Los costos de operación que la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope) transfiere a los consumidores en las tarifas de gasolina y diesel muestran una clara tendencia a la baja.
Un análisis de EF muestra que el 11 de noviembre del 2007 el precio del litro de gasolina súper (convertido a colones de junio del 2014) era de ¢865,3, de los cuales ¢87,3 (10% de la tarifa) correspondieron al margen de operación de Recope transferidos a los consumidores.
Para marzo del 2014, esa cifra había caído, paulatinamente, hasta ¢48 (6,7% de la tarifa de ese momento).
Tal monto es 47% menor que el registrado a finales del 2007. La diferencia representa casi ¢40 que dejó de pagar el consumidor en cada litro de gasolina súper solo por los costos de operación tranferidos por Recope.
Ese margen es conocido como el “factor K” en la fórmula oficial para estimar las tarifas al consumidor, que se suma a otras siete variables para llegar al precio final en las estaciones de servicio.
A la Aresep le corresponde aprobar o rechazar los gastos que se transfieren a las tarifas por parte de Recope para la estimación del factor K.
El factor K se estima con 11 indicadores, que pueden ser clasificados en tres categorías: aquellos que representan reservas de inversión de Recope (estos concentran alrededor del 37% del factor K); los que abarcan los servicios de importación de tal institución (acumulan el 21%); y los que concentran específicamente los gastos de operación (con el 42%).
Tanto en porcentajes como en colones de junio del 2014, la transferencia de gastos de Recope a las tarifas se ha hecho más liviana en el tiempo, según los resultados obtenidos por EF.
La misma tendencia a la baja en los costos operativos que transfiere Recope a cada litro de combustible se observa en la gasolina regular y diesel .
Estas conclusiones derivan de una base de datos creada por EF con información extraída de 36 resoluciones de la Autoridad Reguladora de Servicios Públicos (Aresep).
El conjunto de datos seleccionados dio seguimiento a la evolución, al menos cinco veces en cada año analizado, a cada una de las nueve variables que entran en juego en la fijación de la tarifa final que paga el consumidor por las gasolinas y el diesel en las estaciones de servicio de noviembre del 2007 a junio del 2014.
EF debió crear su propia base de datos con la evolución del factor K, ya que, tras la muerte de un funcionario, la Aresep perdió tal información.
¿Bajó sus gastos Recope?
La tendencia a la baja en el factor K responde a varios factores y no significa que Recope ha bajado el rubro de gastos de operación de esa variable.
Según datos proveídos por Luis Carlos Solera, encargado de los estudios económicos de Recope, del 2010 al 2011 la parte de los gastos operativos que componen el factor K creció de ¢70.000 millones a ¢78.000 millones (en valores del 2013), pero del 2011 al 2013 tales gastos se han mantenido prácticamente invariables.
Al mantenerse constantes esos gastos, según Solera, otros elementos altamente variables de la fórmula tarifaria, como el precio de los combustibles o el tipo de cambio, han llevado más ingresos a Recope para sufragar los gastos de su gestión.
“Si el precio de venta de la gasolina sube conforme al comportamiento del precio internacional y el tipo de cambio, lo generado por Recope en ingresos por factura petrolera, junto a gastos de operación que no crecen, entonces resulta innecesario aumentar el factor K”, dijo Luis Carlos Solera, de Recope.
Sin embargo, ese comportamiento explica solo una parte del fenómeno. Debe agregarse que la Aresep rechazó, entre el 2009 y el 2012, peticiones de Recope para incrementar el factor K en los estudios tarifarios, explicó Juan Manuel Quesada, intendente de Energía de la Aresep.
Además, según Quesada, en el 2011 se registró una rebaja tarifaria ocasionada por la devolución a los usuarios de un exceso de efectivo en Recope.
Según los datos de EF, tal devolución fue equivalente a casi ¢50 en diciembre del 2011 y rigió también en febrero del 2012 (en valores de junio del 2014).
Las críticas
Con el fuerte aumento del precio de los combustibles en junio de este año, ha llovido críticas sobre la función de Recope, especialmente por los sectores comerciales e industriales, que requieren una mayor eficiencia a la institución.
Como respuesta, una de las medidas propuestas por el presidente Luis Guillermo Solís para bajar el costo de los combustibles es disminuir, precisamente, el factor K.
Lo que parece ignorar el Gobierno, y que muestran los datos de EF, es que ese factor está bajando desde el 2007.
También que el peso de esa variable es relativamente bajo. En promedio, entre las 36 resoluciones seleccionadas del 2007 al 2014, el factor K ha representado solamente el 9% de las tarifas totales del periodo.
Según estimaciones de Aresep presentadas en una carta en respuesta al presidente, una baja de 10% en los gastos de operación que transfiere Recope a la tarifa se traduciría en pagar apenas ¢5 menos por litro de combustible.
Pese a ello, la presidenta de Recope, Sara Salazar, ha sostenido que todavía hay espacio para bajar ¢6.000 millones en costos.
De ser así, es posible que el peso del margen de operación de Recope en las tarifas se haga aún más pequeño.
Empero, las críticas a Recope van más allá del factor K.
Carlos Montenegro, subdirector ejecutivo de la Cámara de Industrias, sostiene que, antes de impuestos y otras cargas en la tarifa al consumidor, los combustibles que compra Recope son más caros que en otros países centroamericanos, donde hay participación de actores privados en el mercado de importación.
Esa y otras desventajas han despertado un movimiento para que se elimine el monopolio estatal de la refinación e importación de hidrocarburos, que, al menos, ante los medios, es liderado por el diputado y excandidato presidencial libertario, Otto Guevara.
Guevara aseguró que, más allá del factor K, le preocupa que Recope transfiera a la tarifa de combustibles los costos del proyecto de una nueva refinadora de combustibles en sociedad con el Gobierno chino. Sin embargo, aceptó no tener evidencia de que eso esté sucediendo.