Le apetece un plato de yuca con mojo, ropa vieja, vaca frita o hasta lechón asado.
El restaurante Rincón Cubano en Momentum Lindora, le significó a Arturo la consolidación de un sueño y la oportunidad de evidenciar su cultura a través de la comida.
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No fue el primero de los negocios que gestó este cubano - norteamericano en tierras costarricenses; le antecede una profesión como corredor de bolsa y una agencia de viajes que en asociación con diferentes operadores a nivel nacional ofrecen paquetes vacacionales a lo largo del territorio nacional.
Llegó a Costa Rica, para quedarse, en el año de 1994. Viajes de negocios lo hicieron conocer el país y enamorarlo a tal punto de establecerse.
"Siempre tuve la idea de vivir en un país latinoamericano desde mi salida de Cuba. Viví en Europa por cuatro años y me crié en Estados Unidos. Pero quería experimentar eso”, comentó el empresario.
Pero para llegar a saborear ese éxito; el camino debe recordarse.
Bajo la operación Pedro Pan (1960-1962), una maniobra coordinada entre el Gobierno de los Estados Unidos, la Iglesia católica y los cubanos que se encontraban en el exilio, unos 15.000 niños cubanos fueron llevados a tierras norteamericanas. Arturo fue uno de ellos.
Al cumplir ocho años, sus padres, preocupados por lo que traería la implementación de un régimen comunista en la isla, lo enviaron a los Estados Unidos.
"Fue una etapa de una gran aventura. Llegué a Florida, estuve un mes ahí en una especie de campamento para luego ser enviado al norte. Siempre tuve contacto con mis padres por medio de cartas, pero tuve que esperar cerca de un año para volver a reunirme con ellos”, recuerda Nápoles.
Ese episodio lo privó de conocer su propio país y desde entonces, fantasea con la oportunidad de volver a la isla y descubrirla desde una visión adulta.
"Sí pensaría en volver, no se si permanentemente, pero tengo familia allá. Me gustaría ver donde fue mi niñez, la escuela donde fui”, subrayó.
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La noticia del levantamiento del embargo de parte de Estados Unidos hace que esa idea tome cada vez más fuerza, aunado al sentimiento de querer ver, algún día, a los habitantes de la isla disfrutar de un estilo de vida como el que da un país libre y en democracia.
Mientras, en Rincón Cubano no sale un platillo sin la aprobación de Arturo, quien baraja la idea de hasta franquiciar su negocio.
Ficha técnica
- Nombre completo: Arturo Nápoles
- Edad: 62 años
- Profesión: Empresario
- Tiempo en Costa Rica: 21 años
- Negocio: Restaurante Rincón Cubano
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