El riesgo de un aumento fuerte en costos, la posibilidad de extender un contrato y la competitividad actual de las tarifas son los tres ejes de la coyuntura tensa entre las aerolíneas, el gestor del aeropuerto internacional Juan Santamaría y el Gobierno.
Son tres temas diferentes que cada actor está defendiendo en la misma discusión, por lo que generan ruido aunque todos digan la verdad, a su manera.
El tono de disconformidad lo dio la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA, por sus siglas en inglés) mediante un comunicado de prensa enviado desde Miami, Estados Unidos, el 18 de noviembre.
Su mensaje utilizaba términos como “amenaza” y “profunda preocupación”, para referirse al posible impacto de un aumento de costos de operación en 2020, en el Aeropuerto Internacional Juan Santamaría (AIJS), bajo la gestión de Aeris Holdings Costa Rica.
Este es el primer amago de crisis para el gestor, por su parte el Gobierno enfrenta el tercer golpe en el sector de aviación, tras las críticas por una aparente indecisión sobre el proyecto de un aeropuerto en Orotina, también incluidas en el reclamo de IATA, y la baja en la calificación de seguridad aeroportuaria aplicada el 13 de mayo al país por la Administración Federal de Aviación (FAA, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos.
Un día después, el 19 de noviembre, el Consejo Técnico de Aviación Civil (Cetac), se pronunció por medio de un comunicado de prensa emitido desde Casa Presidencial. Rodolfo Solano, jerarca del Cetac, reconoció que comprende las inquietudes de IATA, pero aclaró que aún no existe una solicitud de Aeris para el aumento de tarifas.
No obstante, el mensaje de Solano se caracterizó por insistir en que el Cetac está en un proceso de estudio (sobre tarifas, nuevo aeropuerto e inversiones) y no en una fase de toma de decisiones. Tampoco brindó un plazo en el que esta etapa se completaría.
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Sin impacto inmediato
Más allá del ambiente álgido que vive el sector, en este momento el intercambio de reclamos de los diferentes actores se da sin afectar las operaciones de aviación comercial en el país.
Un ejemplo es que el Instituto Costarricense de Turismo (ICT) mantiene las gestiones de atracción de aerolíneas desde los principales mercados norteamericanos y europeos.
María Amalia Revelo, ministra de Turismo, se apegó al argumento del Gobierno en el tema de las tarifas, y dijo a EF que los costos para operar en el AIJS son competitivos, por lo tanto, las operaciones actuales fluyen con normalidad.
Y en el tema de seguridad aeroportuaria aclaró que la calificación solo imposibilita el aumento de vuelos sin escala de las líneas aéreas de bandera nacional a los Estados Unidos (Avianca de Costa Rica y Volaris Costa Rica), no la atracción de líneas aéreas. Ambas aerolíneas tomaron medidas para que sus operaciones en el país dejen de crecer, en contraste con lo que sucede con las empresas extranjeras.
“En este momento vemos importantes crecimientos de las operaciones de las líneas aéreas de bandera estadounidense y canadiense hacia Costa Rica”, aseguró la ministra.
En Liberia, el gestor del Aeropuerto Internacional Daniel Oduber, Coriport, afirmó que perciben la discusión entre IATA, Aeris y el Gobierno como un evento ajeno a sus actividades.
César Jaramillo, gerente general Coriport, dijo a EF que el Aeropuerto de Guanacaste está en capacidad de atender “con los más altos estándares de calidad y seguridad” a 1,7 millones de pasajeros al año. En 2018 la terminal registró un tráfico total de pasajeros de 1.125.170 y en marzo de 2019 alcanzó su mayor marca mensual, con 166.140 personas, cifra récord desde su inicio de operaciones, en 2012.
“Muestra de esta capacidad y servicio es el reciente premio que recibimos de parte del Consejo Internacional de Aeropuertos (ACI), el cual reconoció al Aeropuerto Internacional Daniel Oduber Quirós como el mejor aeropuerto en Latinoamérica y Caribe por su servicio al cliente en la categoría de menos de dos millones de pasajeros al año”, enfatizó.
Terreno desconocido
Aunque Aeris declinó dar una posición oficial sobre el reclamo de las aerolíneas, Rafael Mencía, director ejecutivo de la empresa, dio declaraciones al diario La República, donde afirmó que el aumento de tarifas aún no está en firme, sin desmentir las quejas de la IATA.
Esta es la primera vez en años que Aeris Holdings Costa Rica enfrenta una protesta frontal a su gestión, pues la única queja reciente de la IATA había sido más matizada: en 2018 expuso sus argumentos contra los costos y los impuestos, en toda la región centroamericana.
EF solicitó una posición oficial a Aeris sobre el tema, pero mediante su firma de asesoría de prensa manifestaron que de haber una respuesta la harían llegar. Al cierre de esta nota, dicha comunicación no se concretó por parte del gestor.
Es un tema de peso: la asociación de aerolíneas representa a 290 empresas de aviación en todo el mundo y es considerado un peso pesado entre los grupos de presión de la aviación comercial.
La coyuntura plantea retos a los otros dos jugadores: Aeris y el Gobierno, pues obliga al primero a matizar la conversación sobre costos y al segundo a renegociar un acuerdo que entraría en vigencia en el último año de la siguiente administración presidencial.
Y mientras el incremento de tarifas siga indefinido, es el Estado el que enfrenta un desafío mayor, pues debe resolver su posición sobre la construcción o no de un aeropuerto en Orotina, y estar pendiente de los avances para recuperar la nota más alta de seguridad aeroportuaria.
RECUADRO
¿Quién es la IATA?
La Asociación Internacional de Transporte Aéreo (del inglés International Air Transport Association o IATA) en la actualidad, incluye unas 290 aerolíneas en 120 países. Esto corresponde al 82% del tráfico aéreo global.
Fuente: iata.org