Las zonas francas son el motor responsable de un 14% del producto interno bruto (PIB) y alrededor de un 65% de las exportaciones en Costa Rica. Asimismo, impulsan al resto de la economía nacional, generan empleo formal y cada vez promueven más el crecimiento en las regiones periféricas al Gran Área Metropolitana (GAM). Sin embargo, también se enfrentan a retos importantes para seguir siendo atractivas en la atracción de inversión extranjera y para incluir al resto de la economía local en su trabajo.
Todos estos puntos fueron parte de la agenda que se desarrolló en el último foro de El Financiero; en el cual participaron el presidente de la de la Asociación de Empresas de Zonas Francas de Costa Rica (Azofras) y director general de Evolution Free Zone, Carlos Wong; la gerenta general de la Promotora de Comercio Exterior (Procomer), Laura López; y la especialista de la firma Bakertilly, María Cecilia Morales.
¿Cuáles fueron las principales conclusiones del evento? EF le resume los puntos más relevantes.
Contribución económica
Como punto de partida, los participantes del foro reconocieron el impacto en la economía costarricense de las empresas en zonas francas.
“A veces en el día a día menospreciamos el peso y la importancia del régimen de zona franca en la economía nacional. Pero, si empezamos de lo macro a lo micro, las exportaciones de Costa Rica significan el 40% del PIB nacional; pero, de ese gran total, el 65% viene del régimen de zona franca. Es decir, de toda la producción nacional, más o menos un 14% está relacionada con el régimen de zona franca“, puntualizó Laura López.
Esos datos, según la jerarca de la Promotora, únicamente incluyen “lo que sale del régimen" de forma directa; en otras palabras, dejan por fuera otras contribuciones por empleo indirecto, encadenamientos productivos con la economía local y otros factores similares.
Impacto regional
Los participantes también destacaron la expansión del modelo de zonas francas en el territorio nacional; donde hoy se ven nuevos clústeres de desarrollo en zonas como Cartago, Coyol y, más recientemente, Occidente.
“Hay un impacto alrededor de las zonas francas que es muy evidente. Yo recuerdo cuando iniciamos hace muchos años las construcciones, por ejemplo, en Zona Franca Metropolitana o en Global Park. En ese momento, Heredia y toda esa zona era simplemente cafetales, pero la transformación urbana que representa también el desarrollo de los parques industriales es un efecto hacia la economía costarricense muy importante”, enfatizó Wong.
El empresario, que también es representante de Azofras, es responsable de Evolution: una de las cuatro zonas francas (inaugurada de manera formal recientemente) que ahora mismo transforman la dinámica productiva y el panorama económico del cantón de Grecia, en Alajuela.
Justo sobre el caso de Grecia, señaló, “alrededor de Evolution hoy se ven más de 5.000 permisos para desarrollar casas".
Retos generales
Sin embargo, más allá de las buenas noticias, el régimen de zonas francas costarricense enfrenta retos de peso para seguir adelante con la misma fuerza. Entre ellos, cómo mantenerse competitivo a nivel internacional y la incertidumbre por las discusiones mundiales en relación sobre cómo tasar adecuadamente a las empresas multinacionales.
En competitividad
En materia de competitividad internacional, tanto López como Wong coincidieron en la necesidad de fortalecer la propuesta de valor del país para atraer inversiones internacionales con más factores y no solamente con incentivos fiscales.
En ese sentido, recordaron que hay variedad de países dentro y fuera de la región con esquemas similares en cuestiones tributarias; lo que implica la necesidad de ser proactivos en otras áreas de peso.
“Hay mucho alrededor de otros incentivos y otros apoyos, que no es solo los incentivos fiscales”, puntualizó la jefa de Procomer. En ese sentido, hizo alusión a posibles métricas de sostenibilidad y certificaciones ambientales o de impacto regional en las que Costa Rica puede ser “pionera”.
Asimismo, los participantes subrayaron la importancia de no ceder en otros campos en los cuales Costa Rica ha hecho esfuerzos históricos durante las últimas décadas, como la corrección de problemas en trámites, el financiamiento de educación para garantizar talento humano en nichos con alto valor agregado (como ahora se espera en el sector de los semiconductores), y la facilitación de encadenamientos productivos que hagan más eficientes las labores de las empresas en regímenes especiales.
En temas legales, María Cecilia Morales explicó que la materia aduanera tiene amplio margen de mejora e hizo principal énfasis en la necesidad de digitalizar trámites. “Se debe facilitar a las empresas que todo se haga de forma digital”, afirmó la especialista de la firma legal Bakertilly. Según dijo, aún hoy existen múltiples pasos en materia de importación y exportación que dependen de la presencia de funcionarios públicos que trabajan en horarios reducidos.
Retos fiscales
Por último, Laura López, de Procomer, también se refirió sobre las propuestas a nivel mundial para modificar los incentivos fiscales que brindan los países a las grandes compañías multinacionales.
Según dijo, este es un tema que el Gobierno habla con las empresas del sector y otros actores involucrados, pero en el que se opta por la cautela, esperando los pasos de las demás naciones.
“Es de esos temas donde ser el primero tal vez no es no es la mejor opción. Hay que entender cómo se está moviendo nuestra competencia, cómo se mueven los otros países que han estado siguiendo el modelo costarricense; por ejemplo, República Dominicana”, puntualizó. “Si bien hay que estar atento, hay que ser cauto y no tomar decisiones aceleradas”.
Además de República Dominicana, países como Uruguay, Colombia, México y Guatemala son competidores más o menos directos en diversas industrias.
Ante ese escenario, Wong señaló que el sector trabaja junto con Procomer, Comercio Exterior y Hacienda para visualizar posibles impactos. Asimismo, destacó la posición gubernamental de no apresurarse, pero enfatizó que —desde el punto de vista del sector— “Costa Rica debe mantener una estrategia competitiva, de forma tal que no tenga que dar más ni dar menos” que sus competidores.
Buena actualidad
Por el momento, según los datos de Procomer, el panorama de las zonas francas es positivo. La inversión en el régimen especial creció un 10% hasta el cierre del primer semestre y, según las autoridades, este debería de ser el esperado en los próximos años.
El motivo de ese crecimiento, en gran medida, se debe a los nuevos proyectos en marcha. Procomer registró 59 nuevos proyectos al cierre del año pasado, así como más de 100 reinversiones.
Las expectativas del Gobierno es que ese registro se mantenga o incluso mejore en el futuro cercano. “Probablemente vamos a cerrar este año con más crecimiento y el próximo año pinta incluso mejor”, concluyó López.