Una nueva iniciativa de ley busca que personas extranjeras realicen sus trabajos de forma remota desde Costa Rica.
El proyecto de Ley para Atraer Trabajadores y Prestadores Remotos de Servicios de Carácter Internacional (22.215) busca que más personas vean en el país una oportunidad para realizar teletrabajo, siendo turistas, con condiciones favorables y fomentando el consumo en el país.
El texto propone crear una categoría migratoria especial para los llamados nómadas digitales.
La iniciativa busca extender la estadía permitida en la visa de turistas por hasta un año, con opción de prórroga, para las personas que cumplan con los requisitos.
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Entre las ventajas para los nómadas digitales que elijan a Costa Rica como destino está no pagar el impuesto sobre la renta, mientras que, para el país, el gran beneficio está en el consumo de estas personas en el país.
¿Qué propone en detalle este proyecto y cuál es el ambiente en la Asamblea Legislativa para que sea realidad? EF se lo explica.
Nueva categoría
El proyecto de ley presentado por el diputado del Partido Liberación Nacional (PLN) Carlos Ricardo Benavides, propone la creación de una subcategoría migratoria especial: Trabajador o Prestador Remoto de Servicios.
Son personas que trabajan de manera remota y que reciben su salario o ingresos en el extranjero, aunque vivirían en lapsos largos en el país, donde consumirían y gastarían su dinero.
“Es una tendencia que viene surgiendo en el mundo, especialmente con más fuerza durante la pandemia”, explicó Benavides. El objetivo es que Costa Rica no se quede atrás pues ya países caribeños han implementado estas facilidades.
Hoy la visa de turista se expende por tres meses. Si quiere continuar viviendo en el país, deberá registrar una salida internacional y volver a entrar algunos días después.
El proyecto de ley propone ampliar ese tiempo. Los nómadas digitales que decidan trabajar desde Costa Rica podrán estar ininterrumpidamente en el país, hasta un año completo, con opción de una prorroga por seis meses.
“Busca de cierta forma, regularizar una situación migratoria que se sabe que ocurre, creándole las condiciones para que no esté ejerciendo en una cierta ilegalidad en el país y adicionalmente, tratar de crear un nuevo medio de ingreso de extranjeros al país”, explicó Guillermo E. Zúñiga, socio de infraestructura e inversión extranjera, de Ecija Costa Rica.
Los trabajadores remotos serían turistas de larga estancia que vivirían en Costa Rica mientras trabajan para una empresa en el extranjero. Sus gastos de hospedaje, consumo y cualquier otro asociado a la permanencia en el país, se realizarían dentro de Costa Rica, inyectando recursos frescos a la economía.
El proyecto también contempla que la persona pueda viajar con su núcleo familiar. Esto ampliaría aún más el consumo de estas personas en el país, de acuerdo con Benavides. Por ejemplo, en caso de una familia, los niños podrían ser matriculados en escuelas o colegios de la zona.
“Son personas con un buen ingreso económico que a veces viajan solos, a veces con su pareja o núcleo familiar y gastan en el país en donde se van a estar durante meses, un año o poco más. Durante todo ese tiempo gastan en la comunidad, alquilan carro, hoteles. Es gente que viene a contribuir con el país donde residen”, explica Benavides.
El aporte para el sector de hospedaje sería importante. “Este nómada digital ha revolucionado la industria hotelera”, asegura Megan Kennedy, directora regional de Selina para Costa Rica. Los hoteles de la marca tienen espacios de coworking, dedicados a este nicho.
Requisitos
Para poder optar por esta condición, el proyecto de ley propone que el nómada digital realice la solicitud a través de una plataforma digital desde su país de origen.
La solicitud constaría de un formulario donde se solicite la visa y se aporte la información que demuestre el cumplimiento de los requisitos..
La Dirección General de Migración y Extranjería (DGME) tendrá́ un plazo de 15 días naturales para resolver. Si hiciese falta información, el proyecto propone cinco días hábiles para informar al solicitante y pedir los documentos faltantes, y hasta ocho días a la persona interesada para completar el trámite.
Estos son los requisitos contemplados en el texto:
- Percibir una remuneración mensual de al menos $5.000. Esto se debe comprobar a través de, por ejemplo, estados de cuenta o una carta del patrono.
- Obtener un seguro de servicios médicos que cubra a la persona solicitante por toda la duración de su estancia en el país. Igualmente deberán estar cubiertos todos los miembros del grupo familiar.
- Realizar el pago, por una única vez, por el otorgamiento de visa de no residente como Trabajador o Prestador Remoto de Servicios. El monto será determinado en el reglamento.
El proyecto también detalla los requisitos para los miembros del núcleo familiar que acompañarían al solicitante. En caso de que más de una persona del núcleo esté aplicando como nómada digital, podrán dividir el monto de los $5.000 mensuales.
Para los demás miembros los requisitos son:
- Presentar fotos del pasaporte.
- Copia de certificado o constancia de nacimiento en el caso de los hijos o hijas.
- Realizar el pago, por una única vez, para el otorgamiento de la visa de cada miembro, monto que deberá ser determinado mediante reglamento emitido por la DGME.
- Aportar cualquier otro dato requerido por la DGME para comprobar la relación.
Los requisitos son mayores para el grupo acompañante que para la persona solicitante. “Esto es algo que debe ser mejorado porque es una contradicción. Deberían ser trámites muy fáciles”, señala Zúñiga.
Beneficios
El beneficio migratorio se les otorgará a los solicitantes por un año, prorrogable por un periodo de seis meses.
Otro de los beneficios más atractivos del proyecto es que las personas en esta condición tendrán una exoneración total del impuesto sobre las utilidades, o renta. Es decir, no deberán pagar nada sobre el monto que reciban como salario o pagos por su trabajo, por ser provenientes del exterior.
Tampoco pagarían impuestos por la importación de equipos, instrumentos o herramientas que sean necesarios para realizar sus trabajos. Para esto deberán presentar justificar la necesidad y el uso del equipo para aplicar la exención, a través de una declaración jurada.
De acuerdo con Zúñiga, para robustecer el proyecto sería importante agregar otros tres beneficios.
Primero, excluir a las personas del sistema de seguridad social. “Tenemos que estar seguros de que la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS) no indique que estas personas tienen que contribuir con la seguridad social y esto tiene que quedar expresamente indicado en la ley”, declaró.
Otro aporte importante sería que las personas en esta categoría migratoria estén autorizadas a abrir cuentas bancarias en el país, para facilitarles realizar trámites y pagos como alquileres, o recibos de servicios, por ejemplo.
Finalmente, la licencia de conducir. La vigencia de entrada con el pasaporte es de tres meses, pero debería hacerse prorrogable por el mismo lapso de estancia de los nómadas digitales en el país.
Para lograr atraer a estos nómadas digitales el Instituto Costarricense de Turismo (ICT) estaría encargado de la promoción, de acuerdo con el proyecto de ley.
Avance
El proyecto de ley fue presentado en setiembre en la Asamblea Legislativa. Actualmente se encuentra en estudio en la Comisión de Turismo, pero, de acuerdo con su proponente, cuenta con el apoyo de varios de los diputados, lo que podría acelerar su trámite en el Congreso.
Según Benavides el texto está abierto a recibir mejoras. En las próximas semanas se espera reunir con distintos sectores para buscar ajustes que puedan fortalecer el documento.
El objetivo del legislador es que el proyecto se apruebe antes de que termine el año para que coincida con la temporada alta de turismo en el país.