La empresa de capital mexicano Grupo Lala anunció el cierre definitivo de sus operaciones en Costa Rica a partir del próximo viernes 11 de diciembre para enfocarse en los que considera mercados clave en Centroamérica: Nicaragua y Guatemala.
La compañía mantiene una planta de producción en San Ramón de Alajuela, en la cual había invertido $14 millones, en enero del 2019, para modernizar los equipos y ampliar su capacidad de fabricación.
La automatización de procesos permitió pasar de 50.000 a 150.000 litros de leche por día. La fábrica tiene un tamaño de 24.254 metros cuadrados.
La noticia de la clausura fue informada por Grupo Lala mediante un hecho relevante emitido este martes 1.° de diciembre en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV). Posteriormente la empresa emitió un comunicado oficial en Costa Rica.
Ana María Orozco, gerente general de Grupo Lala para Centroamérica, informó que decisión es resultado de una evaluación de la huella geográfica, el desempleo y la compatibilidad con la estrategia futura.
“Esta definición tiene como objetivo enfocarnos en los mercados clave de la región centroamericana; sabemos que decisiones como estas impactan no sólo a nuestros colaboradores y a sus familias, sino también a las comunidades donde operamos, por ello y como empresa responsable, actuaremos apegados totalmente a la legislación costarricense”, agregó.
Este medio consultó a Lala cuántos empleados será despedidos como parte del cierre de la planta de producción y del centro de distribución, pero la empresa todavía ofrece respuesta.
El hecho relevante emitido por la compañía en la Bolsa Mexicana de Valores ofrece detalles financieros relacionados con la noticia de la clausura de la operación en suelo nacional.
“El cierre tendrá un beneficio de $3 millones de dólares en el EBITDA (indicador antes de intereses que se deben pagar por la deuda) anualizado del 2021 de las operaciones de Centroamérica”, indica el documento.
Arquímedes Celis, director general de Lala, señaló que la operación en Costa Rica contiene recursos que se pueden reasignar dentro de la compañía para generar rentabilidad y valor para los accionistas.
“Nos mantenemos enfocados en asegurar que todos los negocios de LALA alcancen niveles de desempeño alineados con nuestras metas y expectativas. Adicionalmente, el capital liberado con este cierre será reasignado a nuestros negocios en Nicaragua y Guatemala donde hay más potencial para lograr crecimiento sostenible y rentable”, agregó el vocero.
La operación en Costa Rica representa el 0,4% de las ventas anuales consolidadas de la empresa cuyos principales activos son la planta de producción y el centro de distribución con las doce rutas para llevar productos al territorio nacional.
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La decisión de Lala tendrá un impacto de $126 millones de pesos mexicanos (¢3.763 millones al tipo de cambio de este martes) en el EBITDA y de $480 millones de pesos mexicanos (¢14.419 millones) en la utilidad neta al cuatro trimestre del 2020.
Ese monto sobre las ganancias netas se desagrega en $404 millones de pesos mexicanos (¢12.067 millones) por depuración de cuentas de balance y deterioro de crédito mercantil, y $76 millones de pesos mexicanos (¢2.270 millones) por gastos y contingencias de cierre, incluida la liquidación del personal.
La empresa indicó, en el comunicado para Costa Rica, que mantiene el interés de explorar alternativas para que sus productos se comercialicen en el mercado nacional, como lo ha hecho desde su arribo en 2016.
Convulsa historia
Cuando Grupo Lala decidió incursionar en el mercado costarricense tenía claro que conquistar al consumidor nacional sería una ardua tarea debido al gran apego a los productos de Dos Pinos. Sin embargo, con el paso de los días se sumaron otros inconvenientes como la dificultad para registrar productos.
Dos Pinos principal protagonista del mercado de lácteos en Costa Rica, indicó a EF, en febrero de este año, que su participación en el mercado no afectó a otros competidores como Lala y, por el contrario, la cooperativa se prepara para la llegada de más jugadores y para enfrentar la desgravación arancelaria a partir del 2025, fecha en la que este tipo de productos tendrán tarifa 0%, según el Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos y Centroamérica.
“Hoy las importaciones de productos lácteos anuales son cercanas a las 22.500 toneladas métricas, equivalente a cerca de $70 millones”, señaló la empresa costarricense.
Lala anunció su llegada al país en 2016, en ese entonces firmó un acuerdo con Florida Bebidas (de Florida Ice & Farm) y Coopeleche, con el objetivo de desarrollar un nuevo esquema de negocios.
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El convenio original establecía que Grupo Lala produciría tanto su propia línea de productos como la línea Mú! (perteneciente a Florida Bebidas), con el abastecimiento de los productores afiliados a Coopeleche.
A mediados del 2019, Lala adquirió la marca de leche Mú! que era propiedad de Fifco y ambas empresas mantuvieron una relación cordial que le permitía a la compañía nacional seguir con la distribución de ese producto que era fabricado por la empresa mexicana.
También en febrero, este medio entrevistó a Francisco Arroyo, gerente de mercadeo de Lala para Costa Rica, con el fin de conocer cómo fueron los resultados tras los primeros años de operar en el país.
“Ha sido más difícil de lo que pensábamos. Encontramos muchas dificultades en el camino que tratamos de enfrentar y Costa Rica es un país que, para nadie es un secreto, tiene muchos arraigos con marcas tradicionales y no ha sido sencillo a nivel de trámites, pero poco a poco vamos solventando eso y, aunque no ha sido sencillo, estamos cumpliendo con nuestros ejes estratégicos”, agregó.
Sobre las ventas, dijo que en 2019 alcanzaron las metas previstas (aunque no reveló cifras puntuales) y que planeaban continuar con el plan estratégico de crecimiento 2020-2025.
“La última lectura de un estudio de Nielsen, que fue en junio del 2019, arrojaba que habíamos alcanzado los siete puntos de participación como total Grupo Lala en la categoría de leches de larga duración. Este es un excelente alcance para solo seis meses que teníamos en un mercado como el costarricense”, indicó Arroyo.
Consultado sobre si estaban golpeando a Dos Pinos, el vocero respondió que estaban haciendo el trabajo y cumpliendo los ejes estratégicos.
La empresa tenía una producción en Costa Rica de un millón de litros de leche mensuales y 30.000 kilos de mantequilla.