Ana Lorena Jiménez, Nicole Gamboa, Mixell Martínez, Silvia Webb y Valeria Bolaños son cinco mujeres costarricenses que trabajan juntas con el objetivo de castrar a perros y gatos de zonas vulnerables.
Ellas están detrás de 'Castrando-Ando', una asociación que se encarga de atender a animales que, o viven en la calle, o vienen de familias que no pueden pagarles la operación.
‘Castrando-Ando’ opera desde 2017 y con trabajo voluntario, según indicó Jiménez en una entrevista con El Financiero:
“Todas trabajamos en otras cosas pero le dedicamos mucho tiempo a esto. Por ejemplo, los fines de semana que tenemos campañas de castración nos vamos todo el día y cuando vamos lejos, salimos desde las cinco y media o seis de la mañana. Además, trabajamos desde la casa promocionando lo que hacemos y por eso para nosotros este es un trabajo tiempo completo”.
“Si nos donan un peso, un peso es para castrar”
Según Jimenez, las activistas llevan en esta labor “toda la vida”, pues se conocen desde anteriores trabajos con otras asociaciones. Sin embargo, el objetivo que tenían para esta era algo diferente:
“Nosotras nos unimos porque teníamos el norte muy claro de que la plata que entrara a la asociación iba a ser solo para castraciones. Esa plata no se usa para pagar teléfonos, gastos fijos, almuerzos… nada: si nos donan un peso, un peso es para castrar”, afirmó.
Así fue como nació la ‘Asociación Animalitos Abandonados’, que fue el primer nombre con el que trabajaron — de hecho, sus redes sociales aún se llaman así— pero con el tiempo el grupo tuvo que cambiar, porque la gente creía que su labor era otra:
“Nos llamaban para muchos rescates pero ya no podemos encargarnos de esa labor porque estamos saturadas: todas tenemos un montón de perros”, agregó la activista.
Es por eso que ahora el enfoque es castrar en dos modalidades: la de campañas masivas, en las que llegan a operar hasta a 100 animales por día, y la de castraciones express, con la que le dan el transporte del animal a quienes pagan por la cirugía.
“La campaña masiva de castraciones la hacemos todos los meses y la de enero será este sábado 25 en el salón comunal de Guararí, en Heredia. Además, tenemos la castración express para la gente que sí puede pagar la cirugía y a la que le damos el transporte, aunque te digo que en los dos casos las cobramos muy baratas”.
En cualquiera de las modalidades, el precio del procedimiento va de los diez mil colones en adelante, para gatos y perros pequeños. Para mascotas de hasta 20 kilos sube a ₡13.000 y para animales más pesados asciende a 16.000 colones.
“Solo tienen que ponerse en contacto con nosotras. A una persona, a razón de llevar al perro o gato a castrar, un taxi puede cobrarle hasta ₡10 mil y eso ya les imposibilita hacerlo. Por eso en la modalidad express les apoyamos con ese tema”.
“En las campañas de castración lo que buscamos es dejar castrado a todo lo que haya que dejar castrado. Ahí siempre nos preguntan que cuando vamos a volver y uno ya sabe que es porque tienen más animales en la casa, por lo que nosotros les pedimos que de una vez traigan a los que necesiten operar porque si se esperan, no necesariamente vamos a volver el mes siguiente”, agregó.
Todas las castraciones las hace un médico veterinario y la organización cuenta con los permisos del Servicio Nacional de Salud Animal (SENASA) y del Colegio de Veterinarios.
Donar castraciones
‘Castrando-Ando’ también recauda fondos para castrar animales de la calle.
Para eso van a los Outlets los días en que todo está a mil colones, buscan collares isabelinos y luego los revenden en sus campañas para conseguir fondos:
“Ahí sacamos un pequeño margen de ganancia y con eso nos ayudamos para patrocinar castraciones de casos como el de una perrita en Tibás que vi hoy en Facebook: el post decía que la perrita anda en celo y con perros montándola y por eso yo contacté al señor que lo publicó y le dije que tratara de agarrarla y que en el momento en que la tuviese, me llamara para llevarla a la veterinaria y cubrir todo con el dinero de las donaciones que recibimos", dijo Jiménez.
“En esos casos, lo único que pedimos es que nos traigan al animal y que luego lo cuiden porque a una perra recién operada no se la puede soltar otra vez”, agregó.
También reciben donaciones de dinero y en especies porque para ellos “todo es útil”:
“¿Le cambiaste la camita al perrito y te quedó la camita vieja? A nosotros no sirve. ¿Te sobró medicamento y tratamiento? A nosotros no sirve. Las correas también nos ayudan mucho: nos han llevado animales que vienen amarrados con alambres de púas y por eso correas y collarcitos, nuevos y no nuevos, nos son de gran ayuda“.
Para más información, para donativos o para coordinar castraciones express, los interesados pueden escribir al WhatsApp 8585-8505.