La exprimera dama Claudia Dobles reconoció por primera vez, este 13 de enero, que analiza postular su nombre para candidata presidencial del Partido Acción Ciudadana (PAC) en las próximas elecciones de 2026. La noticia la dio por medio de una carta que colgó en sus redes sociales, en la cual dijo sentirse “preocupada por el futuro del país”.
“Costa Rica atraviesa un retroceso en nuestras conquistas sociales. La seguridad, educación y salud están gravemente amenazadas, y a muchas personas no les alcanza el dinero para llegar a fin de mes (...) Las dificultades que enfrentamos como costarricenses, así como el amor y compromiso que siento por nuestro país, me llevan a considerar postular mi nombre como precandidata”, redactó.
Quiero compartir una reflexión importante que ha estado muy presente en mí durante estos últimos meses. pic.twitter.com/1kyxyFL7sO
— Claudia Dobles Camargo (@ClaudiaDobles) January 13, 2025
Las palabras de la exprimera dama confirman una versión que desde hace varias semanas circulaba entre corrillos políticos. Incluso el fundador del PAC, Ottón Solís, había insinuado la posibilidad de que Dobles fuese la candidata rojiamarilla los próximos comicios, en una entrevista que dio al medio regional TV Sur en septiembre pasado.
“Yo creo que va a haber una excelente candidata para la próxima elección”, había dicho sobre Dobles. “Ella está en universidades de mucho prestigio en Estados Unidos trabajando, y yo espero que ella sea la candidata”, subrayó.
Además de haber sido primera dama, como esposa del expresidente Carlos Alvarado, Dobles es una militante activa del PAC: la agrupación que gobernó de 2014 a 2022 en Costa Rica, pero que luego cayó en desgracia política, después de ocho años de desgaste en el mando, de decisiones impopulares tomadas durante la pandemia de covid-19 y de una condena por estafa contra el Estado, relacionada con contrataciones irregulares durante la campaña del 2010.
El PAC logró ganar las elecciones presidenciales en las segundas rondas de 2014 y 2018, cuando Luis Guillermo Solís derrotó a Johnny Araya y cuando Carlos Alvarado derrotó a Fabricio Alvarado. Sin embargo, su candidato en 2022, Welmer Ramos, quedó en la décima posición y recibió menos del 0,7% de los votos emitidos ese año.
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Su representación en el Congreso también se extinguió. Luego de alcanzar su máximo número de diputados en 2014 (13), el número cayó a solo una decena en 2018 y luego se redujo a cero en los últimos comicios nacionales.
A nivel de gobiernos locales, el PAC también perdió toda representación. Aunque el máximo de ayuntamientos de los que llegó a disponer fue de solo seis en 2016, en 2024 no alcanzó una sola victoria en los 84 cantones disponibles.
Dobles buscará mejorar todas esas cifras y, de paso, que el PAC pueda optar por recursos de financiamiento electoral. El Partido ha quedado marginado de ese dinero en los últimos años y la situación incluso ha puesto en entredicho su viabilidad financiera, al tener que afrontar la agrupación una deuda con el Estado.
Al igual que los partidos tradicionales, el PAC enfrentará el reto en 2026 de persuadir a los electores, que ven a estas agrupaciones como parte del establishment. Esto, según el politólogo Ronald Alfaro, del Centro de Investigación y Estudios Políticos (CIEP), es un escenario complejo, pues existe insatisfacción con múltiples políticas públicas y sus resultados en los últimos años.
“Política violenta”
En su carta publicada este lunes, Dobles también aseguró como una de sus motivaciones para entrar en la carrera política contrarrestar “la política basada en violencia y falta de respeto”, aunque sin hacer alusión directa a ningún actor en específico.
En esa línea, la politóloga del Observatorio del Desarrollo de la Universidad de Costa Rica (UCR), Carolina Ovares Sánchez, había señalado en una reciente entrevista con EF que algunos de los partidos y candidatos podrían optar por diferenciarse del actual gobierno optando por un discurso de defensa de los valores democráticos. No obstante, subrayó que el éxito o el fracaso de esa narrativa dependería de cuánto realmente logre movilizar al electorado ese discurso.
Los fuegos electorales se encendieron desde muy temprano en este 2025, a poco más de un año para los comicios de 2026.
En otros partidos tradicionales como el PLN y el PUSC se han confirmado múltiples precandidatos. Los liberacionistas son el exministro Enrique Castillo, el economista Marvin Taylor, los diputados Gilberth Jiménez y Carolina Delgado, la abogada Viviam Quesada, y el ex superintendente y expresidente de la Caja, Álvaro Ramos. En tanto, los socialcristianos son el expresidente de ese partido Juan Carlos Hidalgo y el diputado Leslye Bojorges.
Asimismo, se presume que Fabricio Alvarado sería el candidato de Nueva República; al igual que Eliécer Feinzaig el del Partido Liberal Progresista (PLP); mientras que el Frente Amplio (FA) espera decidir sus candidaturas hasta el segundo semestre del año. Nombres como José María Villalta o los actuales diputados Andrés Robles o Sofía Guillén resuenan entre corrillos.
También se espera que la exdiputada del Movimiento Libertario y exministra de la Presidencia de la actual administración, Natalia Díaz, asuma la representación de su partido Unidos Podemos, como ya lo hizo en los comicios anteriores; y que el exministro de Obras Públicas, Luis Amador, haga lo propio por medio de alguna otra agrupación.
Por el lado del oficialismo, todavía se desconocen los planes específicos. Ni siquiera existe claridad sobre cuál sería el partido que el grupo cercano al presidente Rodrigo Chaves utilizaría para intentar mantenerse en el poder, y el mandatario incluso ha planteado posibilidades que van desde renunciar para buscar una diputación hasta irse del país al finalizar su mandato.