EscucharLas tasas de interés han vivido un marcado ajuste hacia el alza durante este 2022. En su lucha por aflojar la inflación, el Banco Central de Costa Rica (BCCR) ha subido su Tasa de Política Monetaria en 8,25 puntos porcentuales (p. p.) desde mediados de diciembre de 2021. Estos ajustes se trasladan al resto del sistema financiero y significan, a muy grandes rasgos, dos cosas: los préstamos son más caros y el ahorro es más rentable.
El ajuste hacia el alza golpea las cuotas de los deudores, las cuales se incrementan conforme el mercado absorbe los cambios del Banco Central. A setiembre del 2022, un 83% de los préstamos del sistema financiero estaban en tasa variable o semifija, es decir, más de tres cuartas partes de la cartera ha estado expuesta a los aumentos, salvo las que se encuentran en periodo de gracia.
La Tasa Básica Pasiva (TBP), la cual suele ser de gran importancia para los deudores ya que alrededor de 700.000 operaciones crediticias están ligadas a ella, ha crecido en un 114% desde que inició el año, pasando de 2,90% a 6,22% al 6 de diciembre.
La Tasa Activa Negociada (TAN), la cual es un promedio de las tasas de interés activas de todas las operaciones de crédito formalizadas en un determinado periodo entre bancos, cooperativas, mutuales y financieras, ha crecido en 5,2 p. p. en lo que va del año para los créditos en colones, mientras que para los de dólares el aumento ha sido más moderado: 2,46 p. p. Esta tendencia entre moneda local y extranjera se repite en el resto de las tasas activas y pasivas (lo que el banco le paga a sus ahorrantes) del sistema.
Por otro lado, quienes tienen capacidad de ahorro ahora reciben un mayor premio por guardar su dinero con intermediarios financieros. La Tasa Pasiva Negociada (TPN) neta en colones, la contraparte de la TAN, ha mostrado un marcado incremento de 171% para llegar hasta un promedio de 7,72%, según el ponderado de la semana del 23 al 29 de noviembre. La TPN en dólares, en cambio, ha crecido un 37% y actualmente se coloca en un 2,44%.
En el caso de la Tasa de Referencia Interbancaria, un promedio ponderado de las captaciones a plazo de colones y dólares en el sistema financiero, ha crecido un 103,44% para la moneda local (10,05%) y en un 17,31% para la extranjera (3,66%).
El mercado reacciona
Estos incrementos en tasas ya empezaron a mostrar sus primeros efectos sobre el mercado, los cuales han sido especialmente notorios en la conducta de los ahorrantes. Una de las formas en las que se evidencian los cambios es a través del incremento en los montos depositados a plazo en el sistema financiero, especialmente en colones, y la consecuente caída en la cantidad de dinero depositado en cuenta corriente.
A noviembre de 2022, los depósitos a plazo en moneda nacional crecieron en un 18,14% en términos interanuales. Para ese mismo mes, pero del 2021, se había registrado, en cambio, una caída del 5,74%. Hay que recordar que durante gran parte del 2020 y 2021 el premio por ahorrar e invertir en colones fue prácticamente negativo.
Por su parte, los depósitos a plazo en divisa apenas crecieron en un 1,43% para noviembre, sin embargo ese menor crecimiento también se puede explicar por un ajuste menos drástico en las tasas de interés pasivas en dólares.
Del lado del crédito, aunque en 2022 se ha prestado más dinero mes a mes que en 2021, a partir del segundo semestre se observó una ralentización en el crecimiento de la cartera crediticia de los bancos, cooperativas y mutuales. Este menor incremento también coincide con la etapa en la que más empezaron a incrementarse las tasas activas del mercado.
A noviembre de 2022, la cartera creció interanualmente en un 4,93% y su mayor crecimiento se dio en el mes de junio con un 8,71%.
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En su Informe de Política Monetaria, el Banco Central proyectó un menor incremento en los créditos del 2023 de aproximadamente un 3,4%. “Definitivamente las nuevas condiciones de mercado obligan a realizar ajustes a los planes de colocación de créditos para el año 2023, y, dados los efectos esperados del incremento de las tasas de interés, se proyecta una demanda menor de crédito”, mencionó Maurilio Aguilar, director general corporativo del Banco Popular.
Esta idea fue secundada por Laura Moreno, vicepresidenta de Relaciones Corporativas del BAC: “los niveles de tasas definitivamente influyen en el monto de crecimiento de la cartera, por lo que a mayores tasas se podría esperar que la colocación se ralentice”.
