Desde este viernes 1.° de octubre todas las empresas autobuseras del país entrarán a operar de forma provisional bajo la figura de “permisionarios” mientras se firman y refrendan los nuevos contratos de concesiones que vencieron el 30 de setiembre.
El Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) concluyó el proceso de evaluación de la capacidad empresarial y ahora la Junta Directiva del Consejo de Transporte Público (CTP) comunicará el acto de renovación a toda empresa que haya cumplido con los requerimientos generales.
Los 232 nuevos contratos a nivel nacional se firmarán “en las siguientes semanas” posterior al acto de renovación, comentó a este medio el viceministro de Transportes, Eduardo Brenes.
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Mientras tanto, las rutas de las empresas que no cumplieron con dichos requisitos deberán salir a licitación “en los próximos meses”.
La denominación de “permisionario” es una figura legalmente avalada que se usa para no afectar la continuidad del servicio público de transporte. Para efectos de las empresas, el permiso les da menos seguridad jurídica que una concesión al tratarse de un periodo transicional, explicó Iván Vicenti, gerente de Impuestos y Legal de Grant Thornton.
El permiso es de carácter temporal, modificable y no otorga toda la gama de derechos que da una concesión.
En la legislación no existe un periodo determinado que debe tener el periodo de permiso, pero Vicenti apuntó que debe ser un tiempo “razonable”, solo mientras se concretan los nuevos contratos.
“Esa renovación va a tener plena vigencia y efectos jurídicos a partir de que se firme el contrato y este sea refrendado por la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep)”, afirmó el abogado.
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Frente a los usuarios, las obligaciones de las empresas autobuseras se mantienen igual y, más bien, bajo esa figura no cabe la posibilidad de alzas tarifarias.
Si bien el panorama ideal habría sido que el día siguiente del vencimiento entraran a regir los nuevos contratos, Vicenti reconoció que es un proceso “con dificultades”.
Sectorización
Uno de los principales cambios que el MOPT introdujo en los contratos de concesión y que es una de las promesas de larga data es la puesta en marcha del plan de sectorización del Área Metropolitana de San José (AMSJ).
Un total de 35 empresas operan en dicha zona y serán parte de este plan.
En julio pasado se aprobaron los nuevos planes operativos que conllevan a las empresas a operar por sector y subsector, dijo el viceministro.
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La puesta en marcha de estos planes tiene un periodo de transición de 6 años, que se dividen en 5 etapas:
- Etapa de preparación.
- Etapas I, II y III de troncalización (servicios troncales y servicios alimentadores).
- Etapa de evaluación.
Para echar a andar la sectorización, dos requisitos fundamentales son el pago electrónico y la integración tarifaria.
El primer acercamiento a la sectorización será el plan piloto que estaría listo para el mes de abril del 2022.
Este contempla la selección de una de las varias troncales de un sector o subsector para operar la troncoalimentación de los servicios.
Para este plan se escogerán dos de los tres sectores escogidos para iniciar: Escazú-Santa Ana, Tibás- Santo Domingo y Moravia-Paracito.