¿Siente que a algunos de sus colaboradores ya no les motiva su trabajo como antes? Lo que está experimentando su equipo puede ser consecuencia de factores presentes en el entorno laboral.
En algunas empresas se suelen reunir condiciones que desmotivan a los colaboradores y que los inducen a tomar decisiones como renunciar y cambiar su entorno laboral. Lo hacen con el fin de encender de nuevo la llama de la motivación.
Muchos de los elementos relacionados con estas decisiones tienen que ver con los sentimientos del colaborador, sin embargo, también algunos de ellos tienen relación directa con la mala dirección de la empresa. Estos son los que usted debe controlar.
Situaciones de riesgo
En la mayoría de las ocasiones los subalternos no se sienten en la libertad de expresar sus disconformidades con la organización, por el miedo a enfrentar represalias.
Esto va minando la relación dentro del equipo de trabajo, provocando que se genere un clima laboral en el cual la motivación sea el elemento menos presente.
El feedback generalmente se considera bien implementado cuando es de un mando superior a un subalterno, no así cuando se produce en la otra vía.
En la medida en que las puertas de la comunicación se abren en ambos sentidos, se pueden ir aplicando mejoras en la organización para que los colaboradores se sientan felices y motivados.
Algunas de las causas de la desmotivación laboral proveniente de la mala dirección organizacional pueden ser:
1. Falta de objetivos: La falta de metas hace que los colaboradores divaguen en el limbo, se sientan perdidos y perciban que se trabaja sin un rumbo definido.
2. Falta de retos:
Los seres humanos somos por naturaleza competitivos, por lo que asumir nuevos retos causa motivación adicional.
3. Ausencia de planes de desarrollo:
Todo colaborador desea crecer como persona y como profesional. Al identificar que no existe este plan de desarrollo para su carrera en la empresa, se genera el sentimiento de no ser importante dentro de la estructura.
4. Monotonía:
Las tareas repetitivas generan estrés y aburrimiento, lo que causa que el empleado no espere nada nuevo en el día.
5. Exceso de trabajo:
Los colaboradores motivados consiguen generalmente muy buenos resultados. En algunas organizaciones esto provoca una carga laboral excesiva debido a que se les transfiere trabajo de otros, lo que causa cansancio extremo y estrés, que llevan a la desmotivación.
6. Malas relaciones:
Sentirse acosado o en un clima laboral denso, lleva a no tener ganas de volver al sitio de trabajo.
7. El jefe no sabe escuchar:
Los jefes tóxicos que solo saben apreciar lo que ellos hacen y no escuchan a sus colaboradores, provocan la decisión de no proponer nuevas ideas, pues el equipo siente que no serán tomadas en cuenta.
8. Jefe incompetente:
Cuando un jefe es ejemplo y líder para el equipo, genera un deseo de absorción de información que motiva a buscar mejores resultados. Por el contrario, cuando el jefe no demuestra capacidades para liderar esto crea en el empleado un alto grado de desmotivación.
Recuerde: un equipo altamente motivado le permitirá a su empresa retener talentos y potenciar recursos.