La caída en los precios internacionales del petróleo y un tipo de cambio estable son los principales motivos de la baja inflación. Sin embargo, el comportamiento del resto de commodities también genera un impacto.
Costa Rica es importador neto de materias primas, por lo que las variaciones en esos precios afectan los costos en la cadena de producción de las empresas y el gasto de los consumidores.
Por ejemplo, el trigo, el acero y el hierro han presentado fuertes reducciones en sus precios.
Y este efecto se mantendrá. El Fondo Monetario Internacional (FMI) proyecta que la categoría de no combustibles seguirá la tendencia en picada el resto del año, con una baja de al menos un 14%. En el petróleo, estima una reducción de 39,6% este año.
Aunque estas materias primas generan un efecto en la variación interanual del Índice de Precios al Consumidor (IPC), la transmisión hacia los precios de bienes locales que los utilizan en su producción no es tan clara, pero al menos impiden que los precios de los productos locales no suban mucho.
Se dificulta identificar el aporte de un cambio en el precio de una materia prima, en el precio final que enfrenta el consumidor y en la inflación debido a una serie de factores que también influyen en los precios, explicó la división económica del Banco Central de Costa Rica (BCCR).
La variación interanual del Índice de Precios al Consumidor (IPC) se ubicó en 0,97%, en mayo.
Este nivel no es solo el más bajo en este 2015, sino también el de menor dinamismo desde que arrancó la medición en 1976.
Con este resultado, además, se cumplen cinco meses consecutivos en que la inflación presenta una desaceleración, y dos meses en que se ha ubicado por debajo del rango meta (3-5%).
Impacto en la inflación
En el IPC, el subgrupo de alimentos tiene la ponderación más alta, con el 16,95% del total, seguido de mantenimiento de vehículo (8,78%) y transporte (5,65%).
Por el peso de los alimentos, es que las materias primas internacionales son las que generan mayor impacto, luego del petróleo, que causa el efecto más directo, explicó el economista, José Luis Arce.
El Banco Central le sigue el paso a una serie de precios internacionales de las materias primas, para analizar sus variaciones e impactos directos en el IPC.
En la lista están los granos básicos (trigo, maíz, soya y arroz), los derivados del petróleo (gasolina y diesel ), y algunos metales que se utilizan en la producción de bienes finales de consumo.
Para ello, analiza diversos índices de precios de materias primas, que utilizan como fecha base enero de 2013.
En ese momento, el indicador asignó un valor de 100 a cada precio de estos commodities y, a partir de ahí, se marca una evolución según la variación porcentual de su precio cada día.
Al verificar este índice, se percibe una clara caída en gran parte de las materias primas en los últimos meses.
Por ejemplo, el nivel del trigo en el índice se ubica en 64,4, tras una caída de un 14,5% entre el cierre de diciembre y el inicio de junio de este año. Ese desplome es más evidente al comparar el resultado del pasado 2 de junio con el de hace un año, cuando la caída es de 35,6%.
Lo mismo ocurre en el resto de granos básicos. Las caídas son de mínimo 27,3% y hasta 36,9%, en ese mismo lapso.
En los metales, el hierro ha tenido la mayor baja. Se ubicó en 42,9 al 2 de junio, luego de una reducción de 32% en el último año.
Sin embargo, el traslado de estas reducciones en los precios de los productos locales que componen el IPC no es tan claro, y aunque no siguen la tendencia a la baja, sí impiden que haya una mayor alza.
“El impacto sobre los precios al consumidor se diluye con el comportamiento de otros costos –por ejemplo, energía, mano de obra– y, además, la competencia en el mercado que puede conducir a que estos menores costos de producción no se reflejen en los precios al consumidor, sino que terminen aumentando los márgenes de ganancia de las empresas”, explicó Arce.
Por ejemplo, aquí la harina de trigo se ha mantenido en un nivel de 100 en el índice de precios de materias primas, es decir, no ha tenido variaciones aún cuando el costo del trigo ha caído de manera importante a nivel externo.
El traslape sí es más evidente en el caso del crudo, y su impacto en el IPC se puede cuantificar.
El precio de los derivados de petróleo en el mercado internacional se refleja en la gasolina y el diesel , ambos componentes de la canasta de ese indicador.
Además, su comportamiento impacta la fijación de precios y tarifas del transporte público, la electricidad, así como el valor de otros bienes y servicios.
Las gasolinas registraron una baja interanual de 1,2 puntos porcentuales en el IPC de mayo.
El crudo redujo su nivel en el indicador de materias primas internacionales de mayo del 2014 al mismo mes de este año; pasó de 107,6 a 62,8, respectivamente.
En lo que resta del año, la expectativa es que la inflación se mantenga en niveles bajos, ayudado por los precios de las materias primas internacionales, así como por la desaceleración de la producción y del crédito nacional, explicó Marco Chaves, analista de mercados internacionales de INS Valores.
Incluso, las expectativas de inflación a 12 meses, medidas por el Banco Central, llegaron a 4,7%, el nivel más bajo desde el 2006.