El negocio de las casas de cambio concluyó el 2020 como una víctima más de la pandemia. Datos de la Superintendencia General de Entidades Financieras (Sugef) muestran resultados negativos (pérdidas) y variaciones interanuales con contracciones de más de tres cifras porcentuales.
Tan pronto cerraron los aeropuertos y el mundo se puso en pausa debido a la COVID-19 muchas empresas debieron suspender sus operaciones o buscar alternativas para mantener a flote su negocio. Las casas de cambio no fueron la excepción.
En una casa de cambio su único ingreso es por el resultado del arbitraje entre las compras y las ventas con el diferencial cambiario.
Javier Cascante, exsuperintendente de la Sugef, explicó que el hecho de que las casas de cambio tuvieran un 2020 difícil no implica que este sea un mal negocio y conforme se reactiva el tránsito de aeropuertos es probable que se recuperen a mayor velocidad.
En Costa Rica la Sugef supervisa a tres casas cambio. Sin embargo desde el 2018 solamente dos quedaron operando en el país. Esas son Teledolar y Global Exchange.
Teledolar tiene varios tipos de negocios bajo la misma marca, entre ellos, las casas de cambio. Sin embargo, no opera dentro del aeropuerto, sino que tiene varias sucursales físicas dentro de San José, Cartago y Heredia, además de brindar sus servicios digitales.
Carlos Vargas, gerente financiero de Teledolar explicó que la pandemia les afectó al igual que a otras áreas productivas, pero no en gran medida. Inclusive aseguró que en años anteriores han tenido una mayor afectación debido a la apreciación de la moneda.
Por otra parte, explicó que los resultados obtenidos al cierre de año pasado son específicamente para su negocio cambiario, pues las otras subdivisiones de Teledolar terminaron el 2020 con ‘muy competitivos resultados’.
Durante enero 2020, cuando la COVID-19 apenas empezaba a ocasionar el cierre de los primeros aeropuertos en el mundo y el colón seguía apreciándose, la casa de cambio Teledolar terminó el mes con una pérdida de ¢11,6 millones. Este comportamiento que se mantuvo hasta febrero del 2020.
En diciembre del 2020 su resultado final terminó con una variación del -70% con respecto al mismo periodo del año anterior.
El caso de Global Exchange no difiere mucho. Es la única que cuenta con sucursal en los aeropuertos del país y sus estados financieros también reflejan el impacto de la pandemia y la poca afluencia de personas en las instalaciones.
Global Exchange tuvo una variación en su resultado final (utilidades) de -487% con respecto al mismo periodo del año anterior.
Este es el segundo año consecutivo que esta firma termina el año con una variación interanual negativa. Sin embargo, durante el 2019 el colón se apreció y este es un factor que afecta las operaciones de las casas de cambio.
Rangos de compra y venta
Pese a que los resultados finales mostraron cifras negativas con respecto a su variación y los ingresos cayeron durante algunos meses ambas entidades mantuvieron su rango de diferencial entre la compra y la venta de la divisa.
Es decir, en cada dólar que compraban las entidades, su venta sería de hasta ¢100 más alta.
De acuerdo con Vargas aunque la pandemia les generó un impacto en cuanto a la venta de divisas, la incertidumbre jugó un papel crítico para mantener el rango de diferencial.
La duda se apoderó del mercado cambiario y desde finales de abril, el colón mostró una tendencia hacia la depreciación. Al final del 2020 la devaluación de la moneda nacional fue de 7,38%.
Este comportamiento permitió que las casas obtuvieran un beneficio adicional.
Caso de Teledolar
De acuerdo con Vargas los estados financieros publicados en Sugef muestran pérdidas en los primeros meses, pero argumentó que esto responde a un cambio operacional y no a un tema de pandemia.
Teledolar cuenta con varios modelos de negocio además de la casa de cambio. Por ejemplo, dentro de sus servicios la compañía envía remesas de dólares en la región, además cuenta con una cooperativa, entre otros servicios y productos.
Debido a estas diferentes vertientes de negocio con el confinamiento pudieron encontrar soluciones para no poner en pausa toda su operación.
Por ejemplo, Vargas aseguró que dentro de sus clientes tienen muchas personas extranjeras que se desempeñan en el sector de construcción para entidades del Estado y servicios domésticos, actividades económicas que se mantuvieron funcionando inclusive en las épocas de mayor restricción, lo que permitió que la casa de cambio siguiera siendo útil para el cambio de moneda y envío de dólares al extranjero.
Asimismo, en mayo cuando se celebra el día de las madres en varios países de Latinoamérica, hubo un aumento en la cantidad de personas que requerían cambiar dólares para enviar a sus respectivos países.
La tecnología también jugó un papel fundamental en el desarrollo de Teledolar, pues tan pronto se vieron forzados a cerrar sus instalaciones diseñaron una aplicación denominada Money donde sus clientes podían comprar dólares (transacción de casas de cambio), enviar remesas e inclusive pagar algunos de los servicios fundamentales.
Money le abrió a Teledolar una oportunidad de negocio durante las estrictas etapas de confinamiento y de esta manera evitaron la paralización total de su negocio.
Caso Global Exchange
Global Exchange es la única casa de cambio en los aeropuertos nacionales. Luis Benavente, gerente comercial de servicio al pasajero de Aeris Holding Costa Rica explicó en el 2017 a nacion.com que esta entidad es la que ha ganado durante 16 años el concurso y por ende el contrato que les permite operar en los aeropuertos.
El 2020 fue el segundo año consecutivo que la entidad cerró con variaciones interanuales negativas. Inclusive para diciembre del mismo año sus utilidades fueron de ¢-193 millones, es decir, una pérdida de casi ¢200 millones.
Sin embargo al analizar los ingresos por comisiones y servicios la entidad se mantuvo con cifras positivas todo el año. Desde abril hasta agosto fueron los meses donde recibieron menos ingresos, pero siempre con números positivos.
Global Exchange, ofrece las divisas con un margen cambiario 13 veces mayor que otras entidades del sistema financiero, pero en el 2017 Francisco García, gerente de la casa de cambio Global Exchange en Costa Rica, explicó que el servicio que ofrecen tiene un alto valor añadido para los visitantes.
Detalló que atienden las 24 horas, los 7 días de la semana, los 365 días al año; el tiempo de atención ronda entre minuto y medio y dos minutos, en ese entonces tenían disponibles 34 tipos de monedas y 73 empleados para atención clientes en diferentes idiomas.
EF envió consultas a la firma Global Exchange. Sin embargo, aseguraron que no brindarían declaraciones.