El economista y exministro de Comercio Exterior, Alberto Trejos, dirigió un taller el pasado miércoles 20 de noviembre en el que diseccionó cuáles son algunos de los principales elementos que han definido la economía costarricense en el último año. A grandes rasgos, señaló diez puntos que hay que considerar. Se los resumimos a continuación.
El evento consistió en un taller sobre la actualidad económica nacional e internacional organizado por BAC y dirigido a periodistas.
1. Repunte de la producción interna
Después de la recesión mundial de la pandemia, el país volvió a crecer. En 2023 el Producto Interno Bruto (PIB) subió un 5,1% y en 2024 se espera una tasa cercana al 4%, el problema, dice Trejos, es que ese proceso de repunte ha sido más alargado, pero más tenue de lo que normalmente se espera, dado que, apenas salidos de la pandemia, se vino una crisis inflacionaria que obligó al mundo, incluido Costa Rica, a ponerle un freno al crecimiento.
2. Zonas francas cargan el peso
El repunte que ha vivido el país se explica en gran parte por el buen dinamismo que han tenido las zonas francas. Esto es fácilmente observable a través del Índice Mensual de Actividad Económica (IMAE).
Mientras que el régimen especial (donde están las zonas francas) crece a doble dígito, el régimen especial, que agrupa a poco más del 80% restante de la economía, crece en tasas más bajas. En setiembre, por ejemplo, este régimen creció en un 2,5% y el especial lo hizo en 12,5%.
3. Consumo de los hogares crece menos
La expectativa es que el consumo de los hogares se desacelere para cuando termine el año y pase de un 5% de crecimiento en 2023 a un 3,5%. Trejos señala esta desaceleración como una posible consecuencia de la caída en la inflación, dado que normalmente una caída prolongada en los precios se asocia con un menor consumo.
4. Pérdida de empleos
Si bien la tasa de desempleo se ha reducido en los últimos dos años, al economista le preocupa que lo ha hecho en un contexto donde el mercado laboral se ha achicado. Es decir, la baja en la tasa responde no necesariamente a un crecimiento en las oportunidades laborales, sino en un aumento en las personas que decidieron dejar de buscar trabajo.
5. Exportaciones fuertes
Las exportaciones, si bien ya no crecen tanto como el año pasado, mantienen una tasa de crecimiento superior al 10%. Sin embargo, es el sector de zonas francas el que crece a mejor ritmo, mientras que el del régimen definitivo lo hace a tasas más moderadas.
6. Leve deterioro fiscal
La situación fiscal del país es mucho mejor a la que se tuvo en gran parte de la década pasada, no obstante, Trejos señala que hay que estar atentos a que el leve deterioro de este 2024 no se agrande en el futuro.
El déficit financiero del Gobierno creció de un 3% a un 3,7%, con cifras a 12 meses acumuladas al mes de setiembre. La caída en los ingresos, principalmente de renta, ha afectado ligeramente las finanzas públicas. Trejos señala la reducción en el tipo de cambio como uno de los factores que contribuyen a esa disminución.
7. Inflación sigue negativa
El Banco Central de Costa Rica todavía no ha podido encaminar los precios a su meta de inflación: desde el 2022 solo en dos meses ha coincidido con la meta. La prolongación de una deflación puede afectar el crecimiento del país.
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8. Crédito crece moderadamente
El crédito al sector privado todavía crece, pese a las altas tasas de interés que han marcado los últimos dos años, pero, a criterio de Trejos, lo hace a paso moderado. Esto se puede explicar en parte porque el mercado podría estar esperando una reducción de las tasas activas, dado los ajustes a la baja en la Tasa de Política Monetaria realizados en este 2024 y los que todavía se esperan a futuro.
El crédito en dólares sí se ha disparado, probablemente por la percepción de abaratamiento causada por la reducción del tipo de cambio.
9. Tipo de cambio no sube
En los últimos cuatro meses el tipo de cambio se ha mantenido relativamente estable. Dicha estabilidad se ha dado en un periodo que coincide con la estación del año en la que menos abundan los dólares, pero también a pesar de que las expectativas cambiarias esperaban una depreciación del colón.
En las últimas tres semanas el tipo de cambio empezó un ligero descenso al mismo tiempo al que se acerca el inicio de la temporada alta de divisas. Trejos mencionó que proyecta un precio del dólar que cierre en alrededor de ₡510.
10. Turismo se recupera
El turismo parece haber dejado atrás la caída de la pandemia y ahora crece a buen ritmo. Las divisas que han ingresado por este concepto en los primeros seis meses del año suepran ampliamente los registros prepandémicos.
Trejos señala que ha notado un cambio en el perfil del turista hacia uno que tiende a gastar más en el país y que además está dispuesto a invertir en bienes raíces.