Una economía moderna basada en el conocimiento: eso aspira a Costa Rica de acuerdo a la Política Nacional de Sociedad y Economía basadas en el Conocimiento, declarada de interés público por el Poder Ejecutivo en el 2018.
Sin embargo, Costa Rica dista mucho de alcanzar esta categoría según un estudio reciente del Programa Estado de la Nación (PEN), el cual analizó la penetración de las actividades económicas intensivas en conocimiento (AIC) en el país.
Las AIC son actividades económicas en las cuales más del 33% de las personas ocupadas en ellas cuentan con educación terciaria (desde diplomado a doctorado), de acuerdo a la Oficina Estadística de la Unión Europea (Eurostat).
En los países de la zona euro un 36,1% de las personas ocupadas trabajan en AIC. En comparación, la cifra en Costa Rica es de 25,8%.
“(Este estudio) aplicó criterios objetivos para valorar la medida en que la sociedad costarricense dista de convertirse en una sociedad basada en el conocimiento en virtud de la penetración de esas actividades en la estructura económica del país”, explicó un artículo del PEN.
Para esto, el PEN creó dos nuevas versiones del indicador AIC con el fin de adaptarlo a la realidad costarricense. El primero es el AIC-CR, el cual define un nuevo umbral en 27,2%, a diferencia del 33% de la Eurostat. El segundo es el AIC-CR-CyT, el cual se enfoca en las áreas científico-tecnológicas.
Principales hallazgos
Este estudio determinó, basado en datos del Instituto Nacional de Estadística y Censo (INEC, 2017), que el 39,2% de la producción de Costa Rica se clasifica como actividad intensiva en conocimiento (AIC-CR). Asimismo, las áreas científico-tecnológicas (AIC-CR-CyT) tienen una participación de tan solo 8,3% en la economía del país.
Por otra parte, se diagnosticó que a nivel de empleo solo un 30,7% de la población participa en AIC-CR y un 18% en las áreas científico-tecnológicas.
Esto se debe, en parte, a “la dificultad que tiene el país de suplir los requerimientos de recurso humano de alto nivel formado en ciencia y tecnología a los sectores más dinámicos”, concluyó el PEN.
Desde el punto de vista sectorial, un 78,2% de la población del país está empleada en el sector de servicios, un 11,3% en el sector de manufactura y un 10,5% en el sector agropecuario. De estos tres sectores económicos, la penetración de las AIC-CR es especialmente relevante en el sector servicios, donde un 38,3% de los empleados cuenta con educación terciaria.
Sin embargo, en la industria manufacturera el empleo en las AIC-CR es de tan sólo un 6,3% y nulo en el sector primario.
Retos
Si Costa Rica quiere llegar a ser una economía moderna basada en el conocimiento, el estudio del PEN señala algunos retos que el país debe afrontar.
En primer lugar, la escasa penetración de la educación superior en Costa Rica, la cual es de un 30,2% según datos del INEC, es uno de los principales obstáculos para desarrollar actividades económicas intensivas en conocimiento (AIC).
En segundo lugar, Costa Rica debe “mejorar en el nivel de cualificación del talento dedicado a las actividades de alto valor estratégico”, por ejemplo, la fabricación de instrumentos y suministros médicos y dentales.
Finalmente, el país debe aunar esfuerzos para modernizar el sector agropecuario a través de la investigación y la innovación.
El estudio concluye que aumentar la penetración de las AIC en el país es clave para que Costa Rica transicione de una economía de ingreso medio a una de ingreso alto.