Los líderes europeos intentan cerrar filas frente a la ofensiva rusa en Ucrania, que se ha intensificado en las últimas 24 horas. Así lo han dejado ver en diferentes declaraciones que han ofrecido a lo largo de este jueves 24 de febrero.
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, prometió un paquete más severo de sanciones, dirigido especialmente a sectores estratégicos, haciendo eco de los anuncios que ha venido dando la Unión Europea (UE).
“Rusia ha traído la guerra a Europa”, dijo Macron en un mensaje horas antes de las cumbres que tendrán de emergencia el G7, la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y la misma UE.
Por su parte, el gobierno británico ha tenido una posición más confrontativa al decir que responderá “decisivamente” al “ataque” ruso. Está previsto que el primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, se dirija este jueves al parlamento de su país para esbozar la respuesta británica, según el diario The Guardian.
Además, el ejecutivo británico ha convocado al embajador ruso para pedir explicaciones y advertir de sanciones.
El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, también se ha manifestado al respecto. En sus declaraciones, abogó por el restablecimiento de la paz y dijo que su país será “solidario” con los pueblos afectados.
“Hay que frenar cuanto antes esta agresión”, declaró Sánchez, e insistió en que las acciones del presidente ruso, Vladimir Putin, “no pueden quedar impunes”.
El canciller alemán, Olaf Scholz, se unió a sus homólogos y expresó su solidaridad con Ucrania.
Mientras tanto, el mandatario de Ucrania, Volodimir Zelenski, salió a denunciar las acciones rusas y pedir ayuda para su país, el cual no es miembro de la UE ni de la OTAN.
“Los lideres de Rusia lo que quieren es aniquilar a su país vecino”, dijo Zelenski, quien también lanzó una advertencia a sus vecinos europeos: “Si no nos ayudan hoy, la guerra tocará a sus puertas”.
LEA MÁS: ¿Qué puede esperar Costa Rica de la lucha entre potencias por Ucrania?
El secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres, pidió asimismo a Rusia que “en nombre de la humanidad” devuelva sus tropas a territorio ruso.
Por otro lado, el gobierno de China sigue de cerca el conflicto, aunque evitó referirse a una “invasión” y a condenar a Rusia. Ambos gobiernos han mostrado un acercamiento mayor en los últimos meses.
“Instamos a todas las partes a que ejerzan la moderación para evitar que la situación salga de control”, dijo la portavoz diplomática china Hua Chunying, según informó la agencia AFP.
El Consejo de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) condenó este 24 de febrero lo que calificó como “la agresión a gran escala” de Rusia contra Ucrania, catalogandola como una clara violación del derecho internacional y una grave amenaza para el orden internacional basado en normas. La entidad comunicó que está reconsiderando toda cooperación con Rusia y está evaluando las repercusiones económicas y sociales.
Las tensiones entre Ucrania y Rusia están en su punto más álgido. Desde el miércoles por la noche (hora de Costa Rica), empezaron una serie de ataques e intervenciones rusas en terreno vecino.
Putin reconoció hace unos días la independencia de las autoproclamadas repúblicas de Lugansk y Donetsk, territorios prorrusos al este de Ucrania que se mantienen en conflicto contra tropas ucranianas desde el 2014.
No obstante, aún hay confusión sobre las intenciones de Putin. Aunque inicialmente se preveía que se hiciera con esa zona prorrusa, las acciones recientes dejan ver que buscaría una invasión mayor, incluso a la capital ucraniana, Kiev.
En esa ciudad la situación se transformó de la noche a la mañana. Calles vacías, estaciones de metro como refugio y un toque de queda declarado por su alcalde tienen a Kiev en estado de alarma.