se espera que la tienda tenga una presentación más agradable, sea más amplia y esté mejor iluminada y surtida de lo que tradicionalmente ha ofrecido esta marca, según confirmó el medio La Nación con el propietario de la cadena, Joseph Joseph, el viernes 25 de marzo.
La nueva sucursal será la número 15 de la cadena, la cual también tiene presencia en San Pedro de Montes de Oca, Escazú, Alajuela, Cartago, Heredia, Guápiles y Liberia.
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La Nación consultó a la Municipalidad de Tibás y desde su oficina de prensa indicaron que la empresa solicitó el trámite de demolición de los edificios, por lo que ya se procedió con el desmantelamiento de las seis fincas que abarca el terreno de poco más de 27.000 m², donde antes se ubicaba Neón Nieto.
El expediente que tiene la Secretaría Técnica Nacional (Setena) revela una inversión de ¢2.654 millones, la cual contempla la compra del terreno, la demolición de la infraestructura y el levantamiento de las nuevas instalaciones.
Un cambio de imagen
El nuevo Pequeño Mundo de Tibás seguirá la línea que empezó la cadena en 2021 con la apertura de su tienda en San Diego de La Unión, Cartago.
“La dimensión del local será muy similar al que abrimos en La Unión (Cartago). Prácticamente tendrá los mismos departamentos que tiene ese local”, le comentó Joseph a La Nación.
La tienda de San Diego se diferencia del resto en su mayor tamaño y atención hacia lo estético. Sus diferencias entran por el ojo: el parqueo es más amplio y ordenado, los pasillos casi duplican en espacio al de sus otras sedes, hay mejor ventilación e iluminación, los productos se ubican en varios niveles de anaqueles en lugar de las cajas abiertas que acostumbraban poner, además, el área dedicada a alimentos es mayor, esta incluye una panadería y tiene una sección refrigerada para alimentos fríos y congelados.
Según información adquirida por La Nación, la descripción del nuevo almacén incluye una zona de cajas con 15 cubículos en total, el área de abarrotes y otros productos tendrá un aproximado de 5.230 m², una zona de oficinas de 137 m² y un área de 507 m² para los pasillos de ingreso y salida.
La cadena de almacenes inició en el mercado costarricense con la venta de artículos para el hogar, juguetes, ropa y otros productos. Sin embargo, en los últimos años, el comercio introdujo la venta de abarrotes, productos refrigerados y alimentos tanto nacionales como importados.
Asimismo, también han incursionado en las compras en línea a través de su página web y aplicaciones de delivery. Las secciones de sus productos en línea son: Abarrotes, Hogar, Muebles, Ferretería, Mascotas, Verano, Escolar y Protección contra Covid-19.
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Aunque los cambios de imagen y tamaño que ha tenido Pequeño Mundo parecen acercarlos al negocio de los hipermercados, Joseph dijo en entrevista con El Financiero que no estaban pensando en competir allí.
“No le puedo decir que estamos buscando ser un hipermercado: sí queremos participar en muchas categorías y ser muy competitivos. Este punto de venta (La Unión) tiene las mismas categorías pero con una mejor presentación y eso permite que se aprecien más”, comentó el propietario en octubre de 2021.