Llega diciembre y con él el aguinaldo: un décimo tercer salario que, por ley, se debe pagar a más tardar el 20 de diciembre.
Este monto es un promedio de los pagos recibidos en los 12 meses anteriores, que van del 1.° de diciembre de 2023, en este caso, al 30 de noviembre del año en curso, por concepto de trabajo o jubilación y que cubre a trabajadores asalariados y pensionados.
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En ese sentido, y ya que habrá más dinero en las calles y en los bolsillos, diversas organizaciones han generado campañas con el fin de aconsejar a la población para que aproveche mejor este ingreso y lo proteja ante el riesgo de estafas.
Tome nota de las recomendaciones de la Escuela de Administración de la Universidad Nacional (UNA) y de las de la Asociación Bancaria Costarricense (ABC).
Inversión y cuidado
En primer lugar, la ABC recordó la importancia de mantenerse alerta frente a las tácticas de estafa que podrían poner en riesgo no solo al aguinaldo sino también la seguridad financiera de los trabajadores en general.
Por ello recordó consideraciones básicas que el cliente debe implementar para proteger su dinero siempre, pero sobre todo en estas fechas:
- Los bancos nunca pedirán información sensible como claves o identificación personal a través de llamadas telefónicas o correos electrónicos. Si le piden información sensible, cuelgue; termine la comunicación. No caiga.
- Antes de responder a cualquier solicitud de información, asegúrese de que el mensaje provenga de una fuente confiable y oficial.
- Si tiene alguna duda sobre la legitimidad de una solicitud, contacte a su banco directamente a través de los canales oficiales.
Además, Juan Diego Sánchez, analista financiero y docente del posgrado de la Escuela de Administración de la UNA, brindó otra serie de consejos, esta vez dirigidos a que el aguinaldo se convierta en un beneficio real para la economía personal y familiar.
Tome nota de ellos:
- El pago de deudas debe ser prioridad en el uso del aguinaldo: según el especialista, el aguinaldo no debe tomarse como un plus para gastar sino para aprovechar y amortizar deudas. Eso bajará la cantidad de intereses en el largo plazo e incluso permitiría renegociar y hasta bajar las cuotas por mes. Otros gastos de temporada, como el pago del marchamo, los impuestos municipales o las membresías, también deben tener ese grado de priorización.
- Evite los gastos asociados a “yo me lo merezco” o “para eso trabajo”: esos pensamientos pueden generar que se pierda de vista lo importante y se tomen decisiones desmedidas que generen desequilibrios financieros. No olvide las consecuencias a largo plazo.
- Haga un presupuesto: hacer un presupuesto previo que distribuya el aguinaldo atendiendo las prioridades señaladas genera conexiones neuronales que reducen la carga emocional al gastar. Además, se recomienda redactarlo “a lápiz y papel”, pues así se activan y estimulan hormonas como el cortisol —precursor del estrés— que en este caso sirve para controlarse mejor al comprar.
- Evite los ofrecimientos de “adelanto de aguinaldo”: esta opción la ofrecen algunas entidades bancarias pero si la persona pierde su trabajo en el transcurso del año, afrontaría una deuda extra y las tasas de interés de este servicio pueden alcanzar hasta el 25%, lo que se traduce en un peso importante a largo plazo.
- Cuidado con los “gurús” financieros en redes sociales: tenga cuidado ante influencers que, en plataformas como Instagram o TikTok, dan consejos en esta materia. La toma de decisiones sin criterio experto trae consecuencias contraproducentes.
- Ahorre: la recomendación general es que se ahorre una tercera parte de este ingreso y el ideal inversor es que se ahorre hasta la mitad de él. Sin embargo, y en términos prácticos, Sánchez apuesta a la amortización de los créditos, pues así se liberan recursos para ahorrar más adelante.
- Finalmente, hable sobre temas de dinero en casa: “En hogares donde hay problemas financieros, el tema del dinero es un tabú, no se habla de él o genera rencillas. Debemos formar a futuros ciudadanos que crezcan sin miedo al dinero, donde puedan referirse a él de manera abierta”.