En el 2000, EF reconoció en Rónald Jiménez, Carlos Araya, Eduardo Wheelock y Alexánder Mora al creciente, emprendedor e innovador sector informático local.
Catorce años después la industria y las empresas maduraron. Ellos mismos ocupan destacadas posiciones en el país e incluso trascendieron las fronteras.
Jiménez es un ejemplo de cómo ese cambio también incluye al ámbito personal.
Además de estar involucrado en sus negocios –el de software y datacenter con Codisa, y el de publicidad con Gecko– y de ser presidente de la Unión Costarricense de Cámaras y Asociaciones del Sector Empresarial Privado (Uccaep), hoy complementa su dinamismo empresarial como un activo triatlonista.
¿Cuáles son las cinco lecciones de liderazgo que toda empresa debe aplicar hoy?
-La visión, la usan las empresas de forma regular y está escrita en muchas paredes de muchas empresas, pero el sentido profundo de la visión es poder imaginarse cómo será el negocio a 5 o 10 años antes y llegar a ese punto.
-Capacidad de ejecución. La visión sin acción es un sueño, pero la acción sin visión es una pesadilla. Se debe tener la capacidad para ejecutar las acciones que lleven hacia la visión. Sin visión se hace un esfuerzo enorme, pero no se avanza.
-El equipo humano es fundamental para las empresas. En el recursos humano se concreta la habilidad de construir el negocio, de realizar las acciones y de alcanzar la visión.
-Confianza. Para las empresas es ineludible cumplir con las promesas de los clientes y garantizarles que la empresa estará vigente durante muchas décadas.
-Calidad de vida, Creemos en la calidad de vida y en los derechos de los colaboradores, de los vecinos y de los proveedores.
Usted fue elegido como Empresario del año en 2000: ¿Qué haría diferente hoy?
Calidad de nivel internacional. En 2000 exportábamos a nivel latinoamericano y respondíamos a estándares que se exigían en la región. Al pasar a un datacenter con estándares mundiales tenemos personas que responden a esos niveles. Pero hace 14 años habría identificado más fácilmente a aquellas que están dispuestas a asumir un reto de calidad mundial.
Mayor agresividad empresarial. Posiblemente habría realizado inversiones más rápido y también habríamos tenido menos prudencia para emprender más cosas. Debimos ser más agresivos.
Más cuidado de la salud personal. Siendo exitoso en el campo empresarial, estaba teniendo un fracaso importante en mi salud. No tuve problemas graves, pero tenía el riesgo de ser diabético. El doctor me ordenó hacer ejercicio. Empecé a hacer natación, luego ciclismo y ahora hago triatlón completo. Hoy tenemos la capacidad de hacer negocios 10 veces más grandes en una décima del tiempo que en el año 2000.