EscucharLab de Ideas con apoyo del Centro Europeo de Cirugía — La Sociedad Americana de Cirujanos Plásticos afirmó, a inicios de enero, que una de las tendencias para el 2025 en cirugía estética será la de las mamas pequeñas, es decir, esas que respetan la proporción natural del cuerpo y que permiten los resultados tradicionales, pero que se alejan de los conceptos que priorizaban el tamaño y no la comodidad para la mujer.
Esta tendencia está asociada directamente al concepto de cirugía mamaria de preservación de tejido, una corriente que gana cada vez más espacio en el mundo y cuya firma tiene sello costarricense.
Conversamos con el cirujano plástico Manuel Chacón, del Centro Europeo de Cirugía, quien con más de 20 años de experiencia, ha logrado posicionar el tema en Estados Unidos, Asia, Europa y Medio Oriente.
“La tendencia se creó aquí”
A diferencia de las cirugías tradicionales de aumento de seno, las que se apegan al concepto de preservación se basan en un estudio a profundidad de la anatomía de cada mujer, con el fin de “preservar sus ligamentos y entender la distribución del volumen” para “hacer un traje a la medida” que se ajuste a las necesidades reales de cada paciente.
Chacón, especializó en la Universidad de París, indicó en una entrevista con El Financiero que la diferencia entre estos procedimientos y los otros, es que “aquí la discusión no es cuánto me voy a poner, sino cuánto tengo".
“¿Cuál es la diferencia?: el cuerpo de la mujer. Antes era la misma receta para todo el mundo pero lo cierto es que tú no puedes usar mis anteojos. Nosotros lo que buscamos es que la paciente descubra quién es ella en el momento de la cirugía y, de acuerdo a eso, le damos un resultado que se ajuste a sus características”.
Chacón trabaja este concepto desde hace más de 10 años y ha capacitado en él a más de 400 cirujanos de todo el mundo, quienes han venido a formarse “para expandir esta buena noticia”, pues la técnica permitió mejorar no solo el proceso de colocación del implante, si no también al implante mismo.
En ese sentido, la colaboración con Establishment Labs –la empresa costarricense que el año pasado recibió la aprobación de la FDA de los Estados Unidos para comercializar sus implantes Motiva en ese país— ha sido fundamental.
Chacón es el Director Científico del Breast Tissue Preservation Program de esta compañía y fue nombrado como tal por el Board of Directors de la empresa:
“Estos avances tecnológicos nos permiten tener implantes de mucho mayor calidad y las tecnologías para su adecuada colocación, todas producidas aquí, en Costa Rica. Los implantes son más elásticos y más suaves, pues entienden que la mujer actual ha cambiado y que ahora es deportista, mamá y profesional, y le dan una opción que responda a todos esos sombreros y que se adapte a todas sus características”.
Los procedimientos principales de la cirugía mamaria de preservación de tejido son Mía Femtech® para la armonización de los senos; el aumento de seno Preservé®; las mastopexias de aumento y recambio Preservé®; y la mastopexia de reconstrucción.
Ya hay más de 110 clínicas en todo el mundo que trabajan con Mía Femtech®, mientras que las técnicas Preservé® ya se lanzaron en Brasil —cuna de la cirugía mamaria— y este marzo llegarán a Europa por medio de conferencias, capacitaciones, webinars y cursos que comandan el doctor y el Centro.
“Es posible crear cambios que influyan en el resto del mundo desde acá. Este ejemplo demuestra que si seguimos la metodología correcta realmente podemos cambiar las cosas y ser referentes a nivel mundial”, enfatizó Chacón.
Tecnología que mejora sin afectar
Los avances también responden a una tendencia mundial creciente, en la que cada vez son más las mujeres que optan por quitarse los implantes debido a problemas asociados a la sobredimensión a la que se incurría con los métodos del pasado, entre los que destacan problemas de espalda y otras incomodidades.
Según Chacón, sus procedimientos ahora “producen el menor daño posible, pues permiten mejorar sin afectar":
“Hemos llegado a un nivel máximo de eficiencia, ya que lo que buscamos es que haya un menor número de reoperaciones y más acceso a este tipo de procedimientos para así reducir el miedo a quedar mal, con resultados que duren mayor tiempo”.
Previo a realizarse un procedimiento de este tipo, el doctor recomienda considerar factores como si el tiempo de vida en el se encuentra la mujer es el adecuado. Por ejemplo, lo ideal es esperar hasta seis meses después de finalizada la lactancia, en caso de que se desee un embarazo pronto. También es importante calcular la composición corporal en caso de que se esté en un proceso de pérdida de peso.
A su vez, y previo a la operación, los especialistas escogerán un dispositivo que se adapte a los deseos y características de la mujer, considerando historiales familiares y estilos de vida para prever al máximo la buena evolución temporal.
Finalmente, las pacientes continuarán con seguimientos anuales de control después de la operación y se harán ultrasonidos constantes para verificar que el implante y el seno se mantengan sanos.
Los interesados en saber más sobre estos procedimientos pueden acercarse al Centro Europeo de Cirugía.
Artículo realizado con el apoyo del Centro Europeo de Cirugía. ‘Lab de Ideas’ es una sección que destaca iniciativas de marcas y empresas en Costa Rica. El contenido editorial está diseñado para ser útil, y también hay espacio para mensajes comerciales curados, acompañados; diferentes.
