El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) aprobó dos operaciones de crédito para el presupuesto de la República, mientras el país está a la espera de aprobación de reformas.
La entidad le concedió dos operaciones, cada una por un monto de un monto de $250 millones, obteniendo así un total de $500 millones.
El primer préstamo, que complementa el programa económico del país acordado con el Fondo Monetario Internacional, tiene un plazo de amortización de 7 años y un período de gracia de 3 años.
De acuerdo con el BID, el objetivo de este financiamiento es asegurar la sostenibilidad fiscal y mantener la estabilidad macroeconómica en el corto y mediano plazo.
Asimismo apoyará a través de recursos financieros al presupuesto de la República para suplir las medidas de contingencia y aumentar el gasto relacionado con la emergencia sanitaria y el apoyo focalizado a hogares y empresas afectadas por la crisis.
La operación también, contempla un aumento estructural en el gasto en programas sociales que benefician a las poblaciones más vulnerables, con el objetivo de reducir la pobreza y la desigualdad y proteger la inversión pública en infraestructura productiva.
La segunda operación apoya reformas estructurales para mejorar la efectividad del marco institucional macrofiscal, aumentar la eficiencia y progresividad del sistema tributario y mejorar la eficiencia y equidad en la gestión del gasto público.
El segundo, bajo la modalidad de Préstamo Programático de Apoyo a Reformas de Política, tiene un plazo de amortización de 20 años y un periodo de gracia de 5,5 años.
Estas medidas pretenden fortalecer las finanzas públicas y apoyar una recuperación económica robusta en la pospandemia. Los dos préstamos aprobados por el BID tienen un monto de $250 millones cada uno y una tasa de interés basada en LIBOR.