En el 2014, más costarricenses decidieron cambiar la entidad que administra sus fondos de pensión.
En total, 44.140 personas optaron por la libre transferencia y cambiaron la operadora de pensión complementaria (OPC) que les brindaba el servicio, lo cual se traduce en un crecimiento de 26.216, si se compara con el 2013.
Esas transferencias representaron un monto de ¢113.430 millones, para una variación interanual del 220%.
BAC Pensiones y BN Vital fueron las que más ganancias obtuvieron en el saldo de los movimientos, es decir en la diferencia entre la pérdida de clientes y la entrada de afiliados provenientes de otras operadoras.
En la otra acera, Popular Pensiones es la que perdió más contribuyentes sin recuperarlos.
El repunte del año pasado se debe a los cambios que han percibido las operadoras en el procedimiento de afiliación. Estas modificaciones llegaron por parte del Sistema Centralizado de Recaudación (Sicere), y han desencadenado resultados variables en los últimos dos años.
Como parte de los cambios, se estableció que los afiliados debían recurrir a la operadora que administra sus fondos para solicitar el traslado a otra entidad, lineamiento que está vigente desde noviembre del 2012.
Además, en enero de este año, otra de esas novedades fue aplicada, cuando se inhabilitó la posibilidad de realizar el trámite para cambiarse de operadora en las sucursales de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS).
Ahora, la gestión quedó cerrada a dos opciones: tramitar el traslado mediante la oficina virtual del Sicere o en la operadora a la que se encuentre afiliado el contribuyente.
El objetivo de esos cambios es que el afiliado resuelva si opta o no por un traslado luego de analizar la información que le proporciona la operadora, para que la decisión esté fundamentada, según la Superintendencia de Pensiones (Supén).
Sin embargo, estas modificaciones representan una de las principales causas del vaivén en la variación interanual que ha tenido la libre transferencia.
El 2013 percibió una caída robusta, con una baja de 179.416 personas (91%) respecto al año previo, que le permitió cerrar con tan solo 17.924 traslados.
En año pasado, los resultados dieron un giro y la cifra aumentó un 146%, aunque no se regresó al nivel de transferencias que manejaba el país en años anteriores (superior a los 190.000).
El cambio del procedimiento de afiliación, ejecutado en el 2012, desencadenó que al siguiente año cayera la cantidad de afiliados que optaron por la libre transferencia; mientras las OPC se adaptaban a las nuevas disposiciones.
Sin embargo, en el 2014 las operadoras de pensiones se adaptaron comercial y jurídicamente al nuevo procedimiento, por lo que aumentó de nuevo, explicó Marvin Rodríguez, gerente de Popular Pensiones.
La expectativa para este 2015 es que nuevamente disminuyan esos traslados, tomando en consideración el cambio reciente y la cantidad de afiliados que han cambiado de operadora en el primer trimestre.
A marzo pasado, cerca de 3.800 afiliados han optado por cambiar de entidad, mientras que en los primeros tres meses del año pasado la cifra superaba los 8.000.
Resultados por operadora
Del total de 44.140 movimientos entre una operadora y otra, que además se traducen en una cifra de ¢113.430 millones, hay operadoras ganadoras y otras que pierden afiliados.
El año pasado, BAC Pensiones fue el gran ganador, al evaluar los afiliados que llegaron a sus filas solamente a través de la libre transferencia.
Un total de 3.816 afiliados se trasladaron de esta entidad a otra OPC, pero recuperó esas pérdidas debido a que bajo el mismo sistema atrajo a 6.225 nuevos contribuyentes.
Esa diferencia positiva le permitió concluir el periodo con un monto positivo de ¢8.404 millones, la mayor cifra que reportó el mercado de pensiones.
Los trámites ágiles, la información completa y oportuna son la huella que intenta dejar esta operadora en sus afiliados.
"Urge estar en el top of mind del cliente con nuestro servicio ágil y diferenciado", dijo José Manuel Arias, gerente de BAC Pensiones.
Otro ganador de la libre transferencia es BN Vital, que entre los afiliados que perdió y ganó, obtuvo un saldo positivo de más de 1.000 clientes y ¢5.405 millones.
Luis Molina, gerente de operaciones de BN Vital explicó que la estrategia de la operadora es dar asesoría a sus afiliados, actuales y potenciales, por ejemplo, sobre la rentabilidad de los fondos.
En la otra acera está Popular Pensiones, que fue la operadora que reportó más pérdidas en este sistema de traslados.
Aunque esta entidad fue la que más recibió nuevos afiliados, también fue la que más perdió, lo que la llevó a concluir el 2014 con una pérdida de poco más de 8.000 contribuyentes.
Sobre esto, Rodríguez, gerente de la entidad dijo: "Somos la operadora que más trabajadores afilia anualmente. El saldo del fondo del Régimen Obligatorio de Pensiones Complementarias creció 17,4% en el 2014".