Lima. El presidente mexicano Enrique Peña Nieto y el vicepresidente estadounidense Mike Pence conversaron este sábado en Lima en medio de crecientes tensiones bilaterales entre México y Estados Unidos sobre temas comerciales y migratorios.
La breve reunión bilateral, que se desarrolló en un clima distante y circunspecto (al menos en su parte visible por la prensa) había sido pactada la víspera y se concretó en la capital peruana al margen de la Cumbre de las Américas.
Permitió abordar cuestiones vinculadas al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (Nafta) y otros temas.
“Estoy muy complacido por la oportunidad de reunirme con el presidente Peña Nieto. Espero (tener) una discusión no solo sobre el Nafta, sino sobre una amplia gama de asuntos” de interés común para “nuestros países vecinos”, dijo Pence junto al mandatario mexicano.
Peña Nieto dijo por su lado que el propósito de este encuentro no era solo para hablar sobre el Nafta, “sino también sobre las relaciones bilaterales, que deben ser de cooperación y respeto mutuo”.
Pence y Peña Nieto se tomaron fotografías antes de iniciar sus conversaciones a puertas cerradas, sin responder consultas de los periodistas, algunos de los cuales le preguntaron al mandatario mexicano si su país iba a pagar el muro que el presidente Donald Trump pretende construir en la frontera común.
El vicepresidente estadounidense, quien representa en la cumbre al presidente Donald Trump, se reunió también este sábado en Lima con Justin Trudeau, primer ministro Canadá, el tercer socio del Nafta, vigente desde 1994.
Al llegar a la Casa Blanca en enero de 2017, Trump exigió renegociar el Nafta alegando que favorece a sus socios en desmedro del empleo e inversiones en Estados Unidos.
Trump, había amenazado con romper el acuerdo si no se reforma de manera más favorable para su país.
Peña Nieto ordenó por su parte evaluar los programas de cooperación con Estados Unidos luego de las crecientes tensiones generadas por la renegociación del Nafta y la decisión de Trump de enviar tropas de la Guardia Nacional a la frontera con México.
En jueves, el secretario de Comercio de Estados Unidos, Wilbur Ross, urgió en Lima por un acuerdo del Nafta en las próximas semanas dado el “calendario político” en Canadá y México.
“Estamos limitados por el calendario político”, dijo a un grupo de periodistas en el marco de la Cumbre de las Américas, iniciada el viernes.
“Si no logramos un acuerdo en las próximas semanas, después será muy difícil”, dijo poniendo la presión en sus socios comerciales.
Canadá tendrá elecciones provinciales en junio, México elegirá presidente el 1 de julio y en Estados Unidos habrá elecciones de medio mandato para el Congreso en octubre, recordó Ross.
El primer ministro Trudeau había anunciado hace nueve días que había una “gran posibilidad” de alcanzar un acuerdo y hacer el anuncio en Lima, pero poco después Washington lo descartó.