Si en 2005 construir una vivienda en Costa Rica costaba unos $400 por metro cuadrado, para el 2014 rondó los $700.
Solo la mano de obra aumentó su costo en un 80%, en ese mismo periodo, según el análisis “7 realidades de la construcción en Costa Rica que no puede ignorar” elaborado por la firma BildTeck .
¿Qué provoca ese aumento creciente y cómo afecta al consumidor final?
Las razones son varias, y van desde una escaza competencia de productos para construir y normativas exigentes, hasta una innovación a paso lento en las tecnologías aplicadas en los procesos constructivos.
“En 20 años el precio del cemento se ha cuatriplicado, hay una escasez de competencia local que empuja esos precios y lo resiente el sector”, comentó Federico Amador, fundador de BildTeck.
Un mercado como el del cemento se concentra en tan solo dos empresas, Holcim y Cemex.
A ello, se suman otros factores, como un nivel de inflación al alza, que empujan también los precios.
A enero del presente año, el nivel de inflación interanual se ubicó en 4,39%, según el Índice de Precios al Consumidor (IPC); monto que significó un aumento con respecto al mismo mes del 2014 y que mantuvo una tendencia creciente entre febrero y noviembre de ese año.
“Hay que tener una ecuación financiera equilibrada, todo ejerce impacto en el sector. Tenemos un tema como la baja del petróleo que podría afectar positivamente dentro de unos seis meses”, dijo Olman Vargas, director del Colegio Federado de Ingenieros y Arquitectos (CFIA).
Es en la construcción sostenible y en nuevos conceptos como apartamentos tipo estudio, a lo que le apuesta el sector para seguir en pie dentro del mercado.
“Ese crecimiento en los costos se sortea de muchas maneras pues la gente siempre va a buscar una opción para comprar o construir”, comentó Carolina Fernández, directora de Mercadeo & Ventas de Kirebe Promotores inmobiliarios.
A su vez, una mayor oferta del mercado podría llegar a abaratar costos, para ello el sector financiero nacional tendría la clave. Pues la oferta de mejores condiciones crediticias impulsaría el ánimo de invertir.
“Aquí ya no juega solo el costo de la construcción para impulsar al sector”, comentó Vargas.
Causas claras
La aplicación de un decreto ejecutivo que redujo los aranceles a la importación de la varilla de metal en junio del 2013, al pasar del 15% a un 5%, es un precedente en el sector.
La puesta en marcha de la normativa coincide con disminuciones de hasta un 20% en el precio del material, según el índice de precios de la construcción del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC).
Para Randal Briceño, director ejecutivo de la Cámara Costarricense de la Construcción, este es el camino que debe de seguir el país. Afirma que ya existe la conciencia y la intención de seguir promoviendo esta iniciativa.
“Se logró con la varilla, pero este es solo uno de cientos de productos que se necesitan para construir”, agregó el directivo.
De acuerdo con BildTeck, el costo de la mano de obra y la cantidad de horas hombre que se necesita para construir una vivienda se suman al impacto de los costos en el sector.
El análisis señala que la cantidad de horas hombre necesarias para construir una vivienda unifamiliar en Estados Unidos y Australia es de 9,4 horas por metro cuadrado .
En Costa Rica, ese número alcanza entre 40 y 60 horas por metro cuadrado. .
“Los principales factores que inciden en la alta productividad en otros países son la tecnología avanzada de construcción. No estamos diciendo que se utilice menos mano de obra sino que se utilice de forma más eficiente”, subrayó Amador.
La necesidad de cumplir con normativas como la que obliga a tener que aportar un espacio de áreas comunes al construir un complejo de apartamentos, sin excusas, se mencionan como requisitos que si bien aportan calidad a la obra, encarecen el costo final.
“No es bajar la calidad de un edificio, de ninguna manera, pero existen algunas que se pueden obviar y no tener que trasladar ese costo al cliente”, comentó Briceño.
Soluciones a la mano
Cada vez más los desarrolladores buscan soluciones que generen ahorros en el proceso y éxito en la colocación.
En BildTeck le apuestan a los sistemas livianos. En vez de concreto utilizan perfiles de acero galvanizado para formar estructuras de alta resistencia.
Además, aportan ideas como la utilización de la tecnología Steel Framing , o construcción y producción asistida por computadora.
“La computadora se conecta a una máquina y esta produce las piezas de paredes, entrepisos y techos de la casa, lo que aumenta la productividad y calidad de la construcción”, señaló Amador.
En Kirebe Promotores Inmobiliarios la salida está dirigida a edificaciones lejos de lo convencional. Apartamentos tipo estudio es una de ellas.
“Vienen edificios solo de estudios, por ejemplo, es muy arriesgado para este mercado pero se va a hacer”, dijo Fernández.
En este punto, el tema cultural hace su aparición, y pone de manifiesto la necesidad de adaptarse a espacios cada vez más pequeños.
“Las desarrolladoras recurren a menos metros para ofrecer soluciones que se puedan adquirir. Vemos espacio de 33 metros cuadrados, que si bien en el país no se han disparado, en otras partes del mundo son una realidad”, enfatizó el director ejecutivo de la Cámara.
Crédito pesa
La solvencia del sector irá de la mano de la demanda. Para el 2015, la Cámara estima en un 4% el crecimiento en la cantidad de metros cuadrados tramitados.
Las condiciones de crédito se vuelven clave para alimentar ese crecimiento de la demanda en el mercado.
“La estabilidad hace que la gente se atreva. En el caso de la vivienda está claro que un dinamizador importante es el crédito bancario. Los bancos están planteando condiciones interesantes como financiamientos al 100%”, concluyó Vargas.