El cierre de los 740 locales de Toys R Us en Estados Unidos es el fin de una cadena que sucumbió ante implacables presiones, como el surgimiento de los videojuegos móviles y la popularidad de las compras por internet.
La empresa de 70 años de antigüedad anunció que liquidará sus locales en Estados Unidos, dejando en la incertidumbre a unos 30.000 empleados y marcando el ocaso de una cadena de megatiendas que se adentró en los corazones de generaciones de niños y padres.
Es un evento, además, que obligará a fabricantes de juguetes y a propietarios de edificios a buscar alternativas.
La cadena, conocida por su slogan “Soy un niño Toys R Us” y por su imagen de la jirafa Geoffrey, se declaró en bancarrota el año pasado debido a una deuda de $5.000 millones que perjudicó sus intentos de competir en un mercado en el que los consumidores recurren a Amazon y cadenas de mayor tamaño como Walmart.
En ese momento prometió mantenerse en operaciones, pero registró bajas ventas durante la crítica temporada navideña. En enero anunció planes para cerrar alrededor de 180 comercios durante el próximo par de meses, quedándose con alrededor de 700 tiendas.
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El director general de la empresa David Brandon dijo a empleados el miércoles 14 de marzo que los planes son de liquidar todas las tiendas en el país, según una grabación del encuentro obtenida por The Associated Press.
Brandon dijo que se tratará de agrupar a todos los negocios que tiene la empresa en Canadá, con unas 200 tiendas, a fin de hallar a un comprador. Toys R Us online seguirá funcionando por un par de semanas más por si acaso se consigue a alguien que la compre.
"Ya no tenemos el apoyo financiero para seguir con nuestras actividades en Estados Unidos. Es un día profundamente triste para nosotros y para millones de niños y familias que hemos servido en los últimos 70 años", añadió.
Los problemas de la compañía han afectado a fabricantes como Mattel y Hasbro, algunos de los mayores proveedores de la cadena. Pero la posible liquidación tendrá un mayor impacto en los fabricantes de menor tamaño, quienes dependen más de la cadena para sus ventas. Sin embargo, muchos de ellos han intentado diversificarse en los últimos meses ante el futuro incierto de la compañía.
La compañía probablemente liquidará además sus negocios en Australia, Francia, Polonia, Portugal y España, según la grabación. Ya antes se había anunciado el cierre de sus operaciones en el Reino Unido. Ello significará que se quedaría sólo con tiendas en Canadá, Europa central y Asia, pero tratará de buscar compradores allí también.
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Toys R Us Asia Ltd tiene más de 400 tiendas en Brunei, China, Hong Kong, Japón, Macao, Malasia, Filipinas, Singapur, Taiwán y Tailandia. Es una empresa conjunta basada en Hong Kong con el Fung Group, que mantiene una participación de 15%. Controla además a la empresa asiática Li & Fung, importante surtidor de tiendas occidentales como Wal-Mart.
Un portavoz de Fung no respondió de inmediato a pedidos de comentarios.
Cuando Toys R Us anunció que se declararía en bancarrota el año pasado, la sucursal asiática dijo que no estaba afectada y que legalmente operaba de manera independiente a los otros negocios de Toys R Us en el mundo.
En Hong Kong, donde Toys R Us tiene 15 tiendas, varios padres dijeron que no hay muchas otras opciones en un mercado dominado por las grandes cadenas minoristas.
“Si uno lo que quiere es una juguetería de renombre Toys R Us es realmente el único lugar que uno puede ir” , dijo Ching-yng Choi, que vive y trabaja a corta distancia de un Toys R Us.