El Departamento de Estado de Estados Unidos se asociará con Costa Rica para explorar oportunidades de diversificación y crecimiento del ecosistema global de semiconductores, según informó Casa Presidencial este viernes 14 de julio mediante un comunicado de prensa.
La decisión se enmarca es una dinámica geopolítica compleja. Occidente quiere desprenderse de la dependencia asiática de chips. Países como Taiwán están entre los principlaes proveedores, pero la isla está envuelta en tensiones geopolíticas que amenazan las cadenas de suministro.
El año pasado el presidente estadounidense, Joe Biden, firmó una ley –conocida como Chips Act– que tiene como objetivo atraer a ese país inversiones para el desarrollo y la producción de microprocesadores a través de diversos incentivos.
“Costa Rica y Estados Unidos implementarán la revisión del desarrollo actual de la industria de semiconductores, el marco regulatorio y las necesidades del país para dar inicio con los resultados de esta importante colaboración”, indica el texto de Presidencia.
En setiembre del año pasado la visita del subsecretario para Crecimiento Económico, Energía y Medio Ambiente de EE.UU., José Fernández, dio las primeras pistas del interés que tiene el Gobierno de Biden en desarrollar alta tecnología en países cercanos.
Estados Unidos (EE.UU.) calificó a Costa Rica como “un lugar seguro para invertir en la producción de microprocesadores”, según ha expresado el presidente de la República, Rodrigo Chaves. Esto significa que el país es oficialmente un candidato para recibir el incentivo que otorgará el gobierno de EE.UU. para el desarrollo de semiconductores.
“Estados Unidos ve a Costa Rica como un socio para garantizar que la cadena de suministro de semiconductores pueda seguir el ritmo de la transformación digital en curso”, aseveró la embajadora de Estados Unidos, Cynthia Telles.
LEA MÁS: Guerra de chips entre EE. UU. y China abre oportunidades para Costa Rica
En el país ya opera uno de los principales suplidores de semiconductores a nivel mundial, la empresa Intel. Sin embargo, también hay fuertes competidores en esta industria, como Nvidia. Los chips gráficos avanzados que produce esta compañía se destacan por hacer muchos cálculos simultáneamente, lo cual es crucial para el trabajo de IA, un sector con creciente demanda.
“Es una oportunidad para que Costa Rica siga subiendo la cadena de producción. En mi opinión es una oportunidad y lo que hemos dejado claro al gobierno es que estamos interesados en que ellos miren esta legislación para que analicen si se pueden aprovechar de ella”, dijo a EF en setiembre anterior Fernández.
El incentivo del Chips Act equivale a $500 millones a lo largo de cinco años, dirigido a nuevos programas e iniciativas en aliados y socios de Estados Unidos. No obstante, se desconoce si el monto se entregará a un solo país o se repartirá entre varios candidatos.
Nota actualizada el 15 de julio.