En 2016, el Estado llegó a invertir ¢93.999 millones en la colocación de Bonos Familiares de Vivienda (BFV); la cifra significó un aumento cercano a los ¢10.000 millones en comparación a la inversión realizada un año atrás.
Tal inversión sobresale como la segunda más alta desde el año 2000.
De acuerdo con el estudio "Situación del sector vivienda y desarrollo urbano de Costa Rica, 2016", elaborado por la Fundación Promotora de la Vivienda (Fuprovi), ese monto llega como respuesta a una mayor entrega de bonos para ese año.
Para el periodo en análisis, la cantidad de bonos entregados fue de 11.823, significando casi 1.000 unidades más que en 2015; un crecimiento del 9%.
Con ese comportamiento, además, se suma el tercer año consecutivo con un aumento sostenido en la colocación de bonos de esta índole, que no se veía desde el 2006.
Para Franklin Solano, investigador de la Fundación, el incremento en los números responden a tres posibles causas. La primera de ellas debe entenderse como un desface entre el momento en que se hace la solicitud del bono y se formaliza el proceso."Los trámites no se dan de un año para otro, en algunos casos se puede iniciar un trámite y dos años más tarde formalizarlo, entonces eso puede incidir en los números", continuó Solano.
Como segunda posible causa se menciona una mayor dotación de recursos por parte del Estado para este fin.
"La principal fuente de los recursos para dotar al país de más bonos viene de Fodesaf. En este caso, podríamos decir que si ellos mejoran su recaudación, entonces se tendría más dinero para ese fin", detalló el investigador.
En este punto, Fuprovi fue enfático en que no todos los recursos que deben ser girados para vivienda a nivel nacional se logran.
"Un 3% de los presupuestos nacionales, ordinarios y extraordinarios, aprobados por la Asamblea Legislativa —tienen que girarse a vivienda—, pero en la práctica esta última transferencia no se ha dado, o su monto ha sido inferior a lo estipulado. La última vez que Hacienda transfirió recursos a dicho fondo fue en 2007, para el programa de bono colectivo, por la suma de ¢3.000 millones", se lee en el documento.
Además, una mejora en los procesos de entrega de los bonos completa la lista de posibles causas para que los números mantengan comportamientos positivos. Sin embargo, el estudio no profundiza si la ayuda llega a verdadera población meta.