¿Siente que a algunos de sus colaboradores ya no les motiva su trabajo como antes? Lo que está experimentando en su equipo puede ser causa de diferentes factores que se están presentando en su entorno laboral.
En las empresas se pueden presentan elementos que desmotivan a los colaboradores y que los inducen a tomar decisiones como renunciar y cambiar su entorno laboral, para nuevamente encender la llama de la motivación.
Muchos de los elementos de esta sensación tienen que ver con los sentimientos internos del colaborador, sin embargo, también algunos tienen relación directa con la mala dirección de la empresa.
En la mayoría de las ocasiones, los subalternos no se sienten en la libertad de expresar sus sentimientos para con la organización, por el miedo a represalias, lo que va minando la relación dentro del equipo de trabajo, provocando que se vaya generando un clima laboral en el cual la motivación para hacer las cosas sea el elemento menos presente.
El llamado feedback, generalmente se considera como bien tomado, cuando es de un mando superior a uno inferior, no así cuando se produce en la manera inversa.
En la medida en que las puertas de la comunicación se abren en ambos sentidos, se pueden ir realizando mejoras en la organización para que los colaboradores se sientan felices en el lugar de trabajo y, por ende, motivados a realizar las actividades que le corresponden dentro de la organización.
Posibles causas
Algunas de las causas de la desmotivación laboral causadas por la mala dirección dentro de su organización pueden ser:
Falta de objetivos: La falta de metas hace que los colaboradores divaguen en el limbo, lo que hace que los mismos se sientan perdidos y sin un rumbo definido.
Falta de retos: Los seres humanos somos por naturaleza competitivos, por lo que asumir nuevos retos causa motivación adicional.
Ausencia de planes de desarrollo para el trabajador: Todo colaborador desea crecer como persona y como profesional, al identificar que no existe este plan de desarrollo para con él, se genera el sentimiento de no ser importante dentro de la estructura.
Monotonía: Las tareas repetitivas generan estrés y aburrimiento, lo que causa que el empleado no espere nada nuevo en el día.
Exceso de trabajo: Los colaboradores motivados consiguen generalmente my buenos resultados, sin embargo, con ello se genera una carga laboral excesiva debido a que se les transfiere trabajo de otros, lo que causa cansancio extremo y estrés. Por ende, se desmotiva a hacer las cosas de buena manera.
Malas relaciones: Sentirse acosado o en un clima laboral denso, es causal de no tener ganas de volver al sitio de trabajo.
El jefe no sabe escuchar: Esos jefes tóxicos que solo saben apreciar lo que ellos hacen y no se detienen a escuchar a sus colaboradores, causan poco a poco que se vaya generando un deseo de no proponer nuevas ideas que no serán tomadas en cuenta.
LEA: Identifique a los jefes tóxicos y cómo lidiar con ellos.
Jefe Incompetente: Todo colaborador quiere aprender algo nuevo y si su jefe se lo demuestra, genera un deseo de absorción de información que motiva a buscar nuevos resultados. Pero, cuando el jefe no demuestra capacidades para liderar, crea en el empleado un alto grado de desmotivación.
¿Cómo enfrentar la desmotivación?
Lo primero que se debe tener en cuenta para poner fin a la desmotivación dentro del equipo de trabajo es la identificación de los signos indican que el equipo se encuentra al fondo del abismo.
En el momento que los colaboradores presentan pesimismo, absentismo, desinterés, llegan tarde y salen antes del trabajo, tienen poco compromiso, no se integran con sus compañeros y se evaden nuevas responsabilidades es el momento de actuar.
Ahora sí, teniendo claros los signos, cuándo el equipo se encuentra desmotivado, es hora de que el jefe cumpla su parte. El jefe debe demostrar se un líder y que los colaboradores se sientan motivados por seguirlo y seguir las creencias de la empresa.
Si se logra identificar que el desinterés del colaborador es provocado por la mala dirección de la empresa, será fundamental la escucha activa con el empleado y que se le haga sentir como una pieza fundamental dentro de la empresa.
A esto puede sumarse buscar iniciativas que fomenten el trabajo en equipo, donde cada uno de los colaboradores se sienta un líder y sea escuchado como tal y que además pueda encontrar nuevos retos y elementos de mejora en la empresa. Es importarte siempre hacerle ver al trabajador lo importante de su actividad y como ayuda al crecimiento de la compañía.
Un elemento importante a no dejar de lado es el crecimiento del colaborador, ya que en la medida que sienta que dentro de la compañía puede crecer como persona y profesional, se sentirá completamente lleno y generará mejores resultados. No olvide: las capacitaciones siempre son una inversión.
Por último, sepa reconocer cuando se hacen bien las cosas. Nunca está de más una palmada en el hombro o un bien hecho, pues genera motivación para seguir haciendo las cosas de la mejor manera.
Recuerde hacer preguntas algunas preguntas: ¿Cómo te has sentido en la empresa últimamente? ¿Qué mejorarías si esta empresa fuera tuya? ¿Cómo podemos hacer para que tu trabajo sea aun mejor?
Gracias a éstas y otras técnicas, será posible alcanzar la automotivación, ya que los trabajadores reconocerán diversos factores positivos y se volverán gradualmente miembros más creativos, motivados y conciliadores. Principalmente, porque podrán controlar el estrés y manejar de manera positiva sus propios sentimientos y los ajenos.
En el momento que logre un equipo altamente motivado, podrá experimentar un crecimiento exponencial dentro de su empresa, ya que logrará sostener a los talentos y potencializará sus recursos debido a que estos harán sus tareas de manera más eficiente.
* El autor es presidente ejecutivo de J&P Coach Group