Unos 14 millones de ecuatorianos votaban este domingo 9 de febrero para elegir al próximo presidente, en un país desangrado por la violencia del narcotráfico, endeudado y dividido entre el regreso de la izquierda o la continuidad del actual mandatario Daniel Noboa.
Los sufragantes llegaban en la mañana abrigados por el frío de la capital andina, rodeada de volcanes y a 2.850 metros sobre el nivel del mar.
Necesitamos “seguridad, salud, educación, todo está peor”, dijo Richard Calle, ingeniero mecánico de 44 años en Quito.
Aunque rige la veda para la publicación de encuestas, varias firmas dan como favoritos a dos candidatos opuestos: Luisa González, delfina del expresidente socialista Rafael Correa (2007-2017), y Noboa, el actual gobernante.
Los candidatos votaron temprano en sus bastiones costeros: el presidente, acompañado de su familia en el balneario de Olón y la abogada, en Canuto.
En Toacaso (centro), región con fuerte presencia indígena, votantes de los pueblos originarios también acudieron a las urnas desde temprano.
Los ecuatorianos esperan que el próximo gobierno pueda reflotar un país en crisis económica y anegado por la guerra entre una miríada de carteles enfrentados por el botín de la cocaína.
Bajo la sombra de un magnicidio en 2023, las campañas transcurrieron en medio de fuertes esquemas de seguridad y propuestas enfocadas en frenar la violencia, que deja una tasa de 38 homicidios por cada 100.000 habitantes.
El servicio de emergencias alertó sobre “graves denuncias de un posible atentado contra la democracia”, sin ahondar en detalles. Las fronteras están cerradas hasta el lunes, mientras unos 100.000 miembros de la fuerza pública vigilan los comicios.
“He tenido amenazas (...) Hay informes de inteligencia que dicen que hay riesgos, que quieren atentar contra mi vida”, dijo la candidata González a la AFP.
Los ecuatorianos ejercerán el sufragio obligatorio para elegir presidente y vicepresidente de entre 16 binomios, 151 asambleístas y cinco parlamentarios andinos.
“Tenemos la fe y la esperanza de que cambie” el país, dijo Evelyn Criollo, administradora de 30 años.
![Una mujer emite su voto en un colegio electoral durante las elecciones presidenciales en Toacazo, provincia de Cotopaxi, Ecuador, el 9 de febrero de 2025. Unos 14 millones de ecuatorianos comenzaron a votar el domingo para decidir quién liderará a la nación andina asolada por la violencia durante su peor crisis en medio siglo.](https://www.elfinancierocr.com/resizer/v2/WKYAJBXNWVGEHGGI6AW6B2ISXM.jpg?smart=true&auth=9711e1aa5da6f27ad2e0d496d94e1798d930d7bece5b703755d7d47bd1a9512d&width=3402&height=2268)
Noboa vs. González
En este nuevo duelo electoral entre Noboa, de 37 años, y González, de 47, ella va por la revancha y él por la reelección. Los candidatos se enfrentaron en los comicios de 2023, en los que el millonario empresario se convirtió en uno de los presidentes más jóvenes del mundo.
Esta vez, González aspira a ser la primera presidenta electa en la historia del país.
Heredero de un magnate bananero, Noboa dio la sorpresa en 2023 cuando fue elegido pese a su magra experiencia política.
Ganó la elección para completar hasta mayo próximo el período de Guillermo Lasso, quien disolvió el Congreso y llamó a elecciones anticipadas para evitar que el Legislativo lo destituyese en un juicio político por corrupción.
Muy activo en redes sociales, Noboa se ha hecho popular como un gobernante con mano de hierro contra el narco, deportista, músico, amoroso con su familia y amante de los tatuajes.
“El Ecuador ya cambió y quiere seguir cambiando, quiere consolidar el triunfo”, dijo el mandatario.
Su némesis, González, es una madre soltera, tatuada y cristiana con una agenda que promete más seguridad “con justicia social” y respeto a los derechos humanos.
“Ellos son el miedo, nosotros la esperanza”, dijo la abogada mientras votaba.
Un balotaje el 13 de abril está previsto si ninguno logra obtener el 40% de sufragios y una diferencia de al menos diez puntos sobre el rival más cercano.
![Esta combinación de imágenes muestra a los candidatos presidenciales Daniel Novoa y Luisa González, favoritos para pasar a la segunda ronda.](https://www.elfinancierocr.com/resizer/v2/TQS7FGLRRJHLLMCOB2LTFKYPR4.jpg?smart=true&auth=f3841a4f92aa0d7433be0cb8fcaae9e3124012833a06b3e884f897a69ab0577d&width=5500&height=3700)
“Memecracia”
Expertos cuestionan los escasos proyectos de los candidatos para enfrentar la peor crisis en medio siglo, con campañas plagadas de desinformación en redes sociales y el uso cada vez más sofisticado de la inteligencia artificial.
“Es un reality, una memecracia (...) y eso lo único que logra es que la gente se desconecte de la política (...) es una sociedad que ha bajado los brazos”, apunta el analista político Leonardo Laso.
Noboa termina un breve pero vertiginoso mandato: cortes de electricidad por una histórica sequía, disputas diplomáticas con México y denuncias de abusos de la fuerza pública en su ofensiva contra el crimen.
Cuatro niños fueron asesinados y calcinados en Guayaquil (suroeste), en un caso que enloda a 16 militares.
Los ecuatorianos resienten los estragos de un Estado endeudado con una pobreza del 28% y concentrado en financiar la costosa guerra contra el narco.
Para el analista Laso, estos espectaculares operativos proyectan una imagen del país que espanta “toda posibilidad de inversión” y genera “un clima adverso a la generación de empleo”.
La deuda pública bordea el 57% del PIB, según el FMI.
El futuro de Ecuador es “desolador, sinceramente. Hay que votar con conciencia”, clama la estudiante Valentina Moncayo, de 18 años.