La presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, aterrizó este martes 2 de agosto en Taiwán, ignorando las amenazas chinas de represalias en caso de que la visita a la isla se llevase a cabo.
Las imágenes de la televisión mostraron a la legisladora, de 82 años, a su llegada al aeropuerto Songshan de Taipéi, donde fue recibida por el ministro taiwanés de Relaciones Exteriores, Joseph Wu.
Un comunicado del equipo de la dirigente Demócrata, del mismo partido que el presidente Joe Biden, y tercera figura en la jerarquía política de Estados Unidos, indicó que la visita muestra el “apoyo incondicional” de Estados Unidos a la isla y que esta “no contradice” la política de Washington hacia China.
Pekín, que considera a Taiwán como una provincia rebelde, fustigó por su lado las acciones “extremadamente peligrosas” de Estados Unidos.
Poco después del arrivo de Pelosi, China fustigó las acciones “extremadamente peligrosas” de Estados Unidos.
“Estados Unidos (...) constantemente distorsiona, oscurece y vacía de contenido el principio de ‘Una sola China’”, indicó un comunicado de la cancillería china, poco después de que el avión de Pelosi aterrizara en Taipéi. “Estas acciones son como jugar con fuego, extremadamente peligrosas. Y quienes juegan con fuego, morirán quemados”, añadió.
El ejército taiwanés negó que aviones chinos hubiesen cruzado el estrecho.
China y Taiwán están separadas de hecho desde 1949, cuando las tropas comunistas de Mao Zedong derrotaron a los nacionalistas, que se refugiaron en la isla.
Estados Unidos reconoció en 1979 al gobierno de Pekín como representante de China, aunque siguió dando respaldo militar a Taiwán.
Pelosi, que llegó a la isla en el marco de una gira asiática, es la más alta funcionaria estadounidense en visitar Taiwán desde su predecesor Newt Gingrich en 1997.
La posibilidad de esa escala puso al rojo vivo las tensiones regionales.
La “reunificación” de China es un objetivo prioritario para el presidente chino, Xi Jinping, quien la semana pasada le dijo formalmente a Biden por teléfono que evitara “jugar con fuego”.
Para respaldar su mensaje, el ejército chino difundió el lunes en internet un video de tono marcial que muestra a soldados gritando listos para la lucha, combatientes despegando, paracaidistas saltando de un avión o una lluvia de misiles que aniquilan varios objetivos.
La visita de Pelosi a Taiwán fue objeto de todo tipo de conjeturas en los últimos días y el gobierno taiwanés no la incluyó en su agenda.
El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby, dijo el lunes que Pelosi tenía el “derecho” de viajar a la isla.
“No hay motivo para que Pekín convierta una posible visita, congruente con la política estadounidense de hace tiempo en un tipo de crisis”, añadió.
