El Banco Central de Costa Rica (BCCR) anunció que a partir de este martes 17 de marzo la Tasa de Política Monetaria (TPM) estará en 1,25% luego de aprobar una disminución de un punto porcentual en este indicador.
La medida fue tomada como una de las acciones de estímulo y mitigación ante los efectos negativos que pueda tener la pandemia de coronaviruis y la enfermedad COVID-19.
Rodrigo Cubero, presidente del BCCR, realizó el anuncio junto con el presidente del Consejo Nacional de Supervisión del Sistema Financiero, Alberto Dent y el superintendente de entidades financieras, Bernardo Alfaro.
Este es el nivel más bajo que registra la TPM en los últimos diez años. Esta es la segunda disminución de la referencia en el 2020, pero se une a las adoptadas a lo largo del 2019, que tuvieron como objetivo contribuir con la reactivación económica. Adicionalmente, el Central ha descartado presiones inflacionarias al alza que pudieran comprometer la meta de inflación que está entre 2% y 4%.
Al inicio del 2019, la TPM estaba en 5,25%.
Cubero insistió en que espera que el efecto de la TPM llegue a la economía cuanto antes y que se refleje en las operaciones de crédito, pues las tasas pasivas serán las primeras en ser afectadas y estas a su vez afectan la Tasa Básica Pasiva, que se usa como referencia para los créditos en colones.
El anuncio estuvo acompañado de medidas que se aplicarán al sistema financiero para evitar deterioro en las carteras de crédito.
Medidas para deudores
Tanto Dent como Alfaro explicaron que se realizaron ajustes a la normativa de calificación de deudores de la Superintendencia General de Entidades Financieras (Sugef). Una de las medidas consiste en ampliar el plazo de operaciones a las que se les permite hacer una readecuación sin que se consideren especiales.
Inicialmente, las operaciones crediticias podían hacer dos readecuaciones, ahora podrán hacer hasta tres y el plazo de vigencia vencerá en junio del 2021 y no en junio del 2020 como estaba previsto.
Esos beneficios se aplicarán para todo tipo de crédito.
Además, Alfaro explicó que las entidades financieras tienen cuatro años de hacer provisiones contracíclicas, las cuales consisten en un tipo de ahorro para ser usado en épocas de dificultades económicas o iliquidez.
El superintendente detalló que a partir de este momento se reducirá a cero el ritmo de acumulación de esos instrumentos y que a partir de la otra semana se discutirá reducir el nivel mínimo de esas estimaciones.