Dos brazas, el presupuesto ordinario para el 2015 por ¢7,9 billones, y el levantamiento del veto a la reforma procesal laboral, vacunaron a la Asamblea Legislativa contra el acuerdo político necesario para hacer avanzar proyectos de ley de interés nacional durante diciembre, inicio del periodo de sesiones extraordinarias.
Con ese panorama desalentador los diputados iniciaron este viernes 19 de diciembre un mes de receso con un pobre balance de proyectos aprobados durante el arranque de las extraordinarias.
Este periodo inició el 1.° de diciembre pasado y se extenderá hasta el 30 de abril del 2015. Se caracteriza porque el Poder Ejecutivo controla la agenda de trabajo de los diputados.
Corta lista de logros
A solicitud de EF, el Departamento de Servicios Parlamentarios del Congreso recontó los proyectos aprobados en el plenario y las comisiones plenas, así como la cantidad de iniciativas de ley que dictaminaron el resto de comisiones entre el 1.° y el 16 de diciembre.
La lista de proyectos aprobados es corta: solo la compone la votación afirmativa en segundo debate del presupuesto extraordinario por ¢21.000 millones.
Ese plan lo aprobó el plenario en 1.° de diciembre y fue el único que logró el visto bueno de los congresista tanto en el pleno como en las tres comisiones con potestades plenarias de las cuales únicamente sesionó la Plena Tercera, el pasado 10 de diciembre. El Poder Ejecutivo no convocó proyectos para su debate en los otros dos miniplenarios.
En cuanto a la nómina de iniciativas dictaminadas, esta se limita a cuatro: dos planes para reformar la ley contra la corrupción y el enriquecimiento ilícito, una reforma a la Ley Nacional de Emergencias y Prevención del Riesgo los tres con dictamen negativo, y un plan para darle autonomía a la Asamblea de Trabajadores del Banco Popular, propuesta que sí recibió el aval preliminar en la Comisión especial de Economía Social.
Causas de la escasez
El diputado Mario Redondo del Partido Alianza Demócrata Cristiana (ADC) afirmó que la decisión del Poder Ejecutivo de no aceptar recortes en el presupuesto del 2015 y de levantar el veto a la reforma procesal laboral embarrialaron la cancha legislativa antes de las vacaciones diputadiles de fin de año.
Según Redondo, con sus actuaciones en esos dos proyectos, el Poder Ejecutivo echó por la borda cualquier posibilidad de diálogo político que permitiera sacarle mayor provecho a las primeras dos semanas de las extraordinarias.
"Se perdió la confianza entre la oposición y el Poder Ejecutivo con las actuaciones del presidente Luis Guillermo Solís y su Gabinete. Hay que decir, además, que la mala asesoría política y jurídica del Ejecutivo ha dado al traste con los acuerdos y es la culpable de una mala convocatoria de proyectos que no responde a las necesidades urgentes del país", sostuvo.
El diputado Víctor Morales Zapata del Partido Acción Ciudadana (PAC) y mano derecha del presidente Solís en el Congreso, reconoció que los diputados demostraron cansancio durante diciembre debido al desgate sufrido por el Parlamento a raíz de los debates presupuestario y laboral.
No obstante, a futuro el congresista ve un panorama más alentador y garantizó mejores resultados a partir de enero.
"La condición de fin de año y navidad también afecta el ánimo, aún así, creemos que el balance integral de este año es positivo y nos permite ver un panorama esperanzador para cuando volvamos del receso", contestó Morales.
"De vagos"
El también oficialista Ottón Solís fue más crítico y señaló la lentitud del proceso legislativo como el gran culpable del desperdicio de tiempo durante el inicio del actual periodo.
"Estas sesiones extraordinarias han sido un fracaso total. Hemos estado de vagos todo el mes. Tal ha sido la vagancia en la que hemos estado que yo me cansé de no hacer nada más que leer algunos documentos durante las sesiones del plenario. (...). Necesitamos estresarnos más para cumplirle al país", lamentó el diputado.
Mario Redondo señaló como los responsables de la desidia legislativa al Ministro de la Presidencia, Melvin Jiménez y al presidente del Directorio Legislativo, Henry Mora, diputado del PAC, a quienes acusó de no hacer lo suficiente por impulsar la productividad legislativa.
Se intentó conocer el criterio de Mora al respecto, pero no atendió una llamada de EF a su celular y tampoco devolvió un mensaje de texto solicitándole una entrevista.
Ottón Solís, en tanto, agregó que la convocatoria de proyectos de ley hecha por Casa Presidencial es poco retadora.
"No hay un solo proyecto que entusiasme o enoje a alguien en Costa Rica, y eso revela la falta de peso de los proyectos convocados", denunció.
A la vuelta del receso, después de la segunda quincena de enero, Víctor Morales Zapata adelantó que los diputados tendrán una agenda más movida en temas como infraestructura, combate al déficit fiscal y generación de empleo.