"Tiene mucho trabajo para recuperar la confianza del pueblo", fue el comentario emitido por el ciudadano Luis Daniel Ureña durante una transmisión en vivo en la red social Facebook de Rodolfo Piza Ricafort; el candidato que representará al Partido Unidad Socialcristiana (PUSC) en las elecciones presidenciales del 2018.
La opinión de Ureña es un ejemplo de lo que debe enfrentar el ganador de estas votaciones internas del que fuera uno de los partidos políticos más importantes hace más de una década.
De acuerdo con el más reciente corte emitido por el Tribunal Electoral Interno (TEI) del partido, Piza Rocafort ha recibido un 69% (48.266 votos) del total de votos emitidos, para un 59% (787) de las mesas escrutadas.
Por su parte, a Rafael Ortiz, rival de Piza en la contienda, se le atribuyen un 24% (16.982 votos) de los votos válidos.
Alejandro Pacheco, vicepresidente del Tribunal, comentó que con el número de mesas escrutadas hasta el momento, el resultado es irreversible.
Al ser las 9 p.m de ayer domingo 5 de junio, Piza ya había brindado declaraciones a la prensa asumiendo su victoria, y Ortiz había salido a reconocer su derrota.
"Le deseo muchísimos éxitos. Rodolfo resultó ganador y en los próximos días tendremos la oportunidad de conversar. Felicidades", sostuvo Ortiz.
Un partido, ¿disminuído?
Los resultados llegan luego de una convención que transcurrió con un ambiente frío durante casi toda la jornada, lo que evidenció el mermado apoyo popular que sufre el partido y que se convierte en una de las tareas más difíciles, sino la más importante, que tiene por delante la nueva figura del PUSC si quiere llegar a Zapote.
Si bien el partido esperaba la participación de unos 300.000 simpatizantes durante la jornada, en los resultados preliminares se contabilizan poco más de 50.000 votos (sumando nulos y blancos).
Con Piza a la cabeza, el PUSC tendrá el reto de recobrar el protagonismo político del pasado, atrayendo nuevos simpatizantes, o reenamorando al viejo electorado, para poder acercarse a aquellos niveles de votación por arriba del 40%.
En las últimas tres contiendas presidenciales (2006, 2010 y 2014), por ejemplo, el apoyo al PUSC ha sido menor al 10%.
Justamente, fue de la mano de Piza, quien también figuró como candidato del PUSC en 2014 y tras la renuncia del doctor Rodolfo Hernández, que el partido logró mostrar signos de recuperación y crecer en número de votantes, al cerrar con un apoyo del 6%.
Sin embargo; los números no le alcanzaron para ganar las elecciones presidenciales pero sí para cerrar con el porcentaje más alto reportado por el partido después de los escándalos de corrupción de los expresidentes Miguel Ángel Rodríguez y Rafael Ángel Calderón que estallaron en 2004.
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La cara de un PUSC disminuído también ha quedado evidenciada a partir de la cantidad de diputados que llegan a ser la voz del partido en el Congreso.
Mientras en 1990 el partido logró sobresalir con 29 curules ocupadas, teniendo ventaja absoluta en los acuerdos, para el 2006 ya la cantidad de espacios ocupados por los socialcristianos era de cinco en la Asamblea Legislativa.
Una vez más, el 2014 le sonreiría timidamente al PUSC, pues logró sumar tres diputados más que los últimos cuatro años, al pasar de cinco a ocho representantes en el Congreso.
¿Qué prometió Piza?
El ex expresidente de la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS) prometió desde el anuncio de su precandidatura por el PUSC la construcción de un metro para San José y la reducción del gasto público a través de una reforma del Estado.
Su administración estaría trabajando en una primer línea de nueve kilómetros y la obra estaría siendo financiada con deuda.
Además, la problemática del desempleo fue otro de los temas a los que dijo le pondría especial atención y definió como meta bajar ese indicador a menos del 6% (hoy estancado en un cerca del 10%).
Para ello, potenciaría el emprededurismo y el clima de confianza para la instalación de nuevas empresas.
Pretende, por su parte, eliminar el déficit primario al cierre de su gobierno y dejar un déficit en el 2,5%. Eso sí, es tajante en rechazar la aprobación de nuevos tributos.
Según el precandidato, los recortes al aumento presupuestario y las mejoras a la recaudación serán suficientes para resolver un elevado déficit fiscal.
Los resultados
La convención abierta para elegir a un candidato que represente al PUSC en las elecciones presidenciales del 2018 tuvieron a Piza y a Rafael Ortiz como protagonistas.
La jornada se llevó a cabo desde las 9 p.m y hasta las 4 p.m de este 4 de junio, para lo cual se habilitaron 483 centros de votación y 1.334 mesas recolectoras de votos.
De acuerdo con datos emitidos por el Tribuntal Electoral Interno (TEI) del partido se imprimieron 300.000 boletas para el proceso.
El costo de la convención se estimó en la suma de ₡150 millones.
Para esta información colobaró el periodista Daniel Salazar
Esta información fue actualizada a las 10:12 a.m del lunes 5 de junio