La Caja de Ande, entidad que recibe ahorros y otorga préstamos a 107.000 funcionarios y pensionados del Ministerio de Educación Pública, suspendió el otorgamiento de préstamos para la compra de equipo de cómputo, de autos nuevos y usados, y de bienes inmuebles entre otros.
La medida, adoptada el 20 de febrero, fue anunciada mediante un campo pagado publicado en el diario La Nación.
La suspensión también rige para los créditos de vivienda fiduciario, vivienda hipotecario alternativo y cancelación de hipoteca.
La entidad seguirá otorgando créditos personales, de gastos de salud y consumo en general. Estos productos credicitios son los de mayor demanda.
"Además mantemos el crédito para adquirir la primera vivienda. Los que están suspendidos son los que utilizan las personas que quieren crecer en el aspecto patrimonial con una segunda casa, por ejemplo", comentó Adrián Soto, gerente general de la Caja de Ande.
Las acciones se adoptan con el fin de ajustarse al tope de crecimiento del crédito establecido por el Banco Central de Costa Rica (BCCR), comentó Soto.
El año pasado, la Caja de Ande registró un incremento del 24,78% en su cartera de crédito, según se desprende de los datos reportados por la entidad a la Superintendencia General de Entidades Financieras (Sugef).
La meta original de la entidad era matener ese dinamismo en el 2013. Sin embargo, la directriz del Central pretende mantener el incremento del crédito en un 12% anual.
"Con estas medidas deberíamos poder cumplir con lo que permite el Banco Central", aseguró el gerente general.
La suspensión en el otorgamiento de estos créditos se mantendrá hasta el 31 de octubre, día en que finaliza la vigencia del tope crediticio.
El Banco Central anunció el pasado 31 de enero la aplicación de un tope de crecimiento a las carteras de crédito de todos los bancos del país del 9% entre febrero y octubre de este año.