El miércoles 1.° de noviembre arrancará el cobro del marchamo 2024, pero esta vez con una buena noticia para los conductores: tendrán un ahorro de entre el 5% y el 50% en el monto a pagar, dependiendo del modelo de su carro. Se verán más beneficiados los de menor valor.
Con la aprobación en segundo debate del proyecto, la disminución en el impuesto a la propiedad de los vehículos quedó en firme, pero no es el único cambio que experimentarán los conductores.
El Financiero resume las novedades que tendrán los propietarios para el próximo año en lo referente al derecho de circulación. Están contempladas en el expediente 23.477.
Adiós a la metodología tradicional
Hasta el 2023 la forma de cálculo para el marchamo incluía: una depreciación de 10% anual, inflación acumulada en el último año (de 12,13% en 2022) y cambio en la carga tributaria (0%) aplicada a los vehículos. Debido a la elevada inflación del año pasado, el valor de la flotilla vehicular creció un 2,13% y con esto, el valor del marchamo.
En términos generales, este año el impuesto recayó sobre aproximadamente 1,8 millones de vehículos, con lo que Hacienda recaudó ¢117.821 millones. Se utilizaba la siguiente tabla de cálculo del impuesto:
Con la entrada en vigencia de la ley, cuando se adquiera un vehículo, ya sea nuevo o usado, se sabrá cuánto pagará por el impuesto del próximo año y los venideros. Cada año irá disminuyendo por la depreciación acumulada y no aumentará por inflación.
La base imponible de los vehículos automotores, motocicletas, embarcaciones y aeronaves, que conforman la flota circulante, será el valor asignado en el Registro Nacional a la fecha en la que entre a regir la ley. Será a partir de ese valor sobre el que se calculará el impuesto.
Se utilizará la siguiente tabla para depreciación, con una vida útil de 15 años.
El impuesto a la propiedad de los vehículos representó el 67% del valor total del marchamo en 2023, generando un 3,6% de los ingresos tributarios del gobierno, según datos de Hacienda.
Modernizar la flotilla
También la nueva ley plantea que con el objetivo de estimular la modernización de la flotilla vehicular del país y se le dé prioridad a unidades menos contaminantes, al impuesto a la propiedad de los carros se le hará una reducción dependiendo de su peso y las emisiones que emita.
Se aplicará la siguiente escala:
Además, a los automóviles eléctricos se les aplicará una deducción adicional del 0,1% independientemente de la antigüedad o el modelo.
Más entes recaudadores
Con el objetivo de facilitar el pago del derecho de circulación, la Dirección General de Tributación deberá autorizar a diferentes agentes recaudadores de los sectores público y privado. Los interesados deberán cumplir con varios estándares, pero principalmente estar inscrito ante Tributación.
También deberán contar con medidas de seguridad para el manejo del dinero recibido por el cobro del impuesto, implementar un sistema de cobro electrónico y en efectivo, informar sobre montos recaudados y las cuotas pendientes de pago. Finalmente, estas entidades deben asumir la responsabilidad por los errores o las irregularidades en el proceso de cobro del impuesto.
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Pagos fraccionados
La nueva ley permite que el propietario del vehículo o motocicleta pueda pagar de manera fraccionada el marchamo a partir del segundo año de aplicación, es decir, para el periodo 2025. Quedará a su criterio si lo hace en un solo tramo o bien en tres abonos que serían en marzo, junio y septiembre.
El Ministerio de Hacienda deberá habilitar los medios electrónicos o digitales necesarios, dentro de los que se incluye la Administración Tributaria Virtual (ATV), la página oficial del Ministerio de Hacienda, o los que sean de más fácil acceso y uso para el contribuyente, para que este realice los pagos parciales.
Borrón y cuenta nueva
Los dueños de vehículos no solo recibieron la rebaja del marchamo, esta semana se aprobó otro proyecto de ley, el 23.906, que permitirá que quienes tengan cobros atrasados se pongan al día al pagar el derecho de circulación correspondiente al próximo año. Incluye el total del principal, ajustes, intereses, multas y sanciones.
También se insta a Hacienda a realizar una campaña de comunicación sobre los efectos de esta reforma para fomentar que los conductores se ponga en regla.
Seis diputados de la fracción oficialista votaron en contra de esta iniciativa porque querían que la condonación llegara hasta 2022, es decir, que se pagaran el 2023 y 2024 para obtener el beneficio.
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Los mismos diputados dejaron claro que ni ellos ni los miembros del Poder Ejecutivo y Judicial gozarán de los beneficios planteados en estos dos proyectos que ahora serán ley una vez que los firme el presidente Chaves.
¿Y el marchamo digital?
A finales de abril pasado el gobierno presentó una iniciativa para digitalizar el marchamo y darle a los conductores una etiqueta digital que costaría ¢2.000 y tendría una vida útil de 10 años. Sin embargo, se anunció que sería una realidad hasta el próximo año.
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Nueve empresas mostraron su interés y se está en las etapas propias del proceso de adjudicación de la oferta ganadora, una gestión que podría extenderse hasta el mes de diciembre.
“La entrega de las etiquetas (nuevas) se realizaría el próximo año, lo cual significa que para este año el marchamo continua normal”, aseguró Mónica Araya, jerarca del INS.
Por lo tanto los conductores aún deberán pegar el tradicional sticker para el periodo 2024.