El Banco Popular logró captar un total de ¢12.275 millones en su primera emisión de bonos verdes en el mercado de valores costarricense. Eso representa un 49,1% de la colocación convocada para el pasado 26 de mayo, pues se pretendía un total de ¢25.000 millones.
La emisión de estos primeros bonos está inscrita por un total de ¢50.000 millones, que se dividen en dos colocaciones. La siguiente convocatoria aún no tiene fecha definida.
Desde el Banco Popular aseguraron que las iniciativas que resultan “nuevas” para el mercado local requieren un mayor análisis de parte de las empresas e instituciones, por lo que a pesar de que el riesgo sigue siendo el mismo del emisor; requieren verlo con sus comités de riesgos e inversiones por tratarse de un bono temático.
“Esto es parte del proceso de culturización y profundización sobre estos temas a lo interno de la entidades. Consideramos que este es un proceso beneficioso para todos, pues despertar el interés en el tema, se traduce en enriquecimiento de información para los tomadores de decisión y los diferentes actores del mercado de valores”, señalaron. La institución catalogó como “exitosa” la colocación en una respuesta enviada a EF por correo electrónico.
Por su parte, el director general de la Bolsa Nacional de Valores (BNV), José Rafael Brenes, señaló que los compradores de este instrumento fueron bastante variados, pues hay personas físicas, personas jurídicas, asociaciones solidaristas, cooperativas, puestos de bolsa, fondos de inversión y operadoras de pensiones.
“Los tres últimos se quedaron con un porcentaje mayor y por su naturaleza, podrían estar más interesados en este tipo de instrumentos”, comentó Brenes.
El bono se estructuró a cinco años plazo, con periodicidad semestral, referenciado a la tasa de referencia interbancaria (TRI), de 6 meses + 300 puntos base. La segunda colocación de la emisión aún no tiene fecha definida.
Elementos innovadores
Pese a no haber captado el total que se ofreció en la primera convocatoria, Brenes resaltó que la emisión del Banco Popular incorporó dos elementos innovadores: ser la primera emisión verde de oferta pública y también la primera con la tasa TRI para establecer la tasa del cupón, que es variable.
“Este último factor es, a nuestro juicio, el que requiere ir ganando madurez. Aún con casi un 50% del saldo colocado, se puede decir que la emisión dio un paso importante en este camino. La experiencia internacional si demuestra que, aunque se trate de emisiones verdes, el cupón es el factor determinante en el apetito del mercado”, comentó el director de la BNV.
La colocación hecha por el Banco Popular se hizo a través de la primera emisión de bonos verdes de oferta pública en el mercado de capitales del país. Su lanzamiento se anunció el pasado 20 de mayo.
De acuerdo con el concepto utilizado por la BNV, un bono verde es un instrumento de deuda mediante el cual se obtiene capital exclusivamente para financiar o refinanciar, parcial o totalmente proyectos que generan beneficios ambientales específicos, que además son evaluados y cuando sea posible cuantificados.
Estos proyectos deben contribuir a acciones como la mitigación y adaptación al cambio climático y otras problemáticas ambientales como transporte y energía, por ejemplo.
Este tipo de bonos pueden ser emitidos por gobiernos, bancos multilaterales, bancos comerciales, entidades gubernamentales, empresas privadas e incluso las carteras de crédito enfocadas en proyectos ambientales.