¿Sabía que el guacamole de la hamburguesa que come en McDonald’s lo prepara una empresa costarricense en Cartago?
Ese producto es elaborado por Vegetales Fresquita, una compañía fundada en 1991, que provee de diversos ingredientes a al menos ocho cadenas de comida rápida en el país.
Para lograr este alcance, la firma nacional es sometida a estrictos procesos que aseguran que tiene la capacidad de atender todas las exigencias de los restaurantes.
Ese camino es recorrido también por otros proveedores sin importar si son medianas o grandes empresas. Cargill, por ejemplo, tiene 4.000 colaboradores y nueve plantas en varias zonas del país, mientras que, Tomatissimo posee 100 empleados y tres plantas en Coris de Cartago.
No obstante, pasar por esos procesos genera beneficios para estas compañías: crecimiento de las operaciones, ventas aseguradas y hasta la posibilidad de dar el paso al extranjero.
La cobertura geográfica de los restaurantes de comida rápida crece constantemente. Por ejemplo, Taco Bell planeó abrir nueves locales en el transcurso del 2017 y 2018, mientras que KFC organizó tres aperturas para este año.
Si los puntos de venta aumentan, los pedidos a los proveedores también; es decir, hay más personas por alimentar.
Asimismo, quienes producen ingredientes se aseguran ventas por periodos considerables, pues en muchos casos, deben comprobar que tienen la capacidad de abastecer a las cadenas de restaurantes desde uno hasta tres o más años.
Otro beneficio es la apertura de oportunidades de negocio en el exterior.
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Vegetales Fresquita dio el paso a Panamá después de tener una sólida relación con McDonald’s, Subway y Burger King en Costa Rica.
La compañía tiene una planta en David, Panamá, y buscará tener operaciones en otro país en el 2020. Algunos de los productos que ofrece son lechugas cortadas, cebolla, chile dulce, guacamole, pico de gallo y escabeche.
Por su parte, Tomatissimo, ya realiza exportaciones de su tomate hidropónico a Martinica, Guadalupe, Panamá y esperan pronto a Estados Unidos.
Esta firma es proveedor en Costa Rica de las cadenas McDonald’s, Taco Bell y Pizza Hut.
Junto con esas empresas también están firmas como Yema Dorada, Inolasa, Molinos de Costa Rica, Britt Florida Ice & Farm, Coopedota y Desinid que son proveedores de este tipo de restaurantes.
¿Cómo se llega a ser proveedor?
Ser un proveedor de una cadena de comida rápida es tarea exigente para cualquier firma.
Aunque el proceso empieza con algo sencillo, como cumplir con la legislación nacional, las marcas de comida han impuesto una serie de requisitos indispensables.
Uno de los puntos es estar certificados por entes internacionales. En el caso de McDonald’s piden certificaciones que sean avaladas por la Global Food Safety Asociation (GFSI).
También, firmas como QSR (Quiznos, Teriyaki y Smash Burger), solicita tener implementados los pre-requisitos básicos de Buena Práctica de Manufactura de un sistema de gestión de inocuidad y calidad, así como, tener implementado un plan de Análisis de Riesgos y Puntos Críticos de Control (HACCP, por sus siglas en inglés) en los procesos alimentarios a los que se dedique.
A esto se suma la realización de auditorías de calidad a cargo de especialistas en el tema, quienes evalúan y monitorean las plantas de producción y sus productos permanentemente antes de su incorporación al restaurante.
Es importante recordar que todas las cadenas tienen especificaciones para sus materias primas, por lo que los proveedores deben hacer muestras con las que comprueben que son capaces de hacer el producto exactamente como lo desea la marca de restaurantes.
Dichas auditorías se pueden mantener incluso después de llegar a un acuerdo.
KFC antes de crear una relación comercial realiza una auditoría bajo los lineamientos de la Corporación Yum Brands. Después, en el segundo año como proveedor, ejecuta dos auditorías: una de seguridad alimentaria y otra basada en estándares de calidad.
Negocios como Cargill, que provee de pollo a McDonald’s y KFC, es sujeto de revisiones completas del negocio cada tres meses.
Otro requisito puede ser, tal y como lo hace McDonald’s, el hacer que cada uno de sus proveedores firmen un código de conducta donde se comprometen con el cumplimiento y respeto a los derechos humanos (proveer a sus colaboradores de un lugar de trabajo seguro, no usar obra de mano infantil, respetar el medio ambiente, entre otros).
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En ese mismo proceso de selección, las cadenas tienen que asegurar costos los más competitivos posible, así como aquellas que tengan presencia en gran parte del país, velar por que las firmas sean capaces de tener distribución en todo el área nacional.
Aunque el camino para ser un proveedor de comida rápida es complejo, una porción importante de las empresas establecidas en el país lo han logrado, lo que se evidencia en el número de proveedores nacionales versus extranjeros.
En las cinco franquicias consultadas por EF (Subway, McDonald’s, KFC, QSR Internacional y Pizza Hut) más del 50% de sus proveedores están domiciliados en Costa Rica.