47 universidades privadas entregaron 26.048 títulos de grado en todo 2022. Este es el registro más reciente sobre el número de títulos de bachillerato o licenciatura otorgados por estos centros, publicado por el Consejo Nacional de Rectores (Conare) este año.
Las universidades privadas, como es la tendencia de los últimos años, entregaron la mayoría de las certificaciones de este tipo que se emitieron en el país.
Más de seis de cada diez títulos de grado de 2022 fueron expedidos por esas casas de enseñanza; específicamente, el 64,7% de los más de 40.000 unidades, si también se contemplan los datos de las ‘u’ públicas.
¿Cuál universidad privada otorgó más títulos en 2022 y cómo se comportó la emisión en comparación con años pasados? EF revisó los datos de los últimos nueve años y estas son algunos de los principales hallazgos.
Las que más títulos dieron
La universidad privada que más títulos otorgó en 2022 fue la Universidad Latina de Costa Rica.
Dicha institución entregó 3.177 certificaciones de bachillerato y licenciatura, y fue la segunda con una mayor cantidad de graduados de entre todas las casas de enseñanza superior del país. Solo la superó la Universidad de Costa Rica (UCR). Dicho gigante del sector público emitió más de 5.500 títulos en el mismo período.
El liderazgo de la U Latina entre las universidades privadas es una constante histórica.
La entidad ha ocupado la primera posición en este ranking en los últimos nueve años (el período revisado por EF para este trabajo), aunque su número de graduados ha caído sustancialmente desde 2014.
Para mantener esa primera posición, sin embargo, la Universidad Latina cuenta con una gran estructura que le permite un gran despliegue a nivel nacional. Tiene dos campus principales en Heredia y San Pedro de Montes de Oca; así como cinco sedes regionales en Santa Cruz, Cañas, Pérez Zeledón, Guápiles y Grecia.
Asimismo, está en proceso de expansión. La entidad anunció una inversión de $32 millones para remodelar 15.000 metros cuadrados (m²) de su sede de San Pedro en 2023 y 2024; así como para construir nuevas edificaciones en otros 7.000 m² adicionales en el mismo campus.
La U Latina, sin embargo, no es el único centro educativo privado que destaca por la magnitud de sus graduaciones.
Por el contrario, en el país se contabilizaron hasta 11 universidades privadas que entregaron más de 1.000 títulos en 2022. La graduación de estos centros representó tres cuartas partes del total de entre las 47 universidades privadas del país y casi la mitad general (es decir, contando las cifras de las ‘u’ públicas).
Esas 11 universidades, además de la Latina, fueron la Metropolitana Castro Carazo, la de Ciencias y el Arte, la Americana, la Internacional San Isidro Labrador, la Florencio del Castillo, la Libre, la Santa Lucía, la de San José, la Hispanoamericana y la Fidélitas, en ese orden.
Las cifras de estos centros privados son comparables con las de centros públicos como el Instituto Tecnológico o la Universidad Técnica Nacional, los cuales egresaron a 1.443 y 1.677 graduados, respectivamente, también en 2022.
Y las que menos graduaron...
Pero el sector privado es muy disímil en cuanto a estas mediciones.
Si bien hay unas 15 universidades cuya gradación es intermedia (entre 100 y 1.000 alumnos en 2022) —entre ellas algunas reconocidas como la Universidad San Marcos, la Universidad Autónoma de Centro América (UACA) o la Universidad de las Ciencias Médicas (Ucimed)—, otras 21 instituciones privadas no alcanzaron la centena de certificaciones entregadas.
Ese grupo lo compusieron las universidades Adventista de Centroamérica; Continental de las Ciencias y las Artes; San Juan de la Cruz; Isaac Newton; Independiente de Costa Rica; Autónoma de Monterrey; Magister; Fundepos Alma Mater; de Liderazgo, Excelencia, Avance y Desarrollo; de Ciencias Empresariales; Creativa; Braulio Carrillo; Cenfotec; Centroamericana de Ciencias Sociales; Metodista; Invenio; y Panamericana, en ese orden.
Además, se suman otras cuatro universidades privadas que ni siquiera alcanzaron una decena de graduados en todo 2022, cada una.
Ellas fueron la Universidad del Turismo; la Teológica de América Central; la Bíblica Latinoamericana; y la Juan Pablo II. Esta última apenas entregó un título de grado, a un estudiante de la carrera de “Asesoría y Orientación Familiar”.
Opacidad del sector
El número de estudiantes graduados es uno de los pocos indicadores con los que se cuenta para evaluar el desempeño de las universidades privadas en Costa Rica. Así lo han recalcado los investigadores del Programa Estado de la Nación.
Según el último informe del Estado de la Educación, publicado por ese think tank de académicos del sector público este mismo año, no existen registros públicos en “asuntos básicos como la matrícula, tiempos de graduación, costos y perfil de las personas estudiantes”.
“Por tanto, el sector que más profesionales gradúa es el menos conocido y a la vez el más opaco, lo que impide valorar si esta contribución se alinea o no con las prioridades de desarrollo del país”, criticaron en dicho documento.
A pesar de esa opacidad, es posible desprender algunas conclusiones de los datos de graduación que están disponibles.
Por ejemplo, es posible determinar que la mayoría de las personas que salen de estos centros se gradúan en ciencias económicas (30,2%) y educación (29,5%).
En cuanto a carreras Steam (de Ciencia, Tecnología, Ingeniería, Artes y Matemáticas, por sus siglas en inglés) lo graduados de universidades privadas son apenas un 25,8%, y la mayoría de ese grupo corresponde a estudiantes relacionados con ciencias de la salud (12,6%) e ingeniería (7,8%).
Además, se puede decir que esos graduados salen de una minoría de centros privados que se enfocan mayoritariamente en esas especializaciones, y no de forma generalizada en los diversos centros educativos.
¿Y cómo marcha el ritmo de entrega?
A nivel general, las universidades privadas emitieron 1.446 títulos menos en 2022 que en el año inmediatamente anterior, lo cual representa una caída del 5,3% en la comparación interanual.
Sin embargo, la reducción no debe verse como un dato particularmente sorpresivo.
Los números de 2021 alcanzaron niveles particularmente altos porque en ese período se habría acumulado parte de las graduaciones que se aplazaron en 2020, por la pandemia de la covid-19.
De hecho, los más de 26.000 títulos de grado otorgados por los centros privados representaron un 14,8% más que en 2020 y apenas un 3,8% menos que el promedio de 2014 a 2021.
La graduación en universidades privadas se mantiene más o menos estable en el país, en términos de cantidad de estudiantes; pero no pasa lo mismo con las ‘u’ públicas.
En las universidades del Estado, el dato de títulos emitidos en 2022 (14.0202) fue un 24,5% mayor que en el promedio de los últimos ocho años anteriores y un 3,6% mayor que el registro del año anterior.
La UCR y la Universidad Nacional (UNA) incluso alcanzaron las cifras más altas de los últimos nueve años (el período de estudio por EF).
Estos comportamientos inversos se traducen en una graduación general que, poco a poco, ha ido trasladándose del sector privado al público, según se desprende de las cifras y detectaron también los investigadores del Programa Estado de la Nación.
“La titulación de grado en el sector privado tuvo un largo periodo de expansión que se interrumpió en 2014, cuando empezó a bajar. Ese año, los centros privados contabilizaban el 75% de este indicador, frente al 25% de universidades públicas. Desde el 2015, el promedio de la participación privada en el otorgamiento de esos títulos fue reduciéndose”, apuntaron al respecto.
Hoy, como ya se decía al inicio de este artículo, la graduación del sector privado representa menos del 65% del total de títulos de grado.
En cuanto a las cifras generales de graduación, en 2022 se emitieron 40.250 títulos de grado. Esta es la segunda mayor cifra del último decenio, solo por detrás de los 41.186 del año 2021 y las 41.108 de 2015. En la última década, en promedio, se han otorgado 38.000 títulos de grado por año en todo el país.