Los instrumentos de depósito a plazo han ganado popularidad entre los ahorrantes costarricenses este 2022 de la mano de un aumento en sus rendimientos, especialmente en moneda nacional.
A octubre de 2022, se contabilizó un aumento interanual del 15,55% en los depósitos a plazo mantenidos en el sistema financiero nacional en colones, según estadísticas del Banco Central de Costa Rica.
De manera acumulada, el crecimiento en los primeros diez meses del año fue del 16,52%, a pesar de que de enero hasta abril se registraron caídas anualizadas. Un incremento de esta envergadura no se veía desde el 2017, cuando el aumento en los depósitos a plazo a octubre fue del 20,71%.
En un depósito a plazo, el ahorrante pacta con el intermediario financiero un monto, un plazo y una tasa de interés, el ahorrante le deposita el monto y, una vez el plazo se cumple, el intermediario le devuelve el dinero más los intereses pactados; a mayor plazo, mayores rendimientos.
El incremento en la cantidad de depósitos a plazo es congruente con el acelerado aumento en las tasas durante este 2022. Recordemos que el país venía de casi dos años de pandemia en que las tasas estuvieron por los suelos y, aunado a un tipo de cambio que crecía cada vez más, el premio por ahorrar o invertir en colones fue prácticamente nulo.
LEA MÁS: ¿Ahorrar en colones o en dólares? Estas son las recomendaciones
Esto ha cambiado en 2022 debido a la tormenta inflacionaria que azota al mundo y que ha obligado al Banco Central a subir su Tasa de Política Monetaria (TPM) para combatir el encarecimiento. El aumento en la TPM ha provocado que sea más atractivo el ahorro —en especial en instrumentos seguros con buenos rendimientos como los depósitos a plazo— que el gasto.
Desde mediados de diciembre a la actualidad, la TPM ha crecido en 8,25 puntos porcentuales (p. p.) y el mercado ya ha absorbido una parte importante de estos ajustes. El aumento en el premio por ahorrar a plazo se evidencia a través de los cambios en la Tasa Pasiva Negociada (TPN), un promedio de las tasas pasivas (las que los intermediarios le pagan a los ahorrantes) de los bancos, cooperativas y mutuales.
Para octubre de 2022, la TPN en colones se promedió en un 9,12% para plazos de 360 a 539 días; un año atrás esa tasa estaba en apenas un 3,6%.
El colón sobresale
Después de dos años en los que el ahorro y la inversión en dólares eran el camino por excelencia, el colón empezó a ganar terreno. Los depósitos a plazo en divisas han caído interanualmente en un 0,17%.
Pese a mantenerse como una moneda fuerte y, por ende, más segura que la nacional, el actual contexto de menor aumento de tasas y caídas en el tipo de cambio le han dado un colchón a los colones por encima de los dólares.
LEA MÁS: ¿Cuál entidad me paga más por tener un certificado de depósito a plazo en colones?
Entre octubre de 2021 y 2022, la TPN en dólares en plazos de 360 a 539 días solo ha crecido de un 2,71% a un 3,28%, una subida marginal en comparación con los 5,52 p. p. que ha tenido su contraparte en colones.
A esto se le suma que la tasa de depreciación del colón en el último año no compensa la diferencia, de hecho la moneda nacional, contrario a la tendencia, se ha apreciado en términos interanuales.
La caída en el precio del dólar se ha dado principalmente en el segundo semestre del 2022, periodo en el que el tipo de cambio pasó de su pico de ¢696, el 22 de junio, a ¢601, el 29 de noviembre; una pérdida de casi ¢100. Estos valores corresponden al tipo de cambio promedio del Mercado de Monedas Extranjeras (Monex).
LEA MÁS: ¿Dónde me pagan más por tener un certificado de depósito a plazo en dólares?
Cambio de a la vista a plazo
El aumento en la captación a plazo también es congruente con una disminución en la captación a la vista. Los montos que se mantuvieron en el sistema financiero en colones en cuentas corrientes decrecieron en un 5,46% en octubre de manera anualizada.
En dólares se dio un fenómeno similar, solo que hubo una desaceleración en lugar de un decrecimiento: pasó de un incremento interanual del 15,16% en enero a uno de 5,7% en octubre.
Este es un ajuste común cuando suben las tasas de interés: los agentes económicos (personas y empresas) trasladan parte de sus ahorros desde instrumentos altamente líquidos hacia opciones a plazo.
“Lo que se está observando es que las personas y empresas con capacidad de ahorro lo están haciendo en instrumentos de captación a plazo; en esa línea, durante el año 2020 y gran parte del año pasado, los ahorros se concentraron mayoritariamente en productos a la vista, no solo para atender imprevistos que podrían generarse de la crisis de la pandemia y su etapa de recuperación, sino también esperando un repunte de las tasas de interés”, considera Maurilio Aguilar, director general corporativo del Banco Popular.
Adicionalmente, hay una ósmosis entre los meses en los que la captación a la vista empezó a disminuir y en los que los depósitos a plazo ganaron fuelle: el cambio de paradigma se dio entre el segundo y el tercer trimestre del 2022, justo la época donde las tasas de interés también empezaron a repuntar.
Todavía faltan contabilizar los meses de noviembre y diciembre donde, al ser una época asociada con el gasto, los montos depositados a plazo tienden a decaer frecuentemente.